Kaito's Moving Castle

Capitulo 15: La promesa del mundo

***Música de fondo altamente recomendada***

https://youtu.be/GR94_mT9AOY

En vista que que no se puede reproducir, busquen la canción en youtube se llama al igual que el capítulo "La promesa del mundo"

Shinichi se subió a la enorme pata del semi-transformado Kaito Kid, este emprendió el vuelo inmediatamente hacia la ubicación de los restos del castillo. Sobrevolaron las montañas hasta que lograron divisar los restos del castillo deambulando cuesta arriba en una montaña, los cuales solo quedaban una base de madera sostenida por un par de patas metálicas, chirriaba y se balanceaba de un lado a otro con aire sereno, en comparación al verdadero ambiente que rodeaba a Haibara y la bruja roja.

-Perdóname por tardar tanto, Kaito... ahora entiendo todo... perdóname de verdad... -Murmuró con tristeza antes de Kaito aterrizara y se desplomara sobre la madera andante, todas las plumas desaparecieron, dejando a un inconsciente joven. Agasa chilló asustado y Haibara se acercó preocupada.

-¿Está muerto?

-No, no lo está. –Acomodó a Kaito en una posición más cómoda, al menos dentro de los estándares posibles. Se puso de pie y se dirigió hacia Akako. Quien al verlo, intentó ocultar inútilmente la joya y el fuego que tenía en las manos. Shinichi se acuclilló frente a ella. –Por favor, dámela.

-No sé de qué estás hablando –Negó inútilmente.

-Por favor... -Pidió en tono lastimero –Devuélvemela, o Kaito morirá, acabemos con esto.

- ¿Tan desesperadamente la quieres? –Preguntó Akako algo reticente.

-Si... terminemos con esta guerra sin sentido.

-Esta...bien –Dijo en tono vacilante. –Pero cuida mucho de ella. –Advirtió antes de colocar la joya y a Jii entre sus manos. Se puso de pie y se dirigió al lado de Kaito de nuevo. Al llegar, se arrodilló al lado de él.

-Jii-san –Llamó en tono suave.

-Shinichi-kun, estoy muy cansado... -Murmuró con voz ronca, ahora que el fuego era diminuto, casi tocando la joya únicamente, se veía tan vulnerable y agotado, que el corazón de Shinichi dolió.

-Has hecho un gran trabajo protegiendo al hijo del desaparecido rey de los magos, es hora de descansar. –A pesar de su estado, Jii lo miró sorprendido.

-Tu... -Shinichi asintió. –Ya veo, que gran alivio, Shinichi-kun, finalmente Kaito-sama, Toichi-sama estará... -Si no fuera por su apariencia de fuego, juraría que justo ahora sería un mar de lágrimas.

-Señorita Pandora, el tiempo ha sido cumplido. –Llamó Shinichi en voz baja y la joya que sostenía entre sus manos brilló con fuerza. La colocó a la altura del corazón de Kaito, esta se fundió con su cuerpo, e inmediatamente, un intenso brillo salió de Kaito y una mujer bastante conocida para Shinichi se hizo presente.

-El cuerpo del pequeño ha sido sanado por completo y he recibido mi pago, tal como pedí, un joven de valiente corazón me ha liberado. Has tardado un poco.