Hombre Perdido Markson

⏳ C A P I T U L O 14 ⏳

Mark

Abrí los ojos lentamente intentando acostumbrarme a la luz que entraba por la ventana, el sol apenas salía y podía notar la humedad de la neblina aún densa.

Traté de moverme e incorporarme, pero el dolor se hizo presente y subió de mi trasero, camino por mi espalda y se detuvo en mi estomago -santa mierda- pensé.

Ignorando un poco el dolor intenté visualizar mi posición y pude notar a unos escasos centímetros de mi nariz el pene de Jackson. Al caer en cuenta de lo que había enfrente mio salté en mi lugar y logré caer de nalgas.

—¡Joder! – quise gritar pero el dolor hizo que saliera en un quejido.

Después de unos segundos el dolor cesó y aprecié lo que había delante de mi, la polla dormida de Jackson. Me acerqué un poco más para apreciar y pude notar las venas verdes que la adornaban, la piel clara en el falo que lo hacía lucir aterciopelado, la punta del pene color carmesí con restos de semen que daba evidencia de lo que pasó la noche anterior.

Me moleste por un segundo por perderme tal noche, de nuevo, odiaba a James por llevarse lo mejor, pero la molestia fue sustituida por el pensamiento más divertido. Quería tocar esa polla.

Primero acerqué el dedo índice, toque la vena más bonita que vi. Se sintió bien.

Entonces acaricie fugazmente con el mismo dedo la extensión del falo. Comprobé que se sentía tan aterciopelada como se veía.

Decidí seguir explorando, así que toque la punta, dibujé un circulo con el dedo alrededor de esta y Sonreí por lo bien que se sentía.

Mi curiosidad no podía más, entonces probé lo que tanto quería.

Tomé el pene con ambas manos y pude notar como el cuerpo de Jackson se estremeció y poco a poco el falo comenzaba a ponerse más y más duro. Entonces sin perder más tiempo la metí en mi boca, deguste la punta primero, sabía a culo, pero un culo extrañamente bueno. Quise probar más así que me preparé para meterla completamente en mi boca. Pero una voz me congeló.

—Veo que te estas divirtiendo –dijo un Jackson completamente despierto gracias a la estimulación que estaba resiviendo– esto es violación, pero en realidad lo consiento así que sigue con tu trabajo.

Quedé en shock, por que diablos me sentía tan avergonzado, la sangre subía de mis pies a la cabeza y pude notar mi rostro arder.

—Yo EH, no era mi inte... –Jackson calló mi boca metiendome el pene en la boca.

—Chupa –soltó al final.

Estaba nervioso, sin embargo obedecí. Fue la primera mamada en mi vida, la más memorable, con el hombre más sexi que conocía o eso recordaba.

Después de una mañana fogosa llena de nuevos sabores, lamidas, succiones, corridas y dientes traviesos, Jackson pudió desayuno a domicilio. Cuando llegó dispusimos a comer.

—Quería comentarte algo –dijo Jackson después de darle una mordida a su sándwich.

—Dime –dije en un tono curioso.

—Hice planes con mis amigos para presentarte a ellos, ya ves, con todo lo que ha pasado, soy la única persona en quien puedes confiar. Tampoco me gustaría que simplemente te quedes aquí y vivas tan aburridamente quien sabe, a lo mejor hasta creas nuevos amigos aparte de nosotros.

—Eso es muy lindo Jack, me encantaría.

—Eso es todo, debes arreglarte, debemos ir a las seis.

—Aún son las diez.

—La casa no se limpia sola, aparte, el semen seco en tu culo será un poco difícil de remover.

Después de un largo día de limpieza y una larga ducha, eran las cinco y media, así que Jackson ya me estaba apurando para salir.

—¡Aun falta media hora Jackson Wang! –grité desde el espejo, donde aplicaba un poco de corrector aquí y allá, delineaba sutilmente mis parpados y aplicaba un rubor y labial de forma discreta. Para la ropa opté por una camisa de seda en corte V que dejaba ver mi pecho blanquecino y lampiño. Mis pantalones negro de vestir y unos zapatos del mismo color. Llevaba un reloj plateado el cual Jackson me compró. Estaba perfecto, incluso quería besarme.

Salí de la habitación y modelé frente a Jackson.

—Se canceló la reunión –espetó Jackson. Hice un puchero en respuesta– debo quitarte esa ropa, eres muy sexi.

—Gracias –soreí arrugando la nariz– ¿nos vamos?

—Vamonos

Subí al auto como copiloto de Jackson. Condujo por unos quince minutos y llegamos a Milton Harley, vecindario donde vivía el amigo de Jackson, aún podía percibir la luz del sol pero las farolas comenzaban a encenderse para iluminar las banquetas.

Entramos a una casa de dos pisos, bastante elegante, la decoración era increíble, la combinación de colores acromáticos la hacía lucir como una oficina, pero esa ilusión desaparecía gracias a las bien calculadas esculturas de serpientes en tonalidades doradas que adornaban el lugar, todo era completamente mi estilo.

—¡Jackson! –dijo un hombre delgado con el cabello blanco y un outfit que aprobaba y aplaudía– que bueno verte –el hombre le dio un beso de pico a Jackson y yo los observé sorprendido. ¿Acaso eran pareja? ¿talvez yo era el amante?. —El debe ser Mark, hola Mark –me extendió la mano para saludar pero mi molestia no me dejó corresponderle.

—Pensé que me saludarias de beso, es un poco hipócrita besar a Jackson y no a mi – James trataba de controlar la situación ahora, pero me defendí y logré que desistiera de querer salir.

—Oh, con que también quieres beso, Jackson, este chico me cae bien. –Se acercó y me besó – puedes llamarme BamBam –parecía que James me había ayudado un poco esta vez.

—¿Nos dejaras entrar? –preguntó Jackson.

—Cierto pasen.

Al entrar pude observar a Jaebeom y Yugyeom sentados en el comedor, había otro chico riéndose bastante fuerte de las cosas que Jaebeom decía. 

Jackson me presentó a todos, pero nadie pareció sorprenderse pues al parecer habían estado esperando solo por mi.

—Yo soy sexólogo –dijo BamBam– Youngjae trabaja en el laboratorio.

—Creo que tu trabajo es genial –dije a BamBam.

—Ohh si que lo es.

Me acerqué al oído de Jackson y le susurré.

—¿Podemos tener un trio? –Jackson me miró sonriendo y negando divertido.

—Cuando te cures talvez –hice un puchero que divirtió mas a Jackson.

—No puedo esperar, necesito curarme ya.

La noche pasó tranquila y Yugyeom platicó conmigo y con Jackson. Hablo sobre mi condición y que le había preguntado a un amigo experto, dijo que pronto podría dar un diagnóstico. 

Mis nuevos amigos eran muy divertidos y yo de verdad me sentía querido.