El ambiente de la sala común de Hufflepuff estaba sumido en la tensión de la historia que Shelby estaba contando, la mayoría eran los de primer año quienes no podían dormir en su primera noche.
—El Zouwu me estaba persiguiendo, no sabía dónde esconderme de esa bestia—La rizosa estaba sobre uno de los sillones de la sala común contando su azaña inventada. —mi varita estaba a unos pasos de mi pero fue imposible alcanzarla cuando caí al piso. —Un silencio de suspenso se hizo presente en la sala común. —De repente ¡PUM! —Grito haciendo que los alumnos dieran un brinco en sus lugares. —el Zouwu se encontraba encima mío, pensé que me comería o me dejaría alguna marca de la que no me podría deshacer en toda mi vida, ¡Pero no! Porque logré alcanzar mi varita y conjurar el hechizo que la hacía un juguete para el pequeño Zouwu y finalmente entro a mi valija. —Sonrio mientras los más pequeños de Hufflepuff aplaudían ante su historia. —Gracias, gracias, pero ya es tarde y deben ir a dormir o el Zouwu de mi maleta se los comerá. —Rio levemente. —Recuerden que estas hermosas criaturas solo son amigos y ninguno tiene derecho a ser maltratado. —Dijo sosteniendo a su niffler en sus manos.
—Buenas noches. —Dijo Teddy mientras veía como se iban los de primer año a sus respectivas habitaciones. —No sabía que te llamabas Newt. —Bromeo el metamorfago acercándose a donde estaba Shelby.
—Oh, vamos, nunca está mal cambiar la historia para agregarle un poco de magia. —Rio levemente sentandose en el sofá en el que anteriormente estaba parada. —¿Vamos a hacer guardia? Me estoy congelando. —Dijo levantándose dispuesta a irse.
—Primero, ponte esto. —Respondio dándole su abrigo.
—Te vas a congelar tú, no puedo aceptarlo. —Nego levemente con la cabeza, Shelby.
—Tengo más capas de abrigo, póntelo, tu solo tienes un sweater y una remera. —Insistio hasta que la chica desistió.
—Bien. —Rodo los ojos mientras se ponía el buzo que decía Hufflepuff en la parte del frente y le quedaba gigante. —Oh, por Helga, es genial, creo que perdiste un buzo. —Rio levemente mientras ponía las manos en los bolsillos para calentarlas.
—Vamos. —Rio suavemente, tomándola de los hombros y llevándola fuera de la sala común para comenzar a recorrer los pasillos.
Ambos prefectos caminaban por los pasillos vacíos asegurándose de que todo estuviera en orden. Sumidos en un tranquilo silencio, solo disfrutando de la compañía del otro. Luego de varios minutos en silencio, comenzaron a hablar de temas triviales, no necesariamente serios.
—Okay, okay, ¿Puedes ponerte orejas de gato? —Rio levemente viendo al chico.
—Claro. —se encogió de hombros haciendo que dos orejas aparezcan de entre su pelo celeste.
—¿No puedes convertirte completamente en un animal? —Pregunto curiosa.
—No soy un animago, Shelby. —Rio levemente. —Solo puedo cambiar una parte de mi cuerpo, como mi pelo. —Dijo haciendo que, en un segundo, el mismo cambiara a todos los colores del arcoiris.
—Cool. —Rio levemente viendo su pelo. —Si corto tu pelo ¿pierde su magia? ¿Cómo Rapunzel? —Bromeo haciendo referencia a una película muggle, solo con el podría hacer eso.
—Si. —Afirmo riendo levemente.
—¡Eres una verdadera princesa! —Rio. —Lamento informarte que nadie me quita mi puesto, pero puedes ser el príncipe.
—¿Y ser tu esposo? Eugh, no. —Bromeo riendo.
Los Hufflepuffs siguieron caminando por los pasillos mientras hablaban.
—¡Tengo una idea! —Dijo Shelby parando de caminar.
—¡Qué milagro! —Rio, Teddy.
—Ahora por decirme eso voy a hacerla sola. —Le saco la lengua.
—Oh, vamos, dime. —Dijo acercándola más a él con el brazo que tenía sobre sus hombros.
—Vamos a la cocina, hacemos algo de comer, algo para tomar y vamos a la sala comun a ver una película. —le sonrió.
—Me parece perfecto. —Le devolvió la sonrisa dulcemente.
A partir de la guerra, los elfos domésticos habían comenzado a ganar por su trabajo y no debían trabajar todas las horas del día, por lo tanto, por la noche las cocinas estaban vacías.
Shelby puso música con su celular y comenzado a cocinar al ritmo de las canciones que sonaban.
—Y al horno. —Dijo alargando la "y" mientras metía la mezcla en el horno.
—¿Y ahora qué? —Pregunto Teddy viendola.
—A esperar. —Se encogió de hombros mientras metía la mano en la bolsa de harina y le tiraba en la cara al chico.
—¡Hey! —Se quejo acercándose a donde estaba la bolsa, poniendo sus manos en la misma y pasando sus manos por la cara de Shelby riendo.
Las risas y la guerra de harina siguieron por casi una hora, cuando el temporizador anunciaba que ya estaba listo el pastel, ambos se encontraban bailando al ritmo de Michael Jackson.
—¿Llevamos jugo para tomar? —Pregunto Teddy asomándose en la heladera a lo que la chica asintio.
Ambos caminaron hacia el patio a hacer una especie de picnic nocturno, en vez de ver una película.
Cuando la brisa corría, helado la narices de ambos, Shelby se aferraba al buzo del chico intentando resguardarse del frío.
—Ven aquí. —Dijo extendiendo su brazo para que la chica se acercara a su lado.
—Teddy... —Por un momento se hizo presente un silencio de tensión, Shelby no sabía expresar con palabras lo que sentía por el chico. —Te amo. —Soltó sin más. —Sí, y me gustas, por si no quedo claro. —Parecia bastante decidida a hacérselo saber.
—Se supone que yo debería haberlo dicho primero. —Rio levemente. —Arruinaste mis planes, pero no me molesta. —Sonrio bajando la vista del cielo para verla a ella. —Yo también te amo. —Ambos lo habían dicho de la manera más tranquila posible, preferían hacer el momento más cómodo que romántico.
—Oh, bueno, supongo que, deberíamos, no sé ¿Besarnos? —Bromeo riendo levemente.
—Yo estoy bien así si no quieres. —Mintio ocultando la sonrisa de sus labios.
—No lo sé, en los libros siempre pasa eso, o en las películas, soy inexperta en el tema. —Rio la chica mirándolo.
—Entonces somos un par de inexpertos. —Sonrio bajando la cabeza para besarla suavemente.
Shelby no hubiera imaginado que su primer beso sería tan magico, pero estando en Hogwarts, no podía esperar menos. El momento era realmente perfecto, la luna y las estrellas alumbraban suavemente la fría noche, ellos estaban abrazados besándose. La chica no podría haber imaginado un mejor escenario que ese.
Notó de reojo como el pelo del chico se volvía color rosa chicle, por lo que se separó de los labios del chico, sorprendida.
—Tu pelo cambio de color. —Dijo viéndolo sonriendo levemente.
—Oh, si, culpa tuya. —Rio levemente volviendo a unir sus labios sonriendo.
//Créditos del gif a @Alessia.Trunfio (en Instagram)//
//N/A: Hola, vengo a decirles que gracias por todo el apoyo, llegamos a las 1k de lecturas aaaa 🤧💛 los amo gracias por tanto//
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One-Shots (Harry Potter)
Short Story🐾 I solemny swear that i'm up to no good🐾 Mrs Prxrx is pround to present Harry Potter One Shots!¡ 🐾Mischief managed🐾 [TEMPORALMENTE PAUSADA?]