Un puzzle de imprevistos - Anahug

La teoría del puzzle - Hugo

Mis ser no lograba conciliar el sueño, todos mis sentidos estaban alerta. Era como si descargas eléctricas estuvieran recorriendo todo mi cuerpo.

Mi alma al igual que mi cuerpo se sentía entumecida, el cuero del asiento y mi piel formaban un único material.

Las luces estaban apagadas, el ambiente estaba iluminado solamente por algunas pantalla aún encendidas.

No me había levantado ni una vez en todo el viaje.

Había pasado las nueve horas que me distanciaban de mi nueva meta machacandome por la decisión que había tomado. Estaba regresando a un lugar peligroso del cual había intentado escapar por mucho tiempo.

¿Lo peor de todo?

Que lo sabía

Mi mirada seguía en la misma posición que la de unas horas.

Pegada a la ventanilla del avión.

Otro avión.

De vuelta allá.

Esta vez con un historial. 

¿Quién sería ahora?

O mejor

¿Quién pretendía ser?

Mi vida hasta ahora se había basado sobre una teoría, que yo mismo desarrollé hace años.

Cada uno de nosotros tiene un puzzle delante suyo que completado forma una imagen diferente de la de los demás, algunas piezas se repiten, o sea se comparten entre los puzzles, esto porque cada uno de nosotros tiene conexiones con otras personas.

Cada persona es la pieza fundamental del puzzle que tiene delante, la que completa la imagen.

Sin embargo, en este caso, mi pieza no encajaba con el puzzle general, podía intentar adaptarme, para alcanzar una forma parecida a la que se requería, pero, aunque la forma estuviera, la imagen que se creaba no estaba completa.

Mi mente no podía soportarlo, llevaba años combatiendo una lucha interna sin obtener ningún resultado.

Yo soy una pieza que fue tomada desde otra caja, como tal no puedo reemplazar lo que mi puzzle está buscando.

Falta la pieza fundamental.

Falta.

Y yo no podía reemplazarla.

Mi alma es nómada, ningún lugar logra donarle paz.

Y me iré, me iré, me iré

Todo mi tiempo fue pa ti

Y me iré, pero tal vez hace tiempo que me fui

Escapar.

Esa era la única palabra que entraba y salía de mi cabeza y la única que parecía entender.

De prisa.

Dejando sin explicaciones quien está a mi alrededor.

Porque es así que soy yo, me escapo sin decir nada a nadie.

Dejando que los más atentos lleguen a la conclusión correcta.

Rompiendo amistades, cortando contactos con gente que parecía quererme.

Nadie había intentado interesarse o preguntar, por otro lado yo nunca había querido dar explicaciones.

Por favor, abrochaos los cinturones estamos aterrizando a Barcelona

Barcelona.

Una ciudad que me había suscitado bastante interés y por algunas razones había ocupado mis últimos pensamientos.

Por eso había decidido que mi próximo destino tuviese que ser ese.

Aunque sabía que el golpe de realidad sería bastante gordo.

Mis mano temblaban, y mis ojos nácar reflejados en la ventanilla se veían brillantes.

Mi aventura acababa de empezar.

No estaba preparado por lo que iba a ofrecerme.

Pero eso, aún no lo sabía.

Hola a todos, quería agredecer cualquier persona que acaba de leer esto y tambíen disculparme  porque soy italiana y el español no es mi primer idioma,  así que por cualquier error por favor escribid en los comentarios.

Nos vemos al próximo capítulo.