Historia de Amor 💙 (Christian)

Capítulo 36

Estoy en mi oficina sentado en mi silla y pasándome las manos por el rostro con frustración. No tengo ni la más mínima idea de qué decirle para explicar por qué esa mujer estuvo en Escala si tener que hablar del maldito pasado. Sé que en algún momento tendré que hablar de ello, pero no hoy, no ahora que mi único interés está en recuperarla.

Me siento tan jodidamente incómodo, ni siquiera sé como iniciar esta conversación en la que prácticamente voy a rogarle que vuelva por que la necesito en mi vida. A ella, solo a ella. ¿Qué hace a Ana tan diferente de las demás? No es solamente su cuerpo que encuentro muy atractivo, es su curiosidad, su necedad, su extraña forma de volverme loco para bien y para mal.

Pero esto no es sobre ella, es sobre mí necesitándola a ella. Porque no soy el mismo de hace dos meses, si lo fuera no tendría este jodido enredo de pensamientos, la habría dejado salir de mi vida y buscado un remplazo. Pero no, estoy aquí sentado como un idiota pensando en las palabras correctas que convenzan a la necia Señorita Steele de que estoy siendo serio con lo nuestro.

¡Compré una jodida casa! ¡¿Qué podría ser más serio que eso?! ¿Pedirle que viva conmigo? Mierda, eso sí suena serio, pero si con alguien estoy dispuesto a intentarlo es con ella. Jodido Flynn y su terapia centrada en soluciones... ¿qué estupidez diría John en éste momento?

Respiro hondo y paso nuevamente mis manos por mi cara. No hablaré del pasado... ¡hablaré del futuro! Sí, eso es lo que debería hacer. Sonrío orgulloso de mí mismo. Miro mi reloj y me pongo de pié, busco mi móvil para salir de la oficina. Andrea y la otra chica de la que no me molesto en aprender su nombre, me miran con sorpresa.

— Andrea, voy a salir. Llama a Taylor – entro al ascensor.

Taylor me espera junto al Audi y creo ver que sonríe por el espejo retrovisor cuando le pido que me lleve a la editorial. Jason parece estar tan emocionado como yo, ya que apenas estaciona y sale del auto para custodiar la salida de SIP.

Cuando Ana aparece, él se apresura a abrirle la puerta y yo paso mis manos con nerviosismo por la tela de mis pantalones. Nos saludamos con emoción contenida y puedo apreciar de nuevo un ligero brillo en sus ojos. Me ha extrañado de la misma forma en que yo a ella.

La observo en silencio pero no digo más y ella tampoco lo hace. No quiero hablarle ahora con Taylor escuchando, así que le pido nos lleve de vuelta a Grey House, que es lo más cercano a la editorial. Cuando bajamos del auto, tomo su mano con fuerza

— Voy a mi oficina, con mi novia – le digo ante su gesto de confusión.

— Creo que a las rubias les va a dar un infarto – respiro aliviado porque aun permite que la llame novia.

Camino ansioso por todo el vestíbulo mientras ella voltea nerviosa a todos lados. Toco el botón del ascensor que viene bajando y nos cruzamos de frente a Ros, que viene saliendo.

— Christian? – dice pero está mirando a Ana con una gran sonrisa.

— Ros – digo con una sonrisa boba que la hace sonreír más.

— ¿Como las llamas? – le digo recordando su comentario sobre mis secretarias.

— Rubias 3 y 4 – dice apenada.

Pasamos junto a ellas, que nos observan fijamente y me parece ver a Andrea sonreírle a Ana.

— Cancela mi reunión con Barney y no me pases llamadas– le digo entrando a la oficina.

Ana se sienta en la silla frente al escritorio mientras respiro hondo en busca de inspiración para lo que digo a continuación.

— No hay nada que yo pueda hacer respecto a mi pasado, pero quiero que veamos esto desde una perspectiva diferente. Nunca tuve una novia. Ninguna de ellas es mi ex porque no tuve una relación con ellas. Tú eres mi primera novia, la primera que conoce a mis padres y que viene a mi oficina. Tal vez no eres la primera en estar en Escala, pero si la primera en compartir mi habitación y mi cama – el recuerdo de eso me hace sonreír — Dormí en tu cama, nunca había dormido con alguien, hasta que lo hice contigo; te seguí a Montesano y conocí a tu padre. Incluso compré la compañía para la cual trabajas, para poder seguir cerca de ti. Y aún hay muchas cosas más que planeo para nosotros, más cosas en las cuales serás la primera. Cómo subir a mi catamarán, mi helicóptero y mi jet, te llevaré a Aspen o a Nueva York, a dónde tú quieras ir. Solo tú y yo.

— ¡Vaya forma de disculparte! – Dice como un susurro — Te das cuenta que ahora las rubias van a querer matarte, ¿cierto?

Y agradezco enormemente el que podamos pasar de un momento sensible a uno divertido en un pestañeo. Sonrío divertido y me acerco a ella.

— Ya que lo mencionas, vas a tener un guardaespaldas. Ahora que estás conmigo serás un blanco fácil, podrían intentar lastimarte para obtener mi dinero — Algo que jamás me perdonaría.

— Oh sí, ya lo recuerdo, no eres un simple mortal – dice seria.

— Tendrás un guardaespaldas, esa opción no es debatible – intento negociar — ¿pero qué sugieres?

— Puede quedarse en otro lugar, como la cafetería o el local de comida. ¿Y puedo elegirlo? Si va a estar pegado a mí todo el día por lo menos debería asegurarme que es agradable.

¿Ana eligiendo a su guardaespaldas? ¡No le estoy comprando un jodido amigo! Tiene que ser alguien con experiencia y que no tema reaccionar al momento, presentaré opciones y tendrá que elegir de entre ellos.

— Me reuniré con ellos mañana, en Escala. Alcánzame ahí después de tu trabajo – ella asiente — Debemos irnos, tengo una cita pendiente.

— ¿No vas a intentar nada? – dice con la ceja arqueada y yo sonrío.

— He creado un monstruo – ¿Quiere repetir lo del escritorio? — mañana seremos solo tú y yo.

Tomo de nuevo su mano y salimos de mi oficina.

— Voy a mi cita con Flynn, no voy a volver, pueden tomar el resto de la tarde libre – Andrea me mira sorprendida.

Le pido a Taylor que conduzca hasta el departamento de Ana y la acompaño hasta la puerta cuando llegamos. Me apresuro a regresar al auto, para mi cita con Flynn.

— Llama a Welch, necesito un guardaespaldas para Ana pero necesito que me presente por lo menos dos opciones. Con experiencia y de confianza – Taylor asiente mientras conduce.

Le mando un texto a Andrea pidiéndole que mañana aprimera hora envíe a SIP un ramo de rosas para Ana y dejo los detalles a suelección. Después de Flynn, me reúno con Bastille y luego llamo a Welch parauna actualización sobre la seguridad en Grey House y Escala.