EPILOGO

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Holaa :)

Este es el epilogo de la primera parte de esta historia. La voy a continuar en una segunda parte con nuevas parejas y una nueva trama. En el epilogo solo parecen los personajes de la siguiente. Todos personajes de esta menos uno nuevo.

Lo comento para la gente que esté interesado en seguir la historia y como se desarrollan las nuevas parejas. (AVISARE POR AQUÍ CUANDO LA PUBLIQUE)

A más, he decidido cambiar el nombre de la historia y poner otra portada (la que está en la multimedia es la portada de la siguiente). Mañana la cambiaré.

Gracias a toda la gente que ha llegado hasta aquí. Espero que disfrutéis del epilogo.



Siete meses después

p.o.v.Jeno

Salí de la cama con cuidado de no despertar a HueningKai. Quitándolo de mi pecho sin moverlo mucho y dejándolo encima de la almohada. Después cogí el paquete de tabaco de mi mesita de noche y me dirigí a la ventana de mi habitación. Abrí la ventana y me llevé el cigarro a los labios, lo prendí con el mechero y di una larga calada.

El verano estaba ya cerca. Odiaba el calor, pero sería una buena escusa pera que HueningKai y yo utilizáramos más seguida la terraza de nuestro ático en el nuevo piso que nos habíamos comprado los dos juntos, para pasarnos los días enteros con los pies en la piscina.

Me apoyé mirando hacia dentro de la habitación. HueningKai dormía a pierna suelta encima del colchón, llevaba una camiseta blanca mía que le quedaba un tanto grande y su nuevo pelo marrón hecho un desastre. Estaba guapísimo, muchísimo. HueningKai tenía eso que me hacía poner cara de tonto y quedármelo mirando durante media hora.

Y si podía decir y asegurar que estaba enamorado de él. Joder, claro que lo estaba.

Y eso me daba pie a tener más miedo. Me aterrorizaba la idea de volverla a cagar, a que se diera cuenta de que se merecía mucho más que un cascarrabias celoso. Temblaba de pies a cabeza cuando nos peleábamos y cogía la puerta, dando un portazo y se iba. Lo pasaba terriblemente mal cuando no aparecía durante horas.

Pero siempre volvía a mí, siempre. Por más que la cagara, los dos estábamos tan enamorados del otro que nos era imposible no volver a caer en los brazos del otro.

-Jeno – me llamó y yo me saqué el cigarro de los labios para dejarlo en el cenicero de la ventana y acercarme a la cama. Me apoyé con una mano a cada lado de su cabeza y él con una sonrisa adormilada me rodeó el cuello - ¿a que me haces el desayuno? – dijo riendo y yo sonreí por lo dulce que había sonado.

-¿Qué quiere el mocoso hoy? – dije acercándome y dándole un beso en la nariz.

-Tortitas, con mucho chocolate, muchísimo – me dijo abriendo los ojos y sonriendo.

-Pues hago tortitas – le dije besándole los labios.

Después me levanté con Bolton siguiéndome a la cocina. Le puse la comida a mi dóberman y miré el móvil antes de ponerme a cocinar. Tenía treinta mensajes de HyunJin, y en todos ellos me pedía que, si dormíamos la siesta juntos, que lo tenía abandonado. Yo le respondí que si y me puse hacer el desayuno.

p.o.v.ChaerYeong

-Cariño – gritó RyuJin seguramente desde la cocina, yo cerré los ojos con fuerza cortándome la mejilla contra la almohada con fuerza – cariño, llegamos tarde a la perrera – me dijo y yo hundí mi cabeza más escuchando como caminaba hacia la habitación – ChaerYeong – RyuJin se subió a la cama hincando las rodillas en ellas y acercándose para dejar un suave beso en mi mejilla – va, despiértate que llegamos tarde a buscarla.

UTOPIA; 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora