XXXVI

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Jiang Cheng se levantó de mala gana al escuchar el timbre.

Seth ni siquiera se movió, solo lo miró pasar mientras abría la puerta de su departamento, y veía a su hermano con el vientre algo más notorio mirándole, Wei Wuxian le sonrió sin esperar una sonrisa de regreso.

"Te traje comida" -El menor asintió, y le dio la espalda volviendo a su habitación-.

Habían pasado ya tres días.

Tres días que Jiang Cheng se había tomado para dejar ir del todo a su cachorra, de forma metafórica.

Lo peor había sido cuando volvieron al departamento, y Seth aulló desde el inicio de la noche, al menos hasta que Jiang Cheng fue por él, y lo recostó en su cama, donde ninguno de los dos pudo dormir, la habitación apestaba amargamente e incluso comenzó a llover, se apreciaba el sonido de esta gracias a que además de que no había cerrado del todo las cortinas, la lluvia golpeaba sin cuidado la ventana, Seth lloraba derrepente, mientras Jiang Cheng intentaba darle ánimos, con las lágrimas a veces escapando de sus ojos.

Eso fue hasta que, cansado de eso, el omega llamó a Xichen.

Había sido grosero con él, y adjuntándole la culpa que por supuesto él no tenía, pero solo necesitaba sacar su frustración con alguien, y desafortunadamente, fue el alfa.

Aún así, Xichen no dijo nada, ni siquiera cuando el omega le dijo que no quería que lo volviera a buscar.

Cerca de las tres de la mañana, el alfa tocaba su puerta veinte minutos después de su llamada, y aunque tal cual no se había disculpado, Xichen entendía que se sentía mal.

Casualidad o no, tanto Jiang Cheng como Seth, por fin pudieron dormir después de eso.

Ahora era miércoles, Jiang Cheng ni siquiera había vuelto al trabajo aún, y Xichen había estado tan ocupado, que apenas si se habían visto unas cuantas horas desde el domingo.

"¿Haz comido algo?" -Wei Wuxian se atrevió a preguntar, mientras se recostaba junto a él en la cama, el menor asintió, incluso ya se había duchado, se encontraba de mejor humor, al menos de un humor más enojado y menos triste-."Prepare congee"

"¿Por qué me odias?" -El mayor rió ligeramente, sabía que seguía triste, se apreciaba en su mirada, pero si ya bromeaba, bueno, en realidad, no sabía como tomarlo, su hermano siempre era difícil de descifrar, incluso de niños, nunca sabía realmente si lo golpearía o lo abrazaría-.

"¿A donde vas?" -Wei Wuxian preguntó al notar al ojivioleta colocarse su abrigo-.

"Aún no aparece A-Yao"

"¿Irás a buscarlo? Jiang Cheng, no vayas, espera un poco" -El mayor lo tomó del brazo sentándolo en la orilla de la cama y suspiró-."Déjame ir contigo"

"No" -Respondió de golpe y decidido, aún así, suspiró-. "No iré a buscarlo ahorita, iré a mi oficina por algunas cosas, ¿quieres venir?"

Wei Wuxian sonrió asintiendo, en realidad estaba preocupado, conocía a Jiang Cheng y sus ataques de ira que algunas veces tenía, incluso se tragaría el ligero miedo que aun le tenía a su perro, Seth viajó con ellos recostado en la parte trasera del auto todo el camino, y al llegar, Wei Wuxian caminó unos metros tras los dos, para no estar tan cerca del canino.

Mianmian saltó de gusto al ver a Jiang Cheng, y sin poder evitarlo, la preciosa alfa lo abrazó, dirigiéndose hacia Wei Wuxian después con una reverencia, y después hacia Seth, que al verlo solo, y notar a pálido y ojeroso al ojivioleta, supuso que había ocurrido, ni siquiera dijo nada, dio una reverencia hacia los dos, y se retiró hacia su oficina limpiando una lágrima que amenazaba por caer de su mejilla.

CRIMINAL (Xicheng)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora