One-Shots (Harry Potter)

Head first- Sirius Black

“𝗬𝗼𝘂'𝘃𝗲 𝗴𝗼𝘁 𝗮 𝗵𝗼𝗹𝗱 𝗼𝗳 𝗺𝗲
𝗜'𝗺 𝗱𝗶𝘃𝗶𝗻𝗴 𝗶𝗻 𝗵𝗲𝗮𝗱 𝗳𝗶𝗿𝘀𝘁
𝗛𝗼𝗽𝗶𝗻𝗴 𝗜 𝗰𝗼𝘂𝗹𝗱 𝗹𝗼𝘃𝗲 𝘆𝗼𝘂 𝘀𝗼 𝗿𝗲𝗰𝗸𝗹𝗲𝘀𝘀𝗹𝘆
𝗬𝗼𝘂 𝗵𝗶𝘁 𝗺𝗲 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝗮 𝘁𝗶𝗱𝗮𝗹 𝘄𝗮𝘃𝗲, 𝗜'𝗺 𝗳𝗮𝗹𝗹𝗶𝗻𝗴 𝗼𝗳𝗳
𝗬𝗼𝘂 𝗴𝗼𝘁 𝗺𝗲 𝗵𝘆𝗽𝗻𝗼𝘁𝗶𝘇𝗲𝗱, 𝗺𝗲𝘀𝗺𝗲𝗿𝗶𝘇𝗲𝗱”

Emma, todos la conocían por su belleza inminente, por su carácter atrayente, pero sobre todo, porque siempre conseguía lo que quería. A sus cortos dieciséis años la Slytherin ya había salido con cinco personas del colegio, sin contar con quienes se había besado. Cualquiera podría enamorarse de ella, incluído Sirius.

El pelinegro era conocido por su fama entre las chicas, no era muy distinto a Emma, Black también conseguía lo que quería si se lo proponía.

—Lunatico, mi buen amigo. —Sonrio levemente mientras pasaba un brazo por los hombros del morocho.

—¿Ahora que quieres, Canuto? —Lo miro de reojo mientras seguía escribiendo en su pergamino.

—Verás, tengo un trabajo de pociones que hacer pero no tengo tiempo porque debo ir con James ¿Podrías hacerlo por mi? —Sonrio fingiendo inocencia mientras dejaba el trabajo sobre la mesa y se lo acercaba.

—Esta no es tu letra. —Lo miro alzando una ceja pero para ese entonces Sirius ya había salido del retrato de la dama gorda dejando a Remus confundido.

Sirius no había ido con James, había ido a ver donde se encontraba Emma, últimamente había estado muy encaprichado con ella pero sabía que con el tiempo se le pasaría.

Emma todos los viernes por la tarde caminaba por los terrenos de hogwarts, con suerte, sola.

Claro, Black no había perdido la oportunidad de invitarla a salir, y a pesar de que pensó que era fácil, la Slytherin se negó por completo.

Allí estaba ella, hablando con Lucius, últimamente los había visto muy cercanos y no le agradaba para nada aquello. No quería admitirlo, pero lo que sentía por ella era más que una simple atracción, porque a pesar de que intentaba ocultarlo, todos notaban lo hipnotizado que estaba por Emma. Tanto que hasta le pidió a Remus que haga la tarea de ambos en pociones.

A lo lejos, Emma había notado la presencia del pelinegro y ya estaba harta de que la persiga.

—¿Me disculpas un minuto? —Sonrio levemente al peliblanco.

—Claro, aquí te espero, linda. —Le devolvío la sonrisa y le guiño el ojo coqueto.

La chica rodó los ojos un vez que estuvo lejos de la vista del Malfoy, mientras se acercaba al pelinegro quien parecía distraído sin notar que la chica se acercaba.

—¿Puedes dejar de observarme como un maldito psicópata? —Dijo de brazos cruzados una vez que llegó a su lado.

Sirius al escuchar la voz de la chica quedó helado y volteo a verla.

—Hola linda. —Sonrio de lado al verla.

—¿Que quieres, Black?

—¿Sabes? Eres muy egocéntrica. —Dijo refiriéndose a su primer comentario. —¿Cómo sabes si no estaba viendo a otra persona?

—Black, a no ser que seas gay soy la única mujer aquí afuera. —Lo miro con una ceja alzada.

—Soy bisexual. —Mintio para luego irse junto con su dignidad.