Daría todo por ti {Boggi y Tú) {Adaptada}

Capítulo 38

Boggi se me queda viendo preocupado, a la vez que trata de zafarse de Nick, pero sus intentos son en vano. Parece que Boggi también está herido, seguramente lo golpearon para traerlo hasta aquí. Mi corazón se rompe aún más, Boggi, Tommy... ambos están aquí por mi culpa, por querer tener a Nick en prisión.

Sin dudas, Nick está loco, tiene serios problemas, es un criminal más peligroso de lo que aparenta.

—¿Te gustó mi sorpresa? —Me pregunta Nick burlonamente.

—¡SUÉLTALA! No te metas con ella, maldito enfermo. —Le responde Boggi mientras sigue forcejeando con Nick.

Nick lo trata de atar con la cinta a la mesa de madera, pero Boggi aún trata de evitarlo. Trata de darle una patada, pero falla. Mientras que Tommy sigue en el suelo, quejándose del dolor proveniente de su abdomen. Me siento tan inútil, no puedo hacer nada, ni siquiera puedo moverme, pero sigo tratando de zafarme las ataduras de las manos.

—¡Estás loco! —Le grita Boggi — ¿Por qué haces esto? ¿Eh? ¡¿POR QUÉ?! Idiota... —Agrega.

—Mejor cállate, Bogdan. A menos que tú también quieras quedar como ese pobre infeliz. —Dice Nick señalando a Tommy.

—No los toques, ni Boggi ni a Tommy. —Intervengo con mi voz chillona— De una vez haz lo que tengas que hacer, pero déjanos en paz. Por favor... —Termino de decir con las lágrimas aún en mis rostro.

—No es así de fácil, querida. —Ríe— ¿Acaso piensas que sólo los tendré aquí unas horas y después los dejaré ir como si nada? ¡Por Favor! No soy estúpido, sé que me denunciarán. Y de ninguna manera regresaré a ese asqueroso lugar llamado prisión. —Termina de decir al igual que termina de atar a Boggi de las manos a la mesa.

Sólo sus pies están libres, pero igual no se puede mover de su sitio, sólo puede dar pequeños pasos inútiles.

—Bien, así me gusta. Quieto y tranquilo. —Dice Nick y le da unas palmadas al cabello alborotado de Boggi.

—No... Me... ¡Toques! —Le dice Boggi con cara de asco hacia Nick.

—¡Hey, hey! Quieto. —Le dice amenazante— Además ni quien quiera tocarte. Prefiero tocar a alguien más... —Me voltea a ver con una mirada asquerosamente pervertida.

—Ni te atrevas a tocar a ________. —Grita Boggi — ¿Me escuchaste? maldito pervertido... Ni lo pienses. Poco hombre, cobarde... —Lo interrumpe Nick.

—¿Con que con esas palabras vamos a tratarnos? Bueno... —Se queda callado un momento, con la vista hacia el suelo— Bien, no quería hacer esto, pero... ¡A quien engaño! Claro que quiero. —Termina de decir, y le da un fuerte puñetazo en el abdomen a Boggi, uno que hace resonar toda la habitación. Boggi suelta un fuerte quejido, a la vez que se dobla levemente para evitar el dolor.

—¡NO! Por favor... ¡No le hagas daño! por lo que más quieras, por favor... —Le suplico. Boggi aún no está en condiciones para recibir esos golpes. Hace poco estuvo en recuperación de la cirugía de trasplante—. Por... por favor... —Insisto.

—¡Que te calles! Carajo. —Grita furioso Nick— Si sigues hablando... te juro que no sólo serán golpes los que recibirá Bogdan. —Termina de decir.

Siento como un escalofrío me recorre nuevamente. Todo en mi interior se revuelve y un nudo se forma en mi garganta. ¿Más que golpes? ¿A qué se referirá con eso? No... no lo quiero averiguar.

Boggi sigue con la cabeza agachada, suspirando con fuerza. Tommy sigue en el suelo, retorciéndose del dolor.

Nick acerca una silla igual a la que estoy sentada. La pone frente a Boggi y Tommy. Luego se dirige a mí y yo trato de guardar silencio, sollozando silenciosamente. Esperando que haga lo peor conmigo. Pero por suerte sólo me levanta con todo y silla y me acerca unos centímetros más al centro. Luego desata a Boggi de la mesa y con leves forcejeos lo ata igual que a mí, a la otra silla. De manera que Boggi y yo quedamos cara a cara.