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Odiaba los lunes.

Tener que levantarse temprano a primera hora, después de haber dormido hasta tarde el fin de semana es algo realmente frustrante para un adolescente.

Más aún cuando en vez de estar viendo porno como cualquier chico con hormonas, estuviste intentando introducir virus cibernetico en el sistema de una compañía para que tu jefe deje de molestarte y así recibir dinero suficiente como para comprarte un celular nuevo.

Por eso Error estaba casi dormido en la mayoría de clases, ignorando el hecho de como su compañero BlueBerry lo estuvo observando todo el tiempo.

Al sonar la campa por fin de salida tomó sus cosas y fue el primero en atravesar la puerta del salón, caminó por los pasillos queriendo llegar al portón del colegio e irse a dormir en su cama hasta la noche donde volverá a intentar borrar algunos archivos de la policía.

— Hola —Logró identificar de inmediato al chico que comenzó a caminar a la par suyo, era BlueBerry. Recordó que él lo vio ese día en el almacén, en ese entonces no se ha preocupado tanto pero ahora millones de situaciones vinieron a su cabeza.

— Hola Blue. —Saludó sin ánimo— Te quiero pedir que por favor no cuentes a nadie a quienes viste en el almacén, por favor.

— No te preocupes por eso Error. —Sonrió sin dejar de caminar.

— Gracias. —Apresuró un poco el paso y lograr ver el portón. Siguió caminando queriendo por fin llegar a su casa pero notó que su compañero seguía a su lado— Sigues aquí ¿Por qué?

— Pues.. quería saber si me puedes ayudar con la tarea de matemáticas. —Mintió.

— No. —Siguió su camino, pero el de menor estatura no se dio por vencido y le siguió el paso— ¿Y ahora qué?

— ¿Qué harás en la tarde?

— Dormir.

— ¿Solo eso?

— Blue. —Detuvo su caminar ya algo fastidiado, miró al menor a los ojos— No sé qué deseas de mí pero no me interesa tener algo contigo, estaría feliz si solo mantienes el secreto guardado, solo eso. Ahora, por favor, te pido que me dejes en paz porque tu compañía me está molestado y mucho. —No esperó respuesta alguna siguió su camino hasta su casa dejando al chico atrás.

Hubiera sido feliz para Error decir que eso se quedó ahí, BlueBerry no lo volvió a buscar y dejaron su relación como simples conocidos y compañeros de clases. Nada más.

Pero no.

El chico siguió buscándolo y queriendo entablar conversación con él cada vez que lo veía, eres molesto. Ya con dos semanas de lo mismo Error logró tener una que otra conversación con el chico pero seguía siendo molesto, era fastidioso.

Cada recreo el menor se acercaba al moreno con intenciones de conversar, querer saber más de él; a Error esto le molestaba pues no le gustaba responder preguntas que tenían que ver con su vida personal, a pesar de que Blue ya sabía con quién se relacionaba no quería dar más detalles.

Le parecía extraño, tener al chico a su lado todo el tiempo justo después de su encuentro en el almacén, antes de eso casi ni hablaban.

— Blue. —el mencionado alzó su mirada observando al moreno— ¿Qué quieres de mí? —Estaban caminando hacia la casa del moreno, aunque más bien él solo caminaba y Blue lo seguía.

— ¿A qué te refieres?

— Vienes de la nada queriendo ser amigos, es fastidioso. No hemos hablado todo este tiempo y ¿Y solo porque me viste allí quieres venir a hablarme? ¿Qué quieres sacar con eso?

El de azul se quedó en silencio, trató de buscar una respuesta razonable a eso.

— Al verte ahí recordé las veces que te veía en el salón se clases. —Desvió la mirada— Y te veía muy solo, no pensé que tenias algo que ver con esos criminales. Yo pensé que necesitabas un amigo. —Lo volvió a mirar a los ojos y sonrió.

— ¿Por qué?

— Tal vez.. me diste algo de-

— Te di pena. —El de pañuelo azul asintió algo apenado— No te preocupes, es fácil sentir pena por mí.

Se quedaron en silencio unos minutos más hasta que Error suspiró y detuvo su caminar, pues había llegado a su destino.

— Bien, supongo que te veo mañana en la escuela. —Se despidió con una leve sonrisa y se adentró a la residencia.

 —Se despidió con una leve sonrisa y se adentró a la residencia

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— Ha pasado un poco más de una semana, BlueBerry. Debe haber algo que tengas que decirme. —Ink estaba sentado sentado en su oficina mientras hablaba con su amigo a través de su celular. En frente suyo, tenía una pirámide de cartas casi perfecta, solo faltaba una última pieza.

— Nada que reportar Ink. —Habló a través de la linea— Error es un chico como cualquier otro.

— Bien. —Con su otra mano tomó dos cartas— Llámame si tienes algo nuevo qué decir. Gracias por el favor. —Colgó y dejó su celular en la mesa.

Con una carta en cada mano las logró colocar en la cima de la pirámide, sin temblar y mostrarse nervioso inclinó ambas cartas haciendo que estas se sostengan la una con la otra. Retrocedió un poco logrando apreciar su trabajo.

— Bien, si Berry no me va a ayudar.. —Se arrodilló en frente de su escritorio observando la pirámide— Tal vez deba destruir la base yo mismo. —Con una mano quitó una de las cartas las cuales eran la base de la pirámide, haciendo que al instante esta se desmorone ocasionado que la torre perfecta se vuelva en un montón de tarjetas en el escritorio— Creo que es hora de poner en juego mis cartas. —Dijo observando la carta que había tomado para derribar la pirámide.





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Dibujo que hice de Ink y Error uwu

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Dibujo que hice de Ink y Error uwu

Le puse la misma ropa a Error que en el original pues no se me ocurrió otra cosa xd

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Le puse la misma ropa a Error que en el original pues no se me ocurrió otra cosa xd

●C R I M I N A L● [Sanscest]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora