EXTRA 3. AMANECER 1.

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«PERSEPHONE & MECIAS»
—the end of a love story.

10 de junio

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10 de junio. 1938.

—Deja de moverte, papá— exclamó la muchacha arreglándole la camisa al recién nombrado

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—Deja de moverte, papá— exclamó la muchacha arreglándole la camisa al recién nombrado.

Edward levantó su mirada del periódico dirigiéndola hacia los dos últimos neófitos que habían integrado al clan. Los pensamientos de ambos resonaban por su cabeza y dejó salir una risa volviendo a ojear el papel en sus manos.

—Emmett, deja de pensar eso de Persephone— dijo Edward desde su asiento.

Persephone miró al cobrizo con su ceño fruncido. —¿Qué está pensando?— volvió a Emmett. —¿Qué estás pensando?

Edward volvió a reírse a medida que cambiaba de página.

—Señorita Persephone, deje a Emmett— dijo Mecías llegando a la escena mientras trataba de acomodarse la corbata.

El rubio entró a la habitación y se posó sin dudarlo delante del espejo, dándole la espalda a los miembros de su familia. Sonrió dejando la corbata de lado al ver por el reflejo como Persa seguía discutiendo con Emmett.

—No. Es la primera foto familiar que vamos a tomar contigo, tenemos que estar impecables— respondió Persa alisando la prenda blanca de Emmett.

—Si, Rose— mustió el azabache riéndose de su hija por lo bajo.

Persephone lo miró indignada y golpeó su pecho con dorsal de su puño cerrado, Emmett dejó salir su aire y llevó su mano izquierda hacia el dolor que se había expandido.

—Bien, ya estoy listo. Míreme y dígame la verdad— dijo Mecías volteando a medida que acomodaba sus últimas prendas.

Edward dejó el periódico de lado y observó al humano de la familia, bajó las comisuras de sus labios y asintió. —Te verías mejor si tuvieras bien abotonada la camisa, hermano.

Mecías lo miró inconscientemente, frunció su ceño y bajo sus ojos azules a la camisa, Edward tenía razón, estaba mal abotonada. Bufó mientras sacaba los botones de donde los había colocado.

𝐏𝐄𝐑𝐒𝐀. [Jacob B. & Jasper H.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora