"Incluso si eres veneno, te besaré como si fuera el destino, bebé, incluso si es un final triste, sigue y sigue."
Nori Namikaze es la perfecta hija del jefe de la policía, pero no puede evitar caer enamorada por el cliché del chico malo. ¿O no?.
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Las semanas luego de la salida con Shu-san habían ocurrido demasiado rápido para su gusto.
Por suerte algunas cosas habían mejorado, empezando porque Nori no debió terminar el trabajo con Sasuke. Todo gracias al maravilloso amigo que tenía.
Luego de una semana entera de insistencia -por parte de Chouji- Kakashi había aceptado cambiar los equipos del trabajo en dúos. Lamentablemente, para el Akimichi, su profesor decidió que Sasuke quedase con él y Nori hiciera la escena con Ino, pero era mejor que vivir con el miedo constante que ese demonio le hiciese algo a su mejor amiga.
Nori todavía estaba sin un centavo después de pagarle una cena de agradecimiento a su amigo, pero no le importaba, no si él debía soportar al engreído Uchiha. Realmente agradecía tener un amigo tan leal como Chouji.
Y aquello no era lo único bueno que le había ocurrido el último mes.
Había comenzado a hablar con Shu-san casi a diario. No sabía exactamente el porqué, simplemente disfrutaba habar con el mayor, tenía una mirada del mundo demasiado interesante y nunca se quedaban sin tema de conversación. Eso era algo extraño en ella, ya que no le agradaba mucho hablar con la gente, pero por alguna razón él sacaba su lado más comunicativo.
Pero lo extraño era lo bien que congeniaban. Ambos se parecían más de lo que creían, se la pasaban hablando de como cuidaban a sus hermanos, de la manera en la que sus padres los presionaban para ser los mejores y del porqué ninguno tenía demasiados amigos.
Nori amaba hablar con ese chico y no entendía el porqué, nunca estuvo tan ansiosa por una simple respuesta, mucho menos sonreía tanto cuándo alguien más le mandaba un mensaje, era algo que sólo ocurría cuándo Shu-san le hablaba.
—¡Tierra llamando a Nori!.-Escuchó gritar a su mejor amiga, y rápidamente levantó la mirada, encontrándose con Shikamaru e Ino, ambos frunciendo el ceño por cómo se encontraba su mejor amiga.
Y es que la rubia menor había comenzado a sonreír de manera sumamente tonta mientras miraba el teléfono, cuándo cinco minutos ántes las dos muchachas estaban peleando con el Nara para colocarle una mascarilla justo como las que ellas tenían puestas.
—Parecías en tu mundo. ¿Ocurre algo?.-Preguntó Ino mientras tomaba el rostro del chico de cabellos negros y simplemente comenzaba a colocar la mascarilla aprovechándose de su propia distracción.
—Ino, me gustan lo hombres, pero no por eso me gustan estas cosas.-Se quejó el Nara, pero su amiga no dejó de colocarle esa sustancia fría en su rostro. Realmente Shikamaru no entendía como sus mejores amigas se ponian eso por gusto, era desagradable.
—Chouji es heterosexual y las ama.-Mencionó Ino de manera obvia, pero su regordete amigo no se encontraba con ellos gracias a que tenía una cita de aniversario con su novia, por esa razón estaba utilizando a Shikamaru como su conejillo de indias.
