👑 Capítulo XV 👑

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—No te entiendo. De verdad que no.
-Ya Victor. Déjame en paz.

Ambos jóvenes se encontraban en la recámara de Emma. Victor sentado en la silla de escritorio y Emma tirado en la cama boca arriba.

—No, no te dejo. Tú eres el que me ha estado atormentando con el tema del chico. Y no entiendo tu remordimiento si fuiste un patán con él.
—Ya sé que fui un imbecil. Pero hay algo que no te he contado aún.
—¿Hay más? Caray, me hago a la idea de por qué el pobre salió corriendo. ¿Qué es lo que no me has contado?
—Pues estaba de los nervios. Esa noche estaba tan empecinado en por fin tener una experiencia con alguien que no supe manejarme y tomé algo de drogas...
—¡Dime que no lo hiciste!
—Soy un idiota, ya lo sé. —tomó una almohada y se cubrió con ella el rostro.
—Ah, no. No te escondas. —Victor se levantó de la silla y fue en dirección a Emma, le quitó con fuerza la almohada y la tiró lejos. —Si de verdad te sientes mal por eso, ve y disculpate con él.
—Qué gran idea, sólo hay un detalle pequeño; ¡No sé dónde ubicarlo, ni siquiera sé su nombre!
—Para tu buena suerte, cabezota yo ya me encargué. Estuvo circulando en video en redes de cómo esa chica tan mona resultó ser él. Ouch, se le cayó la peluca y él cayó encima de Dayron Huerta.
—Al grano, ya.
—Bien, enojón. Pues según mis fuentes tu "Cenicienta con nepe" es Aiden Libera.
—¿Y ese tipo quién es?
—Haz memoria, clase de química, último asiento, es un cerebrito.
—¿De verdad?
—Yep, mis fuentes son certeras.
—¿Y por qué no lo hemos visto ya hace tiempo?
—Te contaré un cuento, querido Emm: Hubo una vez un hombre viudo que se casó con una mujer viuda también, o separada no sé. Y poco después él murió. Bueno esa mujer es madre de los gemelos Ruiz.
—Los clones descerebrados. Uno tan lleno de esteroides y el otro una diva en potencia.
—Exacto. Pues cual Cenicienta fue despojado de todo lo que estaba habituado y nadie sabe más de él.
—¿Tienes el video?
—Si, lo tengo. Cada que estoy aburrido lo veo para burlarme un rato. ¿Lo quieres ver?
—¡Obvio!

Victor le dio el celular con el video para reproducir a Emma y se sentó a su lado para verlo también.
Se veía a Aiden corriendo con cara asustada, y sostenía a una chica, quien le seguía el paso. Después el choque y lo demás.

—JA JA JA JA JA JA LO HIZO OTRA VEZ.

Mientras Victor se partía de la risa Emma puso pausa al video y se concentró en las facciones de Aiden. Eran tan definidas, delicadas y su piel se veía tan tersa al tacto, ¿Cómo no había reparado en su persona antes?

—¿Por qué no te ríes?
—Porque no tengo motivos.
—Si que eres agua fiestas. Dame mi celular.
—Él lleva de la mano a una chica, ¿Sabes quién es?
—Permiteme responderte con otra pregunta, ¿En qué mundo vives, Príncipe Emmanuelle? Es Raquel Villa, la mejor y única amiga de tu Cenicienta con nepe.
—Jamás la había visto.
—Es de esperarse, también es un ratón de biblioteca. Pero se ve que tiene buen gusto en moda, no lo discuto.
—Bien, creo que ya sé qué debo hacer.
—Yeii. ¿Y qué vas a hacer?
—Algo.
—Ya, igual me vas a decir. Pero mientras veré otra vez esa caída fenomenal. Jamás lo voy a superar.

No Soy Cenicienta. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora