Capítulo 34: Irene.

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28 años antes...

Paul levantó saliendo de la habitación. Tobías me miró con cierta picardía y se sentó a mi lado, este niño es realmente adorable.

—¿Estás triste?

—No —le sonreí— solo recordé algo triste pero ahora estoy mejor que estas tú aquí.

—¿No has festejado tu cumpleaños? Yo hice mi fiesta.

—¿En serio? ¿Ha venido mucha gente?

—Sí, vinieron Rebecca que me regalo una caja de Legos, Chuck me regaló un dinosaurio y Pam me regaló muchos crayones.

—Qué bueno, tienes que cuidar mucho esos regalos.

—¿A tí te han regalado juguetes?

—Si, cuando era más pequeña. —asentí.

—¿Y tu pastel? ¿No vas a festejar aquí? Podríamos hacer una fiesta así Paul se divierte, está triste porque Irene se fue con papá.

Eso fue demasiado triste viniendo de un niño.

—Si, quizás podríamos hacer algo para animarlo.

—¿En serio no eres la novia de él?

¿Otra vez esta pregunta?

—No, soy la amiga. —aclaré de nuevo.

Se levantó del sofá no muy convencido ¿Tan evidente somos? Tomó mi mano y me llevó a su habitación.

Estuvimos un buen rato dibujando y repasando algunos colores. Le pregunté si sabía contar y sabía hacerlo hasta el treinta. Paul luego se nos unió para jugar con él y armar un rompecabezas juntos.

Debo agradecer que Paul esté aquí con nosotros, nos hizo relajar despues de las atrocidades que nos enteramos de ese cuaderno. En lo único que imaginé fue en la pobre Irene en una bañera perdiendo un bebé, terrible.

Así que Tobías logró hacernos reír con comentarios inocentes, me preguntó si tenía novio, le dije que sí y él simplemente dijo “Que pena” y al fin dejó de preguntarme.

Llegó la pizza y cenamos, el niño no dejó de hablar un segundo, en eso no ha salido para nada a Paul.

Sabíamos que no iba a dejarnos tranquilos despues de la cena así que armé un plan a ver si se dormía. Lo primero fue en avisarle a Erin que me quedaría aquí lo cual seguramente ya lo esperaba. Tenía un mensaje de Martin pero no contesté, en teoría debería estar dormida.

Apagamos las luces de la sala y miramos Toy Story 2 con la esperanza que se durmiera. Se durmió casi al final y me ofrecí a llevarlo a dormir a pesar de que Paul quiso hacerlo.

Lo acomodé en su cama y lo arropé , era muy lindo.

Se despertó y tiró sus brazos a mí, no soy capaz de abandonarlo así que me acosté con él hasta que por fin se durmió. Soy mujer libre.

Volví a la sala, la tele ahora estaba apagada, el cuaderno estaba sobre la mesa y dos tazas de café, Paul estaba en el sofá con una manta blanca que tomó en sus manos.

—Justo se despertó, no me quería soltar y me hizo un lugar en la cama para que me quede con él hasta que se durmió. —tomé asiento a su lado.

—Tienes encanto con los Evans. —me cubrió con la manta, fue un lindo gesto.

—¿Estás celoso?

—Un poco —sonrió y miró las tazas —no sé si querías pero…

—No, está bien —tomé la taza en mis manos para beber —¿Estás seguro que quieres seguir?

Segunda Opción [TERMINADA]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora