𝙻𝚘𝚟𝚎 𝚖𝚎 ▪️ 𝚒𝚗𝚝𝚎𝚗𝚊𝚋𝚘 ▪️ GTA Roleplay

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No respondió a la pregunta.

— ¿Conway? — Lo llamo preocupado el de cresta, mirando como el cuerpo del más alto se había puesto tenso con escuchar la pregunta — ¿Se encuentran bien? — Se acercó.

El Alpha por instinto retrocedió, siendo un mensaje directo para el Beta.

— Si, solo pensaba, no te preocupes.

Horacio creyó la pequeña mentira del más alto, sin darle más importancia a su actitud, giró su cuerpo para ver al dormido de su hermano descansar, sonriendo de lado.

El Alpha perdido en sus pensamientos, no lograba crear una respuesta válida ¿Eran algo? ¿O era algo más pasajero? Estaba confundido. Su pobre mente solo daba vuelta en solo una persona. Gustabo

El Beta con algo más de valentía, encaró al superintendente de frente, quedando a tan solo unos metros de distancia. Era curioso, y necesitaba confirmar sus sospechas.

— Conway, dígame, estamos en confianza — Habló Horacio, tocando el hombro del Alpha para que así le mirarán a los ojos — Todo lo que venga que ver con Gustabo, también tiene que ver conmigo — Sonrió, tratando de convencer a su jefe.

Buscaba otra mentira, algo que sea creíble para del Beta, con algo que le sacará las dudas. Su mente estaba en blanco.

Le dolía ocultarle cosas a alguien quien considera familia , pero tampoco quería tener problemas con su Omega, tiene que recordar que nunca confirmaron nada, por mucho que le duela.

— Bueno, quiero que hagas memoria ¿Vale? El gilipollas vive en mí casa, y con toda esta situación he decidido quedarme unos días con él, más que nada para que no hiciera una locura — Explicó.

— ¿No hizo nada malo? Usted ya sabe lo que podría pasar en situaciones de estres — Murmuró cerca de su oído, sintiendo el miedo que el Beta le transmitía.

Se le había olvidado ese detalle. Ese pequeño y molesto detalle.

Pogo.

— Tu no te preocupes, estoy muy seguro que Pogo no ha aparecido — Habló con total calma, observando a lo lejos al Omega removerse inquieto sobre el sofá — Creo que está despertando.

Se acercó al rubio con lentitud, agachándose hasta estar a la altura de su rostro.

— ¿Has despertado, princesa? — Pregunto apenas vio los ojos celestes del rubio.

— He despertado.

Se incorporó sobre el sofá soltando pequeños gruñidos adoloridos, tocando la parte trasera de su cabeza, su nuca, para ser preciso, con molestia.

— ¿Que me ha pasado? No recuerdo nada — Murmuró por lo bajo, aferrándose con sus brazos al cuello del Alpha, abrazándolo delicadamente.

— Gustabo, ahora no es el momento — Susurró avergonzado, podía ver claramente la sonrisa traviesa del Beta detrás suya.

— ¿Horacio?... ¿Eres tú? — Balbuceó el Omega, apartándose del Alpha para ir a los brazos de su hermano, llorando en su hombro — H-horacio, pensé que no te volvería a ver. Perdón, perdón... Yo.

— No te preocupes, Gustabo, ya estoy aquí — Acaricio suavemente su cabeza, atrayendo más al Omega a su cuerpo.

— Estaba tan asustado, estos cuatro días lo he pasado fatal — Balbuceaba torpemente, secándose sus lágrimas con el hombro del Beta.

Beta y Alpha se observaron.

— Si... Cuatro días... Fue una pesadilla — Con miedo en sus palabras, se separó del Omega lentamente, mirando sus ojos para luego sonreírle — ¿Cómo te sientes?