[Leo]
-Tu amiga es rara.
-La tuya también.
-¿Qué?
Se lo pensó un momento antes de volver a hablar.
-Bien, la tuya no.
Estábamos en cama luego de aquel largo día. Por suerte el día siguiente era Sábado, así que no había problema.
-¿Por qué mi amiga es rara?- Preguntó.
Estábamos lado a lado mirando al techo. Me sentía bien estando de nuevo a su lado. Sí, me gustó pasar el día con Jason... pero extrañé estar con mi novio.
-Digamos que se pasó todo el día dando grititos y suspirando por Germán- Respondí- Lo normal, ya sabes.
-Ajá, lo normal- Repitió.
Nos quedamos en silencio un momento hasta que él habló:
-Así que Germán...
-Sí...
-¿Te parece atractivo?
La pregunta me tomó por sorpresa, pero el tono de Joaco no era acusador, así que decidí ser honesto.
-Un poco.
Bueno, tal vez no completamente honesto.
-¿Un poco?- Preguntó.
-Sí...- Dije- Es lindo. Y tengo que decir que tiene un cuerpo increíble.
Él giró su cabeza y me miró.
-¿Un cuerpo mejor que el mío?- Preguntó para provocarme.
Me ponía un poco incómodo por eso, así que me alejé un poquito de él.
-Joaco, admite que no tienes tanto músculo como él.
-Hm...- Se hizo al que pensaba- Tal vez. Pero, ¿prefieres su cuerpo al mío?
Esto se pone cada vez más raro, ¿qué está pasando con Joaco?
-Tal vez...- Respondí dudando.
Nos quedamos en silencio.
-No lo sé- Me corregí.
-Bueno, sí tiene un buen cuerpo- Admitió Joaco.
Él giró todo su cuerpo para ponerse frente a mí. Yo me quedé de espaldas mirando al techo con las manos bajo la cabeza.
-¿Sabes quién es muy atractivo, además de Germán?- Preguntó al cabo de un rato.
Colocó su mano sobre mi pecho y comenzó a hacer circulitos con sus dedos. Me estremecí un poco pero también me gustaba la sensación.
-¿Quién?- Pregunté a mi vez.
-Tú.
Sentí mis mejillas sonrojarse y comencé a esbozar una amplia sonrisa.
-Tus latidos se están acelerando- Comentó, con su mano todavía en mi pecho.
-Sí- Dije y me giré para ponerme frente a él- Y es tu culpa.
Me sonrió con orgullo.
-Obviamente es mi culpa- Accedió.
Su mano que estaba en mi pecho ahora me acariciaba la mejilla. Yo hice lo propio con la mía.
-Tú también eres muy atractivo, ¿sabes?- Dije.
Él me dedicó una sonrisa más grande y se acercó más a mí. Nuestras piernas chocaban entre ellas y él enredó las suyas en las mías. Nuestros rostros estaban a pocos centímetros de distancia, hasta que la eliminamos con un lento y tierno beso.
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3.- Siempre Serás Tú
Romance*[Leer solo si se ha leído la primera y segunda parte de la saga]* 《La persona perfecta para mí, la que coloqué en mi libro hace dos años... definitivamente eres tú. Y siempre serás tú.》