¡Corre!

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Me duele la cabeza, estoy mareada y tengo el estómago revuelto, siento como si un camión me hubiera pasado encima.
Enseguida me doy cuenta que sigo en el hospital, iba a salir en la tarde y ahora estoy aquí en una cama, me duele un poco la rodilla y el hombro, creo que sí he sufrido un accidente bastante fuerte, me tomo la cabeza, está vendada, me tallo los ojos y bostezo.
Parpadeo varias veces, tengo la boca seca, trato de ver la hora, son cerca de las 5:30 no distingo bien, creo que estoy mareada aun.

Creo que lo más prudente ahora es volver a dormir, no queda otra mejor opción, después de todo creo que debo recuperar fuerzas, aunque a decir verdad no me queda nada por lo cual deba luchar, creo que está vez no hay en quién deba confiar y mucho menos debo esperar que alguien me ayude, tal vez debo aceptar que Renata ganó al fin y yo de verdad he perdido, he muerto dos veces en todo este tiempo y he estado en prisión y ahora no soy nada.

Exhalo, mi cabeza está hecha un lío, tal vez pueda hacer una vida nueva, si, esa es una mejor idea, no más Regina Lockwood, no más Renata Lockwood y no más Axel, no más Kurtis, no más Scott, no más Rick, no más O'connell, no más nada, puedo ser alguien más en...no sé en México, puede que ahí me vaya mejor, tal vez ahí no habrá más problema y no estaré huyendo de nadie.

Debo descansar, ya después sabré lo que debo hacer.

Cierro los ojos, la puerta de mi habitación se abre de manera suave se cierra, alguien está aquí, no abriré los ojos, no quiero saber quién es.

- Se que estás despierta - es el - Vamos Regis sé que no duermes, me alegra que hayas despertado, hasta estado dormida por tres días y tal vez es lo mejor, pareces más repuesta y hasta tienes color en las mejillas

Me duele la nariz, me cuesta respirar, me duele creo que me rompió la nariz, no se que decir, creo que le tengo algo de miedo, me duele aceptarlo pero Rick ya no es el mismo, creo que cambió bastante después de que nos separamos.

- Creo que aún estás un poco atontada por la anestesia o algo así, así que solo quería disculparme, no se que me pasó, creo que no debí hacerte daño, es solo que me enojé mucho y....

- No tenías porque atacarme - respondo

- No era consciente de lo que hacía

- Después intentarás asesinarme 

- No, no lo haría

- Me iré al albergue, es la mejor opción para ambos, tengo miedo a que vuelvas a lastimarme

Los ojos de Rick se ensombrecen, creo que he dado en un hilo muy delgado.

- Creo que tienes razón, será lo mejor

No me lo creo, el no sería tan flexible, creo que está mintiendo, creo que no es el o puede que sea una trampa.

- Entonces no me busques por favor, no quiero volver a saber de ti o de alguien de ustedes, es mejor así

Rick asiente, creo que sabe que lo ha estropeado todo.

- Aún así te cuidaré desde lejos

- No, no quiero que me cuides, estoy muerta, no existo para nadie y es mejor así, cuida bien de Regina, ella te necesita, la lista que todos buscan está en mi habitación, se encuentra escondida en mi alajero dentro del clóset, es para ti, en esa lista se encuentran los nombres de las rutas más viables para transportar todo y un extra, creo que te gustará, tú sabrás si te unes con Kurtis o con O'connell

La cara de Rick refleja asombro, sabe a qué me refiero.

- Regina ¿De qué hablas?

- Basta de fingir, creo que ambos sabemos que yo no soy Regina, cuida de ella como siempre lo haz hecho

- Deja de actuar

- No, no lo hago Rick, es hora de la verdad

- Te dejaré descansar para que puedas aclarar tus ideas, solo busca dónde te dije y sabrás si solo estoy mintiendo, tal vez hayas tenido la oportunidad de asesinarme y poder sanar tu herida, pero por tus dudas no puedes

La puerta se abre de manera violenta deja a la vista a Kurtis, creo que esto ha mejorado.
Sonrió como si estuviera obteniendo un triunfo memorable, es como ganar Oscar  o haber ganado la lotería.

Sus ojos están llenos de odio hacía mi, me mira en este estado tan deplorable.

- Así que sigues viva - dice

Cierra la puerta de manera violenta y se acerca hasta mi, me quedo en silencio.

- Parece que de pronto te haz quedado muda- no respondo - bien, ahora se dónde está la lista, ahora te puedo matar - sigo sin decir nada- bien ahora tendré que comprobar que tienes lengua porque será todo un gusto poder cortarla 

Vuelvo a sonreir, Kurtis es más agresivo de lo que recordaba.

Me rodea el cuello con la mano, comienza a presionar muy fuerte.

- Ruega por tu vida - exige

Veo a Rick, se acerca a él para alejarlo de mi.

- Déjala - grita - no puedes matarla

-¿Por qué? ¿Por qué no puedo matar a esta perra? Dime

Me suelta, comenzaba a lastimarme.

- Porque también la amas - responde

- No, no la amo, yo amo a mi esposa, amo a mi hijo, amo mi vida

- No podemos matarla y menos aquí

- No me importa lo que digas - dice Kurtis

Se vuelve a acercar a mi, me toma del cuello de nuevo, comienza a presionar de una manera en la que me cuesta respirar.

- Ruega - grita

Pero no lo hago, es mejor morir ahora que vivir con miseria.

Rick se acerca a Kurtis y lo quita de encima, comienzan a pelear, comienzo a toser, aprovecho para levantarme, me arden los pulmones.

Los veo pelear, tomo la bacinica y le pego a Rick en la cabeza, enseguida cae encima de Kurtis.

- Esto es entre tu y yo - digo cuando me ve

Su labio y ceja están rotos.

Reviso a todos lados y me acerco a un escritorio, se encuentra en la esquina, reviso a todos lados y veo un bisturí, lo tomo por si tengo que defender mi vida.

Kurtis se acerca hasta mi, me pega a la pared y me mira fijamente, sus ojos reflejan rencor por mi y por todo lo que tal vez represento.
Vuelve a tomarme del cuello, lo aprieta fuerte, me cuesta respirar.

- Te creí, en verdad creí que eras ella

Sonrío.

- Al menos me alegra saber que moriré en manos de uno de mis hombres - comienzo a reír como loca

Entonces me presiona aún más el cuello.

- Eres la mejor - ríe también

- Siempre, pero hoy no moriré

Reúno todo el valor que me queda, a esto se le llama la ley del más fuerte.
Le entierro el bisturí en el costado, me mira a los ojos, lo vuelvo a sacar y  vuelvo a enterrarlo, relaja su agarre, respiro, toso y mis pulmones arden, lo apuñalo de nuevo y lo dejó caer.

Si camisa gris se ha manchado de sangre y mi mano también, jamás había hecho algo así.

¡Corre! ¡Corre!

Una voz en mi cabeza grita, no suelto el bisturí y salgo corriendo de la habitación, me duele la rodilla aún no me he recuperado del todo, pero necesito salir de aquí.

Corro por el pasillo, necesito salir de aquí, me siento sofocada.
Cómo puedo llego hasta el jardín, mi cuerpo choca con alguien y caigo al suelo, me lastimo la mano pero no suelto el bisturí.

- Ven para acá

Vecino..... ¿ Tiempos Extra?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora