UTOPIA; 1

CAPÍTULO 20 (1/2)

Título: "promise" by ATEEZ

-"tu y yo, es una promesa, nadie te derribará"

p.o.v.Sana

Le corté el cuello en un corte limpio, pasando por toda su piel y rajándole la garganta en un simple y rápido movimiento. La sangre del hombre me salpicó en el pecho y unas gotas cayeron por mi pecho manchándome. No llevaba puesta mi camiseta, estaba en mi sujetador negro y mis pantalones del chándal gris.

Miré al hombre agonizar un par de segundos hasta que murió dejando caer la cabeza delante de mí. Miré el charco de sangre que se estaba creando a mis pies y como mi pecho subía y bajaba por mi respiración acelerada.

Me limpie las manos en el paño blanco mojado de agua, retirando las gotas de sangre de mi pecho y cara. Luego dejé el cuchillo en su sitio y salí de la sala de torturas. Cuando abrí la puerta le hice una seña a uno de los chicos que trabajaba para nosotros para que limpiara lo que había hecho.

Subí a la sala de entrenamiento y vi a ChaerYeong, HueningKai y YuNa practicando. Últimamente las cosas estaban más en tensión. Porque no llevábamos muy bien el control de la situación con MinHo, íbamos un poco perdidos, y además la Yakuza había avisado de que las pruebas cada vez serían más complicadas. Por esos los padres estaban entrenando exhaustivamente a los tres, que se suponían que eran los líderes. 

-HueningKai – lo llamé y el paró de darle puñetazos al saco que le sujetaba el tío SuHo – está muerto.

-Buen trabajo, Sana – me felicitó y siguió practicando.

Yo me fui con todos los demás que estaban fuera fumándose un cigarro y me acerqué a NaYeon y mi hermano. YeJi contaba algo que le había pasado mientras todos la miraban con interés. Yo miré mi móvil e instintivamente me metí en el chat de BeomGyu. Pero hacía ya unos días que ni siquiera me dejaba en visto. 

-HyunJin – me giré a mirarlo. Él me asintió conforme me estaba escuchando, aunque estaba mirando entrenar a YuNa desde la ventana. Yo rodé los ojos, no es que me cayera mal YuNa, simplemente no era de mi agrado para mi hermano - ¿me vas a contar que le pasa a BeomGyu de una puñetera vez?

-No, siguiente pregunta – dijo él fumando con tranquilidad de su cigarro.

-Joder – dije suspirando y miré al frente frustrada.

-Eh – me llamó él poniendo una mano en mi rodilla yo no lo miré, estaba harta de sus frases de consideración – si él quisiera que lo supiera me hubiera dejado decírtelo.

-¿Sabes que, HyunJin? – le dije mirándolo y sabía que iba a hablar mi ira y frustración ahora, pero ya fue demasiado tarde cuando hable y me di cuanta de que lo estaba pagando con mi hermano – métete tus palabras reconfortantes por donde te quepan.

Él no me dijo nada, pero tampo le di tiempo. Caminé hacia dentro de nuevo, hacia la sala de entrenamientos. Allí, en un lado con ChaerYeong estaba el tío BaekHyun, pero no fui hacia él. Sabía que él no me diría nada, pero con el tío Tae tenía una oportunidad.

-Tío Tae – lo llamé, él estaba en una esquina organizando las armas encima de la mesa – ¿podemos hablar?

-Claro que sí, cariño – me dijo él con esa sonrisa y alegría tan característica – dime.

-¿Puedo ver a BeomGyu? – le pregunté directa y él dejo las cosas y se me quedó mirando paralizado – mira, no sé que le pasa, y al parecer nadie me quiere hablar de ello. Ni HyunJin, ni HueningKai, ni siquiera SooBin – le dije, y me noté hablar muy rápido – pero por favor, por lo menos dime si está bien.