A f r a i d シ︎

01

Me encontraba un vez más comiendo ramen frente a la televisión con el canal de naturaleza para ser específicos el episodio se traba sobre la vida de los conejos bastante tierno pero no tenía el humor para sonreír.

Escuche la puerta abrirse y me alarme—Ding Dong—sabia de quién se trataba pero quería verlo con mis propios ojos.

—Estas aquí—me miro sonriendo y volví a mi asiento.

—Si buenas noches a ti también—dejo su paraguas al lado y paso—huele bien—se acerco a dónde estaba—¿Hay para mí?—coloco su mano al lado de mi sobre la mesa tapando mi vista al televisor.

—Están en donde siempre y el agua aún está caliente en la hervidora—dije moviendolo un poco para poder observar el televisor.

—No estás de buen humor—se alejo para así buscar que comer—¿Quieres que te ayude con eso?—voltee topandome con su mirada pegada a mi con esos ojos tan oscuros .

—Iré a dormir—apague la televisión.

—Oye no acompañe a comer—me detuvo haciendo que me sentará de nuevo—solo bromeaba—se sentó junto a mi para abrir su ramen caliente—Es mi favorito, ¿lo compraste para mí cierto?

Era obvio que si pero nunca se lo diría aunque el ya lo supiera—En tus sueños solo los compré porque se veían ricos—me encojo de hombro.

—Se que odias la comida picante Geunsook—levanto sus palillos para si llevarse el primer bocado—Eres muy mala mintiendo, aún así es tierno que lo niegues cuando es verdad.

—Quiero dormir apresúrate—me cruce de brazos.

—Estabas comiendo ramen mientras veías el televisor en el programa de animales—me miro—¿Ahora con quien terminaste?—volvió a dar otro bocado.

—Sabes que odio que vengas sin avisar—rodee los ojos.

—¿Porque terminaste con el?—se dirigió al refrigerador por algo de beber—¿O el te terminó a ti? eso seria muy trágico Geunsook.

—Piérdete quieres.

—Nunca me comentaste que estabas saliendo con alguien—su tono de voz cambio por uno más serio.

—Nunca pregunté por alguna pareja que hallas o estés teniendo Jeon—el se volvió a sentar al lado mío.

—Sabes que te lo diría si así fuese—estaba evitando su mirada no tenía tiempo para peleas.

—Tus padres se pelearon otra vez—quería cambiar de tema odiaba el ambiente incómodo.

—No puedo visitarte—negué—Bien si, fue por algo absurdo pero no estoy para aguantar sus gritos por toda la casa volveré cuando todo se calme.

—¿Y crees que yo si tengo tiempo para ti?—el volteó mirándome fijamente.

—Siempre tienes tiempo para mí—acaricio mi cabello—Tu sabes muy bien que es así.

Y eso era lo que más odiaba lo sabía muy bien, estoy tan aferrada a el que no sabría que hacer si es que lo dejo ir.

Tire un suspiro—Necesito ir a dormir mañana tengo que levantarme temprano—me levanté de la silla.

—Ve, estaré hay cuando termine de comer—asentí.

Entre a mi dormitorio relajadamente para así cerrar la puerta y en el momento en que no me viera fui casi corriendo hacia el tocador tenía una coleta algo suelta y un camisón tan grande como un vestido, no traía maquillaje el me ah visto en tantas facetas que no se si avergonzarme o arreglarme un poco aunque voy a dormir ya así que no debe importar.

Tenía los ojos cerrados pero no lograba dormir en el poco volumen que tenía mi teléfono sonaba aquella canción que me tenía tan pensativa desde que salio como es posible que una sola canción tenga toda mi vida amorosa resumida.

—Otra vez escuchando eso—escuche como cerró la puerta—¿Estas durmiendo?

—Que crees tu—dije aún si abrir los ojos.

—Iré a tomar una ducha—se acerco a mi—Te vez tan bonita.

—Ni se te ocurra—el detuvo su mano la cual estaba por agarrar mi teléfono.

—Ese tipo de canciones tan tristes hace que te pongas más rara que de costumbre—se alejó.

Solo es una escusa eso de mi actitud el sabe perfectamente lo que dicen y el mensaje que transmiten aquellas canciones, eso lo hace ponerse incómodo.

Sentí el otro lado de la cama hundirse eso quiere decir que estaba al lado mío.

—¿Cuando tiempo duraste con aquel chico?—sentí su mano pasar por mi cintura.

—¿Quién dijo que era un chico?—sentí su respiración chocar con mi nuca.

—Bien no importa—sabia que está celoso, de alguna manera eso me gustaba.

—Lo menos que quiero ahora es molestarte—susurro oído.

Me volteó para así tenerlo cara a cara—Solo te apareces cuando tienes problemas y luego te esfumas como el aire.

—Sabes que la empresa me tiene bastante ocupado y apenas tengo tiempo para dormir—acario mi rostro.

—No eres el único aún así algún mensaje una que otra vez no me haría mal, yo siempre trato de mandarte un mensaje—tire un suspiro.

—Sabes cuánto aprecio que me quieras tanto como siempre—se acerco más a mi—No dejes que nadie se te acerque—cada vez más y mas—No me gusta ver tantos hombres a tu alrededor—tenia su respiración chocando contra mi—Sabes que solo tienes ojos para mí.

Estábamos a esos escasos centímetros el me estaba torturando quizás por mi ex pareja o solo porque le complace hacerlo. No me gusta ser la que de el primer paso a todo pero no logro aguantar su tortura en todos sus modos. No espere no un segundo más para así juntar mis labios a los suyos, su dulce sabor hacia que perdiera la cordura en solo un momento.

El sonido de las gotas de lluvia chocar contra las ventanas era algo que amaba pero en ese momento lo único que lograba escuchar gemidos por todo el cuarto, fue una noche bastante larga.

Odio tanto necesitarte, ¿tu te sentirás de la misma forma?

☔︎ᵐᵃᵏᵘ