1. Sospechosa no. 1

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Todo está cambiando radicalmente en mi vida últimamente. Desde que
conocí a Adam. Antes mi vida era tranquila, más bien banal. Ahora, siento como si viviera en una montaña rusa constante. Mi casa se incendió y desde entonces vivo en un apartamento con Claire. Aunque tengo que admitir que es un apartamento genial. Mi hermano decidió dejar su vida y mudarse a San Francisco. Todos mienten sobre mí en los periódicos, me mandaron un pájaro muerto al conservatorio durante el gran concierto de la Filarmónica y la policía me aconsejó aceptar su protección… Tengo muchas razones para terminar mi relación con Adam, para aspirar a la tranquilidad; pero en sus brazos,
respirando su olor, escuchando su corazón latir, sé que mi lugar es con él y no lo cambiaría por nada en el mundo. Y verlo tan feliz de haber encontrado el rastro de su madre, de su pasado, esto le da una nueva aura; la de la felicidad. Algo escondido muy en el fondo de él se dispone a surgir nuevamente. Solamente espero que no se encuentre con muy malas noticias…

Adam ya encontró una parte de su pasado en Wyoming pero prefiere no precipitar las cosas. Sobre todo, desea ocuparse de mí y de mi seguridad. Y ya que su viaje está previsto para hoy, pasamos todo nuestro tiempo libre pegados uno al otro desde la llamada que recibió el otro día, la que le dio la gran noticia.

Nos despertamos esta mañana entrelazados. Nuestros cuerpos se saciaron mutuamente durante toda la noche y aun así parecen querer más… No necesitamos ni siquiera hablar para desencadenar una nueva ola de deseo. Basta con una mirada, una caricia para que todo comience de nuevo.

– Hermosa, podría pasarme todo el día aquí, murmura Adam acariciándome la espalda con la yema de los dedos, provocando en mí deliciosos escalofríos.
– Nuestras escapadas son demasiado cortas. Necesitamos vacaciones de
verdad…
– ¡Oh! Sí, vacaciones… en Europa, París, Roma…

Apoyo la cabeza sobre al brazo, con los ojos resplandecientes.

Francia, mi sueño…

– Nunca he ido a Europa, ni a ningún lugar fuera de Canadá y Estados
Unidos… Eso sería… ¡mágico!
– ¡Entonces, así será!

Adam me empuja hacia atrás, metiendo la cabeza por el hueco de mi cuello, cosquilleando el lóbulo de mi oreja. Sabe bien que ése es mi punto débil. Y cuando sus manos se deslizan por la curvatura de mis senos, siento cómo poco a poco mis sentidos se despiertan. Me es imposible resistirme a él, y no dejar
que mis dedos vagabundeen por la protuberancia de su bóxer.

Dejo escapar una risa de placer: Adam está muy atento conmigo, ¡y la idea
de viajar a su lado es muy emocionante! Después de un cuerpo a cuerpo muy sensual, nos encontramos nuevamente frente al desayuno.

¡Es increíble cuánta hambre puede dar hacer el amor!

– Bueno, ¿te acuerdas? A partir de esta mañana, tendrás a dos personas
vigilándote. Son profesionales, ni siquiera te darás cuenta que están ahí. Al menor problema, ellos intervendrán.

El tono de Adam se vuelve repentinamente muy serio.

Adiós romanticismo

Sé bien cuánto le preocupa mi protección. No es el único. También están Claire y Ryan. Y tal vez yo misma pueda estar más tranquila también… Pero aun así… Necesitar protección especial…

¿Y por qué no también un chaleco antibalas de una vez?

– Sí, lo recuerdo… También debo tener al corriente al Capitán Owell acerca de todo, comunicarle todo lo que haga, recito como una lección bien aprendida.
Puedes irte tranquilo, Adam…
– Esta protección será más discreta que la policía. También tengo que hablar con Ryan.

TODO POR EL MULTIMILLONARIO & DOMINADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora