¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Por un instante mi mirada y la de mi padre se volvieron una. Ninguno despegó la vista del otro, estabamos sorprendidos, pero sobretodo desorientados. Por primera vez podía decir que sabía lo que sentía mi padre. Esa incertidumbre, esa confusión, esa presión. Ese dolor.
El silencio reinó el lugar durante diez minutos exactos. Mi mente comenzó a saltar en imágenes del pasado. Imágenes del funeral. Imágenes de cuando donamos su ropa, sus sábanas, sus cosas. Imágenes de nosotros riendo, siendo felices. Imágenes que ahora mismo parecían ser tan lejanas y vacías.
Aquellos recuerdos ya no eran un método de mantenerlo con vida..
..porque Alessandro estaba vivo.
Parpadeé por instinto. Podía sentir la respiración pesada de mi padre golpear mi pistola, pero ninguno fue capaz de despegar la mirada del otro.
-Baja la pistola, Lincoln.
Tras la orden de Jake aparecieron Devon y Polette a los lados, apuntandolo también. Observe como la mirada de Tyrone pasaba a una aterrada, y no me sentí mal por la satisfacción que me recorrió. Ni siquiera me sentí bien. Estaba demasiado desorientada como para poder pensar con lógica.
Solo cuando el arma de Tyrone toco el suelo fui capaz de mirar a mi alrededor. Habían agentes del FBI por todas partes, apuntando y esposando a los guardaespaldas y a los que quedaban del lado de Tyrone. Devon me echó una mirada cargada de culpa y preocupación, y entonces comprendí que el lo sabía, y era eso lo que venía trastornandole desde hacía tanto.
Él sabía que Alessandro estaba vivo y no me lo dijo.
Polette esposó a mi padre y a Lincoln sin prestarme atención, y Jake se apresuró a sonreirme de lado cuando puse mi mirada sobre él. Me prometió cuidarme. Me pidió que confiara en el, y ahí estaba, cumpliendo con su palabra.
Por último observe a Alessandro.
A mi hermano.
Seguia igual a como lo recordaba. Su cabello estaba un poco más largo, pero seguía siendo el mismo Alessandro que por tantos años añore. El mismo que llore a escondidas, y por el mismo que mi vida se volvió una mierda.
No quise odiarlo. Saque de mi mente ese sentimiento porque no quería tenerlo por él, pero no podía permitirme algún pensamiento bueno.
Quiero decir, mi corazón latía con fuerza porque estaba vivo. Mi hermano no estaba muerto. Pero no podia dejar de pensar en qué yo sufrí por su mentira, y que jamás tuvo la decencia de venir conmigo y aclararme todo.
Las lágrimas cayeron cuando el calor del cuerpo de Harry se pegó a mi espalda y con sus manos me giró en su dirección. Me aferré a él sin pensarlo. Deje que la frustración, el dolor, la tristeza y la incertidumbre salieran y me descargue en su pecho, entre sus brazos.
-¿Como es..que..tu..?
-Tu plan falló, Lincoln - le respondió Alessandro - tus hombres fueron un asco, y aquí me tienes. Ahora te vas a pudrir en una cárcel, y me voy a encargar de que no salgas jamás, tu y Tyrone.
