Relativamente Omega [Showhyuk]

No importa (23.)

Minhyuk caminaba acechado por los murmullos de las personas que iba dejando atrás a cada paso, sin embargo él llevaba la cabeza en alto, no valía la pena negar o afirmar un infierno, todos vieron que se fue acompañado de un extraño y que Hyunwoo lo buscó por toda la fiesta después. 

Pocos se tragaron el cuento de que ellos no eran pareja, quién conociera al bronceado tan sólo un poco sabría que él moría únicamente por una chica, pero que el alto ignorara justamente a esa chica por defender a Lee alimentaba todo con glotoneria maliciosa. 

— Y camina como si fuese la gran cosa. 

— Se toma en serio la caridad. 

«No me importa»

Se dijo para sus adentros, no era su estilo y tenía más de tres verdades que decirle a la mayoría de personas que hablaban de él, pero no sé rebajaría, defenderse sólo daría razón a esa mentira de noviazgo que no hacía más que confundir a Min. No pensaba ni por un segundo que lo suyo era real, pero imaginar, la sola idea le hacía daño, él no soñaba más con lo que no tendría. 

La persona que tú quieres y quién te quiere, nunca son la misma. 

Se le guardó en el corazón así, simplemente porque él creyó merecer a Changkyun después de todo lo que tuvieron, de todo lo que él sabía, de la cantidad de veces que Minhyuk fue un escudo y hasta una espada para él. Y por obrar de esa manera fue que precisamente no lo merecía. 

«No me importa»

Alguien lo empujó y él ni siquiera le miró de lado, se sentía triste y lleno de tantas vibras negativas que no quería ingresar a clase cuando tenía un regaño por parte de su madre en cuanto a la asistencia, encontró el boletín de faltas que celosamente escondía Minhyuk dentro de un diccionario en su cuarto. 

Maldito sea su tío. 

Ya se estaba hartando, necesitaba un aliado, un amigo, necesitaba a Chang. 

«Yo también puedo con eso. No me importa»

Llegó a su clase cuando alguien lo tocó apenas para que ingrese y los encerró a ambos en el salón. Se asustó un segundo por todo lo ocurrido hace poco, luego pasó a la tensión cuando encontró los ojos serios de Hyunwoo, cruzando sus gruesos brazos apretados contra la camisa sobre su amplio pecho. 

Maldito cielo inmenso. ¿Por qué era tan consciente ahora de lo guapo que es este chico?

— ¿Por qué me ignoras? 

Y como si fuese una mala película estadounidense, Hyunwoo equipara su atractivo con la tontera.

— Si no estás jugando hazte humo, Son. Hasta un niño de siete puede reconocer cuando hizo las cosas mal. 

— Te interrumpí un rollo en casa de mi amigo, ¿Era eso tan importante? 

— No fue el chico, Hyunwoo, fueron tus palabras. Las dudas e inseguridades que arrastraron después. 

Apretó la mano en puño para cerrar la boca, no hacía falta que supiera eso, diablos. 

— ¿Y qué fue lo que dije como para que entiendas tan mal las cosas? 

— Yo no malentendí tu desprecio.

— Minhyuk, mierda. Dímelo para poder arreglarlo - si tan sólo no fuese tan lindo.

— No lo dijiste, todo tu enfado era estúpidamente obvio, yo no soy como tú, no necesito que me dibujen las cosas para comprenderlas entre indirectas o actitudes; y tú me trataste como a un cualquiera - Hyunwoo abrió los ojos sorprendido, él no recuerda nada así - Y yo seré fácil, rápido o como quieras llamarlo, pero no con el primer bastardo que tengo cerca, sino con quién yo quiero. A mí nadie me toma inconsciente o sin mi pleno consentimiento.