𝙻𝚘𝚟𝚎 𝚖𝚎 ▪️ 𝚒𝚗𝚝𝚎𝚗𝚊𝚋𝚘 ▪️ GTA Roleplay

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El dulce olor despertó todos sus sentidos, revolviendo su cuerpo sobre las grúas sábanas que lo arropaba, sintiendo unos leves escalosbrios al notar la ausencia de su Alpha.

Retiro las sabanas con suavidad, olfateando con timidez el dulce olor a café.

La regadera ser abierta hizo alertar sus oídos, caminando lentamente hacia la puerta del baño.

— ¿Conway? — Llamó, pegando su oreja a la puerta.

— Vete — Ordenó suavemente, sumergiendo su caliente cuerpo en haya fría, soltando un pequeño gruñido en el acto — Dije que te vayas, capullo.

— ¿Paso algo, superintendente? — Pregunto más preocupado, tratando de abrir la puerta, notando como estaba cerrada por dentro — ¿Conway?

— ¡Estoy bien, cojones! — Se exalto, soltando feromonas por su descuido — Ahg, anda, ¡Pirate!, deja de tocar los huevos — Habló con descuido, masajeando su cuerpo contra el agua.

— Pero... ¿Se siente bien? Lo escucho... Diferente — Preguntó entre susurros, pero siendo audibles por el Alpha.

— Escúchame muy atentamente, capullo, me siento de puta madre, así que vete, ve a hacer el gilipollas con tu amiguita come pollas y déjame hacerme la paja a solas, ¿Oíste? — Dijo con brusquedad, sumergiendo aún más su cuerpo en la bañera.

— 10-4 Superintendente... ¿Se está masturbando de verdad o solo es una escusa para que me vaya? — Pregunto curioso.

El dulce olor solo indican que estaba en lo cierto, pero quería confirmarlo por su propia boca.

— Si, estoy pensando en tu puta madre cuando la fui a visitar anoche, capullo.

— 10-4

Se vistió rápidamente con su uniforme y máscara, modelando a un pequeño espejo delante de él. Tomó su móvil y finalmente se perfumo con Feromonas de Alpha falso.

Antes de salir de la habitación, miro la camiseta con la que había dormido, tomándola entre sus manos y abrazándola como cualquier peluche.

Al estar al menos un par de minutos pagado a la prenda, la dejó sobre la cama hecha bolita, tocó la puerta del baño esperando respuesta.

— Conway... Espero no le moleste, dejé mí camiseta con mis feromonas... Por si necesita ayuda o algo... La dejaré en la cama... Nos vemos — Salió de casa con su rostro tapado, procurando que nadie lo este observando.

El Alpha al sentir la presencia del Omega alejarse, salió de la bañera, tomando una toalla y rodearla en su cintura.

Asomó su cabeza a la habitación, divisando la camiseta.

Apenas unos pasos dentro de la habitación, noto como de está estaba rodeada de feromonas a caramelo.

Tomó la camiseta y olfateó deseoso y desesperado.

— Mierda — Murmuró por lo bajo, sintiendo su miembro despertar a los segundos, balbuceando barbaridades mientras acostaba su mojado cuerpo sobre la cama, acomodando la camiseta del Omega en su rostro.

Masturbándose entre esas cuatro paredes ya no era lo mismo, se sentía más solo de lo que estaba acostumbrado, necesitaba la presencia de su Omega a su lado, la necesitaba, lo necesita.

— Puto Mariconetti de mierda — Balbuceaba entre jadeos, masturbando su miembro con rapidez y agilidad, tirando su cabeza hacia tras cada vez que sentía pequeños orgasmos, dejándola reposar sobre la cabezera.

°•°•°

La llegar a comisaria, nada más salir del coche se encontró con su amigo, que para su sorpresa no vestía como Dan, sino como Horacio.