XXX: Perdida.

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-Buenos días señorita Canes, pase.-Me dice el jefe de Mark cuando me presenta el chico y entramos en su despacho. Para ser sinceros, estoy un poco nerviosa, ya que esta es la tercera o cuarta vez que asisto a una entrevista de trabajo.-No le voy a hacer muchas preguntas, manténgase en calma por favor.-Dice con una sonrisa y sonrío.

Me siento en un silla que está enfrente de su sillón y se apoya en los codos.

Pensé que el jefe sería más bien un tipo calvo y regordete, pero para ser sinceros es bastante atractivo. Unos treinta años, metro ochenta, ojos verdes y cabello castaño oscuro. Seguro que está casado, aunque no le he visto ningún anillo.

-Por lo que noto por tu acento eres americana ¿Verdad?-Asiento y él sonríe.-América es un continente muy bonito. ¿Has trabajado antes en algún sitio en el que tenga que interactuar con algún cliente?

-Trabajé en una tienda de ropa y en una panadería.-Digo recordando con detalle cada sitio y asiente.

-Perfecto. Será mejor a la hora de trabajar aquí.-Algo dentro de mí se ilusiona y sonrío de forma tímida.-Bueno, no creo que me haga falta hacerte más preguntas. Por lo que me contó Mark ayer y tu educación al verte, el puesto de trabajo es tuyo. Si quieres mañana puedes comenzar. Te espero mañana aquí a las nueve. El uniforme te lo daré mañana cuando llegues. Espero que no me defraudes.-Asiento y nos levantamos a la vez.

Coloca su mano en la parte MUY baja de mi espalda, casi tocando mi culo. Le miro de reojo y le veo con una sonrisa. Será mamón. Me zafo de su agarre como puedo y salgo a paso ligero sin despedirme de Mark ni siquiera de vuelta al hotel. Se supone que Zayn ya no está aquí, así que es hora de volver a casa.

***

El móvil suena y lo descuelgo como puedo, ya que en una mano tengo mi bolso y la otra aguanto mi maleta.

-¿Diga?-Digo antes de que termine de sonar la llamada.

-¿Samanta?-Dice Louis y ruedo los ojos.

-No, se ha equivocado. Estás hablando con el tato.

-Huy, que educada eres... ¿Así te enseñaron tus padres?

-Louis déjate de tonterías y ven a recogerme de una vez, me estoy helando.-Y es verdad, llevo aquí como unos diez minutos esperándole en la entrada del hotel como una idiota.

-Hay un problema...

-No me jodas que me tengo que quedar aquí otra noche.-Me estoy desesperando un poco, a que lo único que quiero es estar en casa de una vez.

-No... No es eso... Estoy en el aeropuerto...

-¿QUE TU QUÉ?-Le interrumpo y mientras tanto una señora mayor me mira con desprecio. Ya podría disimular un poco joder, solo le falta que me de con su bolso con todas las fuerzas que pueda tener.

-He intentado librarme de venir hasta aquí, pero como los chicos estaban ocupados y era el único que estaba en el sofá mirando mi móvil pues... Zayn me ha traído literalmente hasta aquí porque el muy capullo vino en taxi porque aquí no tiene coche.

-¿No podía volver en taxi?

-Tendrá mucho dinero, pero cuando se vuelve cabezota nadie puede hacer que cambie de opinión.-Suelto un suspiro y me echo a un lado, apoyándome en la pared.

-¿Y ahora qué hago?-Digo y él se queda callado.-Louis, ¿No querrás que vaya andando no?-Abunda el silencio en esta conversación y me estoy cabreando.-¡Sabes dónde demonios estoy verdad?

-Claro, en el hotel ese que te reservé el otro día.

-Está a casi media hora andando. Ni siquiera sé bien las calles, me voy a perder.

I'm YoursDonde viven las historias. Descúbrelo ahora