●C R I M I N A L● [Sanscest]

17

— No quiero fallas, ¿Quedó claro? —Escuchó la voz de su jefe desde sus audífonos. Dio un mordisco a su chocolate y habló.

— ¿Cuando he cometido un error? —Rió un poco— Tranquilo, Nightmare. ¿Los chicos están están listos?

— Estamos dentro. —Logra escuchar la voz de su amigo, teclea algo en su laptop.

— Bien, a mi señal. Estén atentos.

Dio un largo suspiro, cerró sus ojos y se concentró.

Abrió los ojos y empezó a teclear rápidamente las teclas de aquella laptop, sus ojos se movían de un lugar a otro, revisando cada código que salía a la pantalla, esto era tan normal que se memorizaba el lugar de cada tecla; qué debía hacer o qué seleccionar. En cuestión de pocos minutos lo pudo lograr.

— Alarmas desconectadas. —Habló mientras volvía a morder el dulce, disfrutando del sabor— Nightmare, entren.

Mientras tanto, en el museo. El jefe de la banda, junto al encapuchado y el azabache de ojos negros entraron, cada uno usando pelucas o atuendos que logren disimular su apariencia. Pasaron los detectores de forma normal, el mayor sonrió ante esto.

— Sistema de seguridad,desactivado. —Volvió a hablar— Es hora.

En cuestión de minutos el museo, el cual estaba en un ambiente tranquilo, se escucharon gritos de miedo, disparos.

En cuestión de minutos ya tenían a la mayoría de personas que estaban dentro del museo de rodillas, implorando por piedad. Los guardias intentaron activar la alarma o cerrar las puertas pero nada funcionaba, ahora se encontraban amordazados y con los ojos vendados como el resto de rehenes.

— Primero que nada. —Habló Nightmare mientras veía a todos los rehenes con los ojos vendados y arrodillados— Buenas tardes. —Se quitó los lentes de sol y los guardó en el bolsillo de su saco— Sé que nuestra repentina llegada ha sido un golpe fuerte para ustedes, pero tranquilos; no pensamos en hacerles daño.

Todos temblaban, el moreno sonrió ante esto. Observó como el resto de la banda tomaba los cuadros de las paredes.

— Solo tomaremos las pinturas y nos iremos, no hay que perder la calma. —Se acomodó los guantes y se dirigió hacia uno de los cuadros— Agradecería mucho que no usen sus teléfono o intenten algo, mis amigos aquí presentes los estarán cuidando por si quieren pasarse de listos. —Volteó, fijando su vista hacia RaspBerry y Horror quienes vigilaban a los rehenes— Gracias por escuchar.

Mientras que el resto de la banda se llevaba los cuadros Error observaba todo desde las cámaras de seguridad, procurando que se lleven todo y fijándose si algún rehen hacía algo que ponga en peligro el plan. Todo andaba bien. A la vez, escuchaba la radio de la policía.

— Residenciales han llamado diciendo que escucharon disparos desde adentro del museo de arte, patrulla 062, nos dirigimos hacia allá.

Entró una vez más al sistema de la policía y buscó en qué calle se encontraba esa patrulla y poder calcular en qué tiempo llegarán.

— Nightmare, tienen cinco minutos. Salgan de ahí ya. —Esperó una respuesta.

— Recibido. —Algo nervioso volvió a morder otro pedazo de chocolate.

A través de la cámaras logró ver que ya faltaba poco. Contactó con Red y a Circuit, avisándoles que debía llegar con los vehículos para la fuga.

— Tres minutos.

En el museo ya tenían todo listo, los cuadros estaba en la puerta listos para ser llevados.

— ¿Dónde mierda están? —Nightmare ya se estaba enojando al no ver señal alguna de los otros.

— Dos minutos.

A tiempo, lograron ver como un camión y camioneta llegaban a gran velocidad, estacionandose frente al museo.

— ¡Suban todo, ya! —Todos acataron la orden, subiendo cada cuadro con mucho cuidado al camión.

Error miraba las cámaras cerca del museo, de las calles o alguna tienda; logró ver como la patrulla se acercaba y se alarmó.

— Un minuto. —Dio otro mordisco debido a la ansiedad. Logró ver como ya todas las pinturas fueron subidas al camión, los demás entraron a la camioneta. Se tranquilizó un poco, pero no duró mucho ya que vio a la patrulla llegar— ¡Váyanse, ya! —Al escuchar eso, escondieron los vehículos y se marcharon, segundos antes de que la policía llegara. La patrulla los siguió con las sirenas sonando por todas las calles— Circuit, desactiva sus radios. Intentarán contactar con la estación y les dirán hacia donde se dirigen.

Y tal como predijo, los policías intentaron avisarle a la estación o a otras patrullas pero fue inútil.

— Alguien tome el volante. —Killer, quien iba conduciendo la camioneta, sacó la cabeza por la ventana y disparó hacia la patrulla; mientras que Dust intentaba mantener en control del volante. Los disparos continuaron, por suerte los policías no le llegaron a dispararle y logró darle a los neumáticos, perdiéndolos de vista y pudiendo escapar.

— Tengan cuidado con eso, valen más que tú y toda tu familia. —Regañaba Nightmare, viendo como Red sacaba las pinturas del camión y las llevaba a dentro del almacén. Error se acercó mientras bebía una malteada— Bien hecho.

— Fue un placer. —No le dio mucha importancia y siguió bebiendo su malteada de chocolate— Te dije que podía. —Se alejó. Tomó sus cosas y comenzó a caminar hasta su casa.

Fue una tarde normal para él, logró ayudar en otro robo y recibirá algo de dinero por esto. Miró su reloj, maldiciendo porque eran las 7:00pm y seguramente Geno lo habría estado llamando al celular.