𝑳𝒐𝒔 𝒏𝒊𝒏̃𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝑱𝒂𝒆'𝒔 [ 𝑇𝑤𝑜𝐽𝑎𝑒 / 𝑔𝑜𝑡𝑠𝑒𝑣𝑒𝑛. ]

🖼️ Capítulo 35 🖼️

[ Por los nuevos inicios, por las nuevas personas a conocer, por el destino, por el amor y, más que nada, por la familia. ]

—¿A qué hora llega tu madre? Se nos hará tarde.— Preguntaba un muy ocupado JaeBum mientras se adentraba cada vez más en el tráfico.

—Llegara allá con mi padre, ¿Tus padres vendrán?— JaeBum torció los ojos disimulando su enojo para contestar.

—Oh no, están ocupados fuera del país. Solo necesitamos dos testigos.— YoungJae hizo un gesto de disgusto al escuchar aquello. Sus suegros no estaban muy presentes en su vida.

—¿Appas a dónde vamos? ¿Puedo quitarme el chaleco? Me está dando caloooor.— Yugyeom lloriqueaba en el asiento de atrás mientras sus hyungs intentaban no explotar.

—Yugyeom ya basta, deja de desabrocharte la corbata, es difícil volver a hacerla.— Mark intentaba sujetar al menor pero este se resistía.

Todo era un caos. Era el día de la adopción.

Durante la cuarentena JaeBum y YoungJae estuvieron haciendo todo tipo de certificaciones y cursos para llegar a entrar a la larga lista de padres a considerar para adopción.

Habían decidido que en verdad era momento de dar ese paso, esos pequeños no se irían de sus vida jamás. Los amaban tanto y se habían acostumbrado tanto a ellos que una vida sin conocerlos o sin ser familia ahora les resultaba inimaginable.

Aunque está era una situación especial, ningún papel les faltaba y todo detalle había logrado ser cubierto.

Desde actas, consentimientos, incluso el testamento del hermano de JaeBum estaba presente. Pero aquí la gran cuestión, ni siquiera están casados en verdad ¿o no?, bueno pues según el Reino de España, España en sí, ellos sí estaban registrado como casados.

Habían tramitado el acta aunque no habían celebrado ninguna boda, aún. Era sencillo en realidad, solo el lenguaje había sido un pequeño detalle pero nada que el traductor no pudiera resolver.

Acordaron que se casarían en algún lugar de España, aún no tenían una idea clara pero el país era hermoso.

—Iremos a presentar unas actas para unos documentos y si todo sale bien podremos ir a tomarnos una foto familiar cuando terminemos.— respondió YoungJae mientras intentaba localizar a sus padres para avisarles que ya estaban llegando.

—¿Comeremos con la abuela?— pregunto JinYoung.

—Amo la comida de la abuela.— interrumpió Yugyeom.

El viaje terminó y los suegros de JaeBum ya esperaban dentro del edificio. No había mucha gente por las medidas de sanidad que aún se mantenían; el proceso se agilizó gracias a eso y les otorgaron la certificación oficial que los reconocía como responsables de los menores.

Aunque algunas personas inevitablemente los miraron mal no había motivo alguno para negarles el papeleo, además, no engañaban a nadie, había una que otra persona grabando a la figura pública de JaeBum. Una polémica no beneficiaria a nadie y menos si les negaban el derecho sólo por su orientación sexual.

Aunque sonara loco, al fin su pequeña familia era legal.

—¿A qué hora es la cita en el estudio fotográfico?— preguntó JaeBum saliendo de las oficinas con una sonrisa que se borró de inmediato al ver la cara de YoungJae que se leía como un TARDE, VAMOS TARDE.

La familia de 5 corrió al auto y aunque los menores solo habían estado paseando por la recepción del edificio y hablando con sus abuelos no entendían muy bien lo que pasaba.