Título: "perfect two" by Auburn
-"yo no sé si alguna vez podre estar sin ti, porque chico, tú me complementas"
p.o.v.Sana
Bajé las escaleras del avión notando el calor del sol saliendo por el horizonte de Seúl. Miré como se creaban esos rosas junto al azul, intentándome relajar mientras estiraba todo mi cuerpo. Después cogí la maleta de mano que me había llevado a Barcelona, al cual solo abrí para cambiarme de ropa e ir a la prueba.
Como había aterrizado en la pista de la mansión me fui hacia el aparcamiento subterráneo que teníamos, donde siempre tenía un coche por si no cogía alguno de los que siempre llevaba. Metí la maleta en el maletero y me puse al volante.
Estaba cansada, los ojos se me cerraban y me dolía todo. Pero aun así puse música en los altavoces del coche y arranque en la dirección que el GPS me indicaba. No había dormido nada en el avión, no paraba de darle vueltas a la llamada de mi tío Baek me había hecho en el avión, donde estuvimos hablando media hora solo y exclusivamente de BeomGyu.
Me contó que cuando le daban ataques tan fuertes lo tenían que llevar al psiquiátrico de Seúl, donde lo trataban hasta que volvía a ser él. BeomGyu, mi BeomGyu. No aquel chico que me gritó de forma agresiva y me dio un empujón haciéndome caer en el suelo llorando.
Al parecer había vuelto, parecía que todo estaba normal. Pero se había encerrado en él mismo, sin querer hablar ni ver a nadie, y ningún medico había conseguido que comiera algo. Y la opción había sido yo.
Le conté lo de que estaba embarazada a BaekHyun, y que esa era seguro la causa de todo aquello. El solo me dijo que no me preocupara, que cuando BeomGyu volviera a él lo hablaríamos tranquilamente. Pero las imágenes de aquella mañana estaban presentes, y no podía olvidar la cara de asco y repugnancia de le dije que era suyo.
Aparqué a unos metros y salí del coche mirando el edificio de cinco plantas blanco que se haya delante de mí. Entre y di mi nombre, dándome después una tarjeta colgada en el cuello con mi nombre y el paciente al que visitaba.
-Hola – dije acercándome a mis tíos cuando llegué a la puerta que me habían dicho los dos.
-Hola, Sana – me dijo TaeHyun abrazándome y cuando se separó de mi me miró la barriga. Me sentí incomoda y no entendía porque, solo me sentí así – está muy poco receptivo – me dijo con una sonrisa amistosa en los labios, quitándole hierro al asunto – pero seguro que a ti te escucha más que a cualquiera de los que estamos en este edificio.
-Está atado a la cama – me aviso BaekHyun – por el tema de que se pone muy agresivo, así que tranquila si intenta hacerte algo no podrá.
Y yo no me quede más tranquila. Pero, aun así, fuera lo que fuera que me iba a encontrar quería verlo, estar con él, abrazarlo y que él me dijera que se quedaba conmigo.
-Intenta hablar con él, que coma por lo menos – me dijo TaeHyun.
Yo asentí y abrí la puerta. Esta daba a otra sala, toda oscura, con dos médicos y una enfermera mirando a través de un cristal una habitación blanca. Allí estaba BeomGyu, estirada en la cama, atado de manos y pies, mirando el techo, solo respiraba, era lo único que hacía, ni siquiera parecía que prestara atención al techo o que estuviera mirándolo para concentrarse en sus pensamientos. Y eso me sobrecogió el corazón, verlo tan apagado, como si aquella luz blanca que tenía se hubiera extinguido.
El médico me dio unas cuantas recomendaciones para cuando entrar, diciéndome lo que debía o no debía decirle. Al parecer sus padres le habían contado lo del embarazo, así que me dijo que si me sacaba el tema intentara ser lo más suave posible y decirle que si a todo, aunque no pensara como él. Porque no hablaría con BeomGyu sino con una persona totalmente diferente.
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UTOPIA; 1
Fiksi PenggemarHueningKai y YuNa, como hijos de la que fue la capo suprema y la fundadora principal de la mafia BlackPink, Rose, heredan el poder por igual. Han sido preparados por todos los miembros para ser más letales, más sangrientos y malos, de lo que fueron...