[Kidge] Red, Green & Love

» Guiándome hacia ti

Créditos a su respectivo artista.

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Guiándome hacia ti

Continuación de: Me casaré con Katie Holt | No se lo digas a Keith | Genes Galra

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Habían logrado formar Voltron cuando la situación lo ameritaba, sin embargo durante el entrenamiento simplemente nada funcionaba y por más que lo intentaban era difícil unir a los leones.

Todos pensaban que solo era cuestión de tiempo para que los paladines hicieran click y pudiesen pilotear como era debido... pero una sola palabra fue la causante de una gran turbulencia dentro de su intento de equipo, si antes era difícil esta vez era imposible formar Voltron.

―He detectado genes Galra en el bebé que Pidge está esperando.

Galra.

Esa palabra fue suficiente para que todo se pusiera de cabeza. Al principio la incredulidad no cabía en ninguno de ellos, nadie sabía la existencia de aquellas criaturas hasta que encontraron al león azul y viajaron al espacio, así que era imposible que Pidge estuviese esperando un hijo de un Galra.

―¿Lo sabías? ―la voz de Allura era dura, llena de desconfianza.

―¿A qué te refieres? ―Pidge despertó después de algunos Vargas[1] estando dentro del Sleep Pod[2] recuperándose. No entendió por qué el ambiente era tan tenso; por qué Shiro, Lance y Hunk la miraban con tanta preocupación mezclada con confusión, James parecía casi ido intentando procesar las simples palabras que Corán había dicho, este mismo solo estaba serio siendo ajeno a la conversación y Allura... ella la miraba de tal manera que fue suficiente para que Katie se pusiera alerta y a la defensiva.

―Estás embarazada ―la ausencia de sorpresa en Pidge solo hizo que la princesa se enojara más―. ¿¡Por qué no lo dijiste!?

―¡Eso no te incumbe a ti! ―la castaña llevó las manos a su vientre. Claro que lo sabía, era su cuerpo, se conocía perfectamente como para saber lo que le pasaba. Lo peor era que se había dado cuenta después de la desaparición de Keith y Samuel―. Si les hubiera dicho ellos no me habrían dejado poner un pie dentro de Blue.

Señaló a Shiro, Lance, Hunk y James. Katie subía todos los días al techo del Galaxy Garrison, equipada con todo lo que le permitiese obtener alguna señal del espacio que le indicara que ellos seguían vivos, hasta que los cuatro chicos le descubrieron. Fue entonces que una noche captó una interferencia extraña, sin embargo provenía de la Tierra y cuando fueron a investigar se toparon con el león azul.

―Pidge, tienes razón ―Lance irrumpió en la conversación―. Jamás te permitiríamos hacer algo que te pusiera en peligro... pero eso no es lo que nos tiene a todos consternados.