《Capítulo- 23 - Traumas》

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Descargo de responsabilidad: High School DXD ni ninguno de sus personajes me pertenece todos son de su respectivo autor.

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TRAUMAS

-¿Yo... Issei-kun?

Pasé mi mirada por cada uno de los presentes a ver cómo reaccionan.

El rostro de Sirzechs demostró claramente que no se esperaba esto, tiene la boca abierta debido a la sorpresa.

Azazel tiene su típica sonrisa en sus labios, como si hubiera estado preparado para este tipo de sorpresa pero aun así sus ojos estaban muy abiertos.

-JAJAJAJA Bien hecho mocoso... -Odín estaba muy relajado como de costumbre y solamente se ríe al ver la reacción de sus compañeros.

Por otro lado Michael esta en shock total, no puede creer lo que están viendo sus ojos.

-Al fin... ¡Al fin te encontré!

Sudor frio empezó a recorrer mis mejillas.

Lentamente dirijo mi mirada a la fuente de esa voz tenebrosa que resuena en mis oídos.

En esta sala hay solo una persona que no está sorprendida sino más bien muy pero que... MUY ENOJADA.

El padre de mi novia muy sexi vampiresa... Shuzen Isa.

Su mirada se afiló apenas me vio, como la de un depredador.

Sus ojos eran tan penetrantes con si viese directamente a través de mí.

-¡Devuélveme a mi hija!

-Antes que nada... quiero decir que no soy Hyodou Issei, ¿soy su gemelo malvado que está supliendo su puesto? -Hablo muy nervioso, intentando salvar mi vida.

- / ¡Eso ni tú te lo crees-nya! / - Kuroka exclama en mi mente.

Apenas termino de hablar, Shuzen Isa da un salto hacia donde yo estoy.

La velocidad con la que viene supera por mucho a la mía.

Ni siquiera me di cuenta para cuando ya tenía sujetándome de mi cuello y apretándolo con mucha fuerza.

-¿Po ... pode ... mos ha ... blar? -Estaba intentado apartarlo con mis manos, pero no era suficiente.

Es increíblemente poderoso, puede estar a la altura de un Maou.

El aura que desprende su cuerpo fácilmente puede alcanzar a la de Tannin-Ossan.

-¡Detente Otou-sama!

Cuando estaba a punto de morir por tercera ocasión... pude ver un brillo en medio de la sala.

Las chicas hecho en el círculo de invocación para traer a Akari a este lugar.

Apenas llegó, de inmediato vino a ayudarme.

Shuzen Isa miro a Akari pero envés de aflojar su agarre lo apretó aún más.

-Gracias por traerla, ahora puedes morir.

Ahora si... me despido del mundo.

-Cariño... no le hagas nada a Issei-kun, de seguro hay una explicación.-La madre de Akari tenía una sonrisa en su rostro con sus ojos cerrados.

Agradezco que Akasha-san trate de detenerlo, pero dudo mucho que le haga caso.

¡Ya que su agarre se va haciendo más fuerte!

-Cariño... no me hagas repetirlo.

Un terrible escalofrió recorrió mi espalda en ese instante, podía ver los ojos de Akasha-san y...

Serkiyuutei Forajido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora