Vecino..... ¿ Tiempos Extra?

¿Aceptas?

He dado un recorrido por toda la habitación, es hermosa, las paredes son blancas, el vidrio me permite tener una hermosa vista, la piscina es bastante azul, me gusta mucho, algún día podré nadar en ella.
Aún me encuentro enredada en la toalla, espero sentada en la cama, la cama por cierto es muy suave, creo que de nuevo podré dormir en paz y tranquilidad, me recuesto un rato, cierro los ojos y de pronto me pesan mucho, tengo sueño otra vez.
Acomodo mi cabello, creo que lo cortaré uno de estos días, me quedo en silencio y dormida.

- Regina

Abro los ojos, me encuentro desubicada, vuelvo a repasar el lugar, Esdras me ha despertado, trae en el brazo una camisa y algo de ropa interior.

- Lo siento, me ha ganado el sueño

- Tranquila, son las 11:30 es normal, ha sido un día difícil

- Bastante para mí gusto

De recordar todo lo que ha pasado creo que me volveré loca, estoy al borde del colapso, todo esto es más de lo que puedo llegar a soportar.

- Vístete y vamos a cenar, tenemos que hablar

- Si, ahora bajo

Me estiro un poco y el sale, cierra la puerta, me seco todo el cuerpo, de pronto mi mano se detiene en la cicatriz de mi vientre, estuve a punto de morir, ahora tengo que vivir, tengo que volver a ser lo que era y retomar mis sueños.
De pronto me encuentro rozando mis cicatrices, muchas veces lo he hecho, pero está vez es distinto, creo que está vez por fin las dejaré de lado.

Reacciono y me apuro a vestirme, también tengo hambre.
Me amarro el cabello lo dejo en una coleta, está un poco enmarañada, pero me sirve para sentir que estoy más presentable.

Bajo al comedor, el está a la mesa, me acerco con algo de temor, siento que dirá algo que no me va a gustar o que no podré hacer, no quiero matar a nadie o quitarle algo a alguien más, se lo que se siente quedarse sin nada de pronto.

- Aquí estoy

- Siéntate aquí - señala a su lado izquierdo

Me acerco a la silla y me siento, mi plato está vacío, me sirve algo de fruta y cereal con yogurt.

- Algo ligero para que puedas dormir bien - se explica

- Es lo mejor que voy a comer después de tanto tiempo.

- No me interesa mucho tu historia, de hecho ni siquiera deseo buscar más en lo que sea que esté pasando, debo admitir que antes tenía mucha curiosidad, pero ahora veo que Rick y Kurtis sienten una debilidad hacía ti, supongo que los otros tres también.

Se refiere a Axel, a Scott y por increíble que me parezca a O'connell, aunque a decir verdad con el no he tenido nada serio.

- Lo dudo, ellos tienen una debilidad hacía Renata yo solo tengo el mismo rostro

- ¿En serio eres Regina?

Su pregunta me desconcierta, creí que el ya me había creído.

- Esdras, si no me cree, por favor mateme

- Encontraron algo que solo Renata tenía

Lo sabía, sabía que era eso a lo.que se referían

- Habla de una lista ¿cierto?

- Si, de eso mismo

- La encontré el día de mi funeral, cuando me preparaba subí a la habitación de Renata, entre sus cosas busqué algo para usar, nadie lo sabe y creo que es mejor así, por eso me han estado persiguiendo, O'connell estuvo a nada de matarme por esa dichosa lista

- Esa es tu explicación, pero te he dicho que no me importa después de todo se lo que estar solo, todos prometen ayudarte y al final nada de eso llega

Asiento.

- Dígame que va a querer a cambio de ayudarme

- Es algo simple lo que necesito de ti, te he contado de mi hermana - asiento- Yadira no me interesa en realidad, me interesa su hija, ella aún es pequeña y es lo más importante para mí, quiero que cuides de ella, Yadira nunca la ha querido

- ¿Por qué?

- Es hija de O'connell, ella quería hacerme enojar y se metió con el, sin embargo quedó embarazada y nació la niña de mis ojos

- Eso debe ser horrible

- Cena y después iremos a verla

Asiento, me apresuro a comer, no quiero demorar mucho en saber a lo que me enfrentaré, Esdras me mira, parece estar examinando todo lo que hago, finalmente logró acabar mi comida.

- Vamos - me levanto y lo sigo

Llegamos hasta la habitación de Yadira, las luces están apagadas, el abre la puerta y entra, me quedo a fuera  Esdras me invita a pasar, algo nerviosa entro a la habitación, enciende la luz, pero la habitación solo se alumbra un poco.

La habitación es bastante bonita, de color blanco, hay una cama en medio de la habitación y a un lado se encuentra una cuna, es rosa, hay varios osos de peluche.

Esdras se acerca hasta la cuna, enseguida su gesto se relaja, es como si la niña que ahí está le diera tranquilidad.

- Acercate por favor

Algo tímida me acerco a la cuna, me pongo a su lado, la pequeña duerme, es una niña bastante hermosa, su tes es moreno claro y su cabello es castaño, mueve sus labios, se verán frágil, tan inocente.

- Es ella, se llama Yamileth

- Es hermosa, ni parece que sea hija de O'connell 

- Es por eso que debo cuidarla aún más, quiero saber si estás dispuesta a cuidarla como si fuera tu hija , quiero estar seguro de que podrás dar tu vida por la de ella

Miró a la niña y después lo miro a el.

- No tengo nada que perder, si muero no habrá nadie que me llore, para todos estoy muerta, ni siquiera puedo decir que me siento viva, pero necesito algo que me motive a vivir, pensar en una venganza contra Renata está descartado, todos la cuidarán más de ahora en adelante,más sabiendo que estoy viva y en cualquier momento puedo regresar

- ¿ Aceptas?

Asiento.

- Ten por seguro que mientras esta niña esté a mi lado estará bien, viva y si es necesario moriré por ella

Esdras asiente.

- A partir de mañana ella iremos al médico, para que te revise y nos diga que haremos con tu situación

- Gracias

Esdras se aleja de la cuna y se va de la habitación, me he quedado sola con la pequeña, la miro por un momento, le cálculo 6 meses de edad.

- Desde mañana solo seremos tu y yo pequeña