Encuentros (3.)

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Hyunwoo se encontraba nuevamente detrás de la entrada de ese club en específico, pensando si tenía o no la voluntad de ingresar para tolerar las palabras del reciente pelinegro. Sinceramente había reflexionado por los insultos de Lee Minhyuk, pero no es como si quisiera ser amigo de Hoseok de inmediato. 

No lo odiaba, pero tampoco sabía si quería pasar tiempo con él.

Le daba igual la orientación sexual de Shin, no es como si ser hetero fuese una condición para que el bronceado diese una amistad a quien sea, jamás tuvo la oportunidad de intercambiar palabras con nadie del sexo opuesto que gustase de los suyos, y sin embargo acepta que se dejó influenciar por Jooheon y lo que todo el mundo esperaba de ellos, más allá de su imagen, a Hyunwoo le valía un infierno lo que dijesen de él.

Cuando hablaban de él y Jihyun traicionando a Hoseok sí le importó, pero porque se hablaba de su amistad, de qué tan idiota era Hoseok como para perdonarlo, eso fue lo que jodió a Hyunwoo y en aquel entonces él no se defendía a sí mismo o se cabreaba siquiera por la chica, no, su enfado ante las palabras no eran sino por Hoseok. Porque lo apreciaba y como quien quiere a otro tal cual un hermano, no toleraba que se dijesen tonterías sólo porque elegía ser su amigo pese a su comportamiento, despreciable y hasta cruel podría decirse. Si Hoseok hubiese amado a Jihyun quizás no lo habría perdonado… Y también se sintió molesto por eso en aquel entonces. 

Tan odioso y contradictorio.

Tendría que perdonar a Hoseok si se ponía a pensar en todo lo que él le debía al ex-base, pero no era su consciencia sino su corazón el que se negaba. Además de que estaba siendo alimentado por la conversación aquella donde él rechazó tajante y energúmeno la homosexualidad… su amigo jamás podría haber dicho nada para defenderse o enseñarse tal cual era, si él mostraba tanta ignorancia y tan contundentemente.

Tenía su debida parte de responsabilidad, pero aun así no meritaba el engaño. 

Estaba confundido, y por eso se encontraba frente a ésta puerta con ánimos de tener mayores respuestas que su mente terca podía darle, pero no se animaba a entrar… él no era amigo de Lee Minhyuk.

— Hazte a un lado, estorbo - le movió, abriéndose paso el pelinegro.

Se veía de pésimo humor, quizás habría sido mala idea venir. 

— ¿Siempre vienes al club para perder el tiempo o sólo en el receso?

— Te vale un infierno. 

No, no había sido buena idea.

— ¿Te encuentras bien? 

— Estoy ocupado, Son. Lárgate ¿Quieres? 

— No, la verdad es que no quiero - de cansó rápido del maltrato.

— Pues siéntate por allá y juguemos a las estatuas. El primero en hablar pierde y abandona la sala.

— No me interesa tu…

— Perdiste. Adiós. 

Hyunwoo cerró sus ojos para inspirar profundamente por la nariz, retener el oxígeno en su pecho y exhalar lentamente por la boca. Su madre solía decirle que su bello rostro quedaría desperdiciado si se la pasaba con el ceño fruncido, era de temperamento radical así que le enseñó respiraciones a modo de canalizar la ira; lo hacía porque le servía realmente, no por esa estupidez de su apariencia. 

— ¿Vas a contar hasta diez para no golpearme? 

— ¿Cuando he intentado golpearte o golpear a quien sea sin motivos? 

— A Changkyun hace dos mese…

— Dije sin motivos. En aquella ocasión él se metió conmigo por nada, eras testigo. 

Relativamente Omega [Showhyuk]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora