3.- Siempre Serás Tú

3. Y comenzó el último año para todos.

[Joaco]

Bueno, supongo que Leo ya les comentó que tengo un hermoso anillo Cartier, que quién sabe cuánto cuesta, y me encanta. Recuerdo ponérmelo todos los días. Me recuerda un poco a mi padre.

Por otro lado, la hermana de Leo me intriga. Es buena persona y todo, pero cuando está en su cuarto parece como si estuviera escondiendo algo. Leo me dijo que ella es administradora de una joyería en Europa y vino por trabajo. Pero no es de mis asuntos, así que está bien.

Y estamos en Febrero. Hoy comenzamos nuestro último año de colegio. Estoy nervioso, no voy a negarlo. Supongo que todos se ponen nerviosos al iniciar el año de su graduación, ¿no?

Leo se veía muy preocupado mientras estaba sentado en mi cama.

-Oye, ¿estás bien?- Pregunté sentándome a su lado.

-Sí...- Me dedicó una sonrisita nerviosa- Supongo.

-¿Supones?

-No, no estoy bien- Confesó con un gemido- No sé qué pasará y no me gusta no saberlo.

-Nunca hemos sabido lo que pasará y aquí estamos- Señalé.

-Sí, pero antes nadie sabía que éramos pareja- Replicó él- El año pasado, los últimos dos meses fueron horribles porque todos lo supieron.

Sí, es verdad que la mitad del colegio nos molestaba, pero a mí no me afectó y me parecía que a Leo tampoco. Ahora parece que sí le molestó, un poquito.

-Tú tranquilo- Dije tomando sus manos- Somos más fuertes ahora, lo sabes. Además, hemos pasado por muchas cosas y las hemos superado.

Se le alivió un poco el rostro, pero su sonrisita seguía algo tensa. Para destensarlo, me acerqué a él y le dí un suave besito en los labios.

Me encanta que Leo ya no tenga miedo ni se ponga nervioso con las personas. Se lo nota mucho más libre, como si se le hubieran soltado mil pesos de encima. Y, obvio, lo que más me gusta es que por fin me deja besarlo. Le dije que lo lograría algún día, y sí lo logré.

-No sé qué haría sin tí, Joaco- Murmuró al separarnos.

-Es probable que no hayas sobrevivido al primer mes hace dos años- Bromeé.

-¿Siempre tienes que arruinar los momentos románticos- Dijo riéndose- No, hablo en serio. Sin tí no sé qué haría. Es probable que no haya sobrevivido al primer mes.

Su risa ya estaba mucho más aliviada y su sonrisa no se veía tensa, pero yo pude notar que todavía estaba preocupado.

-Verás que el colegio terminará bien- Lo animé- No tienes que preocuparte por eso.

-Lo sé- Dijo.

-Entonces vamos- Dije levantándome- No lleguemos tarde al primer día.

-Nerd- Terció mientras se levantaba.

Salimos juntos. Mientras caminábamos, le dí la mano y andamos así. Al llegar a la puerta del colegio, Leo se detuvo.

-¿Qué pasa?- Pregunté.

Él me miró tenso y luego miró nuestras manos tomadas. Lo entendí: él todavía no está listo para hacer nuestra relación totalmente pública.

-No te preocupes- Le sonreí y solté su mano.

-Gracias- Me dijo con una sonrisa.

-¿Un besito de inicio de clases?

-Ni lo sueñes.

Acto seguido, entró con una sonrisa burlona sin mirarme.

-Te prometo que lo lograré algún día, Leo- Dije, entrando atrás de él.

Entramos y, como estaba esperando, nos encontramos con Mica en el salón.

-Ahí está mi parejita favorita- Dijo sonriendo.

-Es bueno verte de nuevo, Mica- Saludó Leo.

-Lo mismo digo- Respondió.

-Hola, chicos- Saludó otra chica.

Andy apareció por atrás de Mica. Su cabello pelirrojo resaltaba mucho en cualquier lugar.

-¿Qué tal, Andy?- Saludé.

-Todo bien- Respondió.

Me dí cuenta que faltaban dos personas en el grupo.

-¿Dónde están Agus y Jase?- Pregunté.

Pausa, un momento. Tal vez recuerden que el año pasado yo me llevaba fatal con Andy y Jase. Bueno, en los últimos meses del año me demostraron que son chicos muy buenos y divertidos. Ahora me caen muy bien, en especial Jason. Nunca hubiera pensado que pasaría eso.

-Jase dijo que no vendrá esta semana- Informó Andy- Creo que estaba de viaje o algo así.

-Y Agus...- Comenzó Mica- La verdad es que no tengo ni idea. Supongo que llega más tarde. No sería raro en él que llegue tarde a su primer día.

-Buen punto- Dije.

-Y bueno- Dijo Leo- Año de graduación.

-Sí...- Suspiró Mica- Será el mejor año si estamos los seis juntos.

-Sí, lo será- Dijo Andy.

-No puedo esperar a pasar por todas las actividades de este curso, en especial el viaje de fin de año- Dijo Mica.

Nos miramos con sonrisas. Ahí comencé a recordar el día que conocí a Mica y Agus, en el primer año de Secundaria. Llevamos seis años siendo amigos. Luego recordé el día hace dos años, cuando ví a un chico tímido, vestido todo de negro. Ahora ese chico es mi novio. Y el año pasado, cuando reconocí a los culpables de la timidez de mi novio, quienes ahora son de mis mejores amigos.

Cómo pasa el tiempo.

-En fin, mejor vamos a sentarnos- Dijo Mica, sacándome de mi ensimismamiento- El profe llegará en cualquier momento.

Los cuatro nos repartimos en nuestros lugares. Estuvimos en la esquina del salón. Leo en la esquina, yo a su lado; en frente a nosotros, Mica y Agus (quien llegó en el segundo periodo) y frente a ellos, Andy y Jase (le reservamos el asiento).

Tengo una buena corazonada para este año.