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Ayelén.

- Ayelén, me voy a comprar, vuelvo en media hora aproximadamente. Ojo lo que hacen. -Dijo Esteban saliendo de su habitación.

- Tranquilo Esteban, igualmente en unos minutos ya me voy, tengo que terminar de estudiar. -Dijo Nerea.

Esperamos a que se escuche el ascensor y una vez que nos aseguramos de que se haya ido, pudimos hablar.

Era la primera vez que hablábamos completamente solas, siempre estaba Esteban acá, era raro que se haya ido y haya querido dejarme sola, pero bueno, mejor

- ¿Por qué no me estás diciendo que es mi momento de escapar, Nerea?. -Pregunté.

- Porque aún no lo es. -Dijo Nere y la miré confundida- Necesito sacarle fotos rápido a tu cuerpo.

- Nerea, ¿Qué mierda estás haciendo?

- Planeando algo para ayudarte, pero ahora dale rápido, las fotos que te saqué disimuladamente no se ven bien.

Me sorprendí un poco pero rápidamente pudimos sacarme buenas fotos, todavía no entiendo que está pasando.

- Amiga, por favor no hagas ninguna locura. -Pedí con miedo a que le pase algo a ella.

- Mereces salir de éste infierno, Aye.

- Sí, lo sé, pero resistí toda mi vida, no me hace nada resistir  unos meses más, si en cualquier momento me mata, y lo sabes, no podemos evitarlo. -Dije secandome una lagrimita.

- Sí, se puede. Y de eso me estoy encargando. -Dijo firme.

- Dios Nerea, ¿Me podés contar? Se trata de mí vida no podés hacer como sí nada.

- ¿Viste los chicos que te conté? -Preguntó y negué por lo que rodó los ojos- Mis amigos famosos, estúpida.

- Ah, sí. ¿Qué tienen?.

- Les conté de tu situación -Abri los ojos alterada, confié en ella- Tranquila estúpida, me están ayudando, están moviendo contactos y estamos preparando todo, estamos ya a punto de conseguir un buen abogado y meter denuncia, en cualquier momento se termina este infierno amiga, vas a dejar de sufrir.

- ¿Esteban va a ir preso?. -Pregunté con cierto tono de ilusión

- Esa es la idea, estamos haciendo todo para que sí, vaya preso como mí papá y vos no sufras más.

- Nere, soy menor, ¿Y mi tenencia? Apenas cumplí 17.


- Mi mamá va a hablar con el juez que esté a cargo de todo para que ella quede como tu tutora, estamos buscando una casa para irnos a la mierda ni bien salga todo bien, porque así va a ser -Sonreí y la abracé, no podía creerlo.

Se estaba arriesgando un montón por mí, ella, su mamá y sus amigos que ni siquiera me conocen.

- Gracias amiga, gracias por nunca dejarme, por acompañarme, por ayudarme, por contenerme, por absolutamente todo enserio, no me va a alcanzar la vida para agradecerte. -Dije sin soltarla del abrazo.

-No me tenés que agradecer nada, sabes que sos como mi hermana -Sonrei y asentí- Tu papá merece estar en el mismo lugar que mi papá, son los dos unas basuras, ya van a estar ambos pagando por sus macanas. Te prometo amiga que pronto se va a acabar toda esta mierda, ya vas a poder ser aunque sea un poco feliz, tu vida va a cobrar sentido, no te voy a soltar nunca, ¿sí? -Dijo para soltarnos del abrazo y dejar un beso en mi frente. Igual, si no fuese por los chicos, en especial Mateo, no podría. Así que nada, me voy yendo. Espero volver con buenas noticias. -Dijo para luego irse.

Ojalá salga todo bien, ya no aguanto más este infierno, si sale todo mal, no me va a quedar otra que terminar matandome, porque prefiero eso antes que seguir bancando todo lo que me hace pasar Esteban.
Morir sería lo más mínimo, solo espero que lo que está planeando Nere y sus amigos, salga bien...

resistir ; truenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora