One-Shots (Harry Potter)

Metamorfaga- James Potter

Las clases de historia de la magia eran una de las más aburridas a ojos de Iris Scamander y James Potter, pero para su suerte ambos compartían aquella clase, aún mejor, eran mejores amigos.

Iris miro divertida al pelinegro, captando su atención, haciendo una cara extraña a lo que James rio levemente y escribió en un papel algo, el mismo voló al escritorio de la metamorfaga.

"Te crees muy lista?" Su caligrafía era perfecta, la peliamarilla sonrió levemente para luego escribir algo y volver a tirárselo.

"estoy segura que ganaré, Potter. >:)"
Así fue como comenzó una batalla de caras divertidas a espaldas del profesor, el primero que reía más fuerte perdía.

Una bolita de papel le pegó a cada uno, haciéndolos voltear, encontrándose con Remus quien hizo una mueca de confusion las cuales los chicos ignoraron y siguieron con lo suyo, por otro lado Sirius parecía bastante entretenido con aquella pelea.

Finalmente cuando el profesor estaba dado vuelta, en el maldito momento en el que volteo a ver a sus alumnos James perdió el juego soltando una sonora carcajada que se escuchó por todo el salón silencioso.

-¿Le parece divertido como murieron miles de personas en una guerra, Potter?-Dijo con desprecio el profesor Binns.

-N... -El ojiverde se vio interrumpido por la risa baja de la chica con la que hace unos segundos había estado peleando.

-¿A usted también, Scamander? Bien, si les parece tan gracioso ambos están en detención luego de clases limpiarán este desastre sin magia. -Sentenció serio.

Ambos amigos rodaron los ojos al mismo tiempo sin darse cuenta.

-Otra falta de respeto y les quitaré puntos a sus casas y haré que no vuelvan a jugar quidditch. -Respondio.

El Gryffindor y la Hufflepuff se quedaron callados susurrando un "perdón profesor", ambos sabían que no podían sacarlos del equipo por nada del mundo.

El pelo de la chica paso de amarillo (alegría y diversión) a un color azul claro (tristeza o culpa), no podía evitar sentirse culpable de meter a James en problemas y el ojiverde lo sabía.

Luego de clases Potter tuvo que aguantar las disculpas de la chica por casi media hora.

-De veras lo siento, fue todo mi culpa, si quieres puedes irte yo terminaré todo por tí, perdón James. -Lo cierto es que el chico ya la había perdonado todas las veces que la chica pidió perdón.

-Iris. -Dijo en un tono bajo mientras escuchaba las súplicas de la metamorfaga. -Iris. -Dijo más alto para que peliazul lo escuchara pero ella seguía hablando de lo arrepentida que estaba. -¡Iris! -Gritó finalmente al borde de la ira.

El pelo de la Scamander cambio a un tono negro (miedo) mientras se encogía en su lugar viendo al chico, quien en ese momento la estaba intimidado.

-Perdon, no te quise asustar. -Dijo más tranquilo acercándose lentamente a la chica.

Automáticamente los cabellos de la ojiazul volvieron al color que estaban antes.

-Ya está, ya pasó, te perdono, tranquila ¿Si? -Dijo sonriéndole en un intento de tranquilizarla, ella simplemente asintio abrazando al chico mientras su pelo pasaba a ser color rosa pastel, James simplemente sonrió satisfecho. -Ahora terminemos esto así no nos perdemos el almuerzo.

Lo que quedaba de acomodar se la pasaron hablando de Quidditch, criaturas fantásticas; las cuales por herencia le fascinaban a Iris, próximas bromas por parte de James, profesores, etc.

-James...

-¿Dime? -Dijo sentandose en una de las mesas, ya había terminado su trabajo.

-¿Es verdad lo que dicen? -Su pelo estaba en color azul nuevamente. -¿Sobre tu y Lily? -Volteo a verlo.