Difficult Love (Jikook/Kookmin)

Capitulo 3

El momento había llegado, Jimin ya estaba vestido de un niño pequeño y se encontraban a unas cuadras de la casa del pedófilo en una camioneta

— Tocarás su puerta y cuando abra le ofrecerás alguna de estas galletas, El punto es que debes entrar a su casa para asesinarlo.

— Esta bien... - Dijo Jimin nervioso mientras Jin le colocaba el pequeño micrófono.

Jimin escucharía todo lo que dijeran los chicos gracias a un pequeño audífono que se encontraba en una de sus orejas, era pequeño y a simple vista no se alcanzaba a ver mucho gracias a que un mechón de su cabello lo cubría, bajó de la camioneta y comenzó a caminar hacía la casa de este con una pequeña caja de galletas.

Jimin se encontraba nervioso ya que lo hacía recordar a su padre, Al llegar tocó la puerta y después de un pequeño tiempo aquel hombre viejo abrió.

— Buenas tardes señor ¿No gustaría comprar una de mis galletas?

— ¿Galletas?

— Si.

— Solo porque eres lindo y tierno te compraré más, Puedes entrar mientras yo voy a mi habitación por un poco de dinero ¿Qué te parece?

— Esta bien.

Jimin entró y cerró la puerta.

— Tiene una muy linda casa señor.

Mientras el señor subía a su habitación, Jimin dejó las galletas en la mesa grande de la sala y comenzó a cerrar las cortinas de las ventanas, Miró una caja de chocolates que estaba en una de las mesitas de la sala y tomó uno.

— Jimin deja ahí no sabes si tiene alguna droga. - escuchó la voz de Namjoon en el audífono.

— Pero...

— Deja ahí Jimin. - habló de nuevo Namjoon.

Jimin caminó a la cocina y tomo un cuchillo, al escuchar pasos bajar regresó rápidamente a la sala y colocó el cuchillo detrás de su espalda, Al mirar al señor con una cuerda y cinta tomó con más fuerza el cuchillo.

— te topaste con la persona incorrecta niño.

— Y tu igual - Sonrió y colocó el cuchillo enfrente suyo. - ¿Cuales son tus ultimas palabras? Hoy es el día de su muerte, ¡Felicidades!

Jimin sonrió mostrando sus dientes, el hombre viejo soltó las cosas y trató de correr hacía las escaleras pero rápidamente Jimin tomó la cuerda que estaba en el suelo y lo colocó alrededor del cuello de este, lo jaló con todas las fuerzas que pudo así haciendo que callera al suelo.

El cuchillo que antes traía Jimin en sus manos lo había puesto detrás en uno de sus bolsillos del pantalón Mientras seguía sujetando la cuerda con fuerza y el hombre viejo intentaba quitársela, Jimin sacó guantes de sus bolsillos y se los colocó como puedo.

— Veamos que forma sería más divertida de que mueras... - En ocasiones Jimin aflojaba la cuerda para que el señor pudiera respirar.

— Por favor no lo hagas...por favor, por favor.

— Dime... ¿A alguno de los niños que te decían lo mismo les hiciste caso?

— De verdad lo siento...

— Eso debiste decírselo a todos los niños.

Jimin lo jaló de la cuerda hasta encontrar una libreta y bolígrafo.