°•☆ Donde Jimin es un típico omega que sólo se dedica a su esposo y a sus hijos.
Pero su sueño de una familia feliz se rompe cuando ve que ha estado luchando por un amor que ha estado roto desde hace mucho, mucho tiempo. ☆•°
ADAPTACIÓN AUTORI...
Advertencias: Jungkook alfa/Jimin omega. Drama y angst.
Este capítulo contiene abuso.
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La relación con sus hijos no mejoró con el paso de los días. Lo más doloroso para Jimin fue no verles más como sus cachorros, diciéndose a sí mismo que ya habían crecido, y de ser "la dulce mamá", ahora solo era "un omega que no les quiso cuando nacieron". O al menos así lo veían Jeongsan y Jisung. Yejun era distinto, siendo el único que podía llegar a sentir el dolor en los ojos de su mamá.
Jimin agradecía que su pequeño no le tratara de forma esquiva o le dirigiera miradas acusadoras. Aun así, no podía pretender ignorar que Yejun había sido quien llamó a Jungkook, contándole todo como si realmente Jimin hubiera engañado a su alfa. Jungkook, por otra parte, había aceptado que Chaewon fuera su amiga, pero en el fondo sabía que le hería en su orgullo. Intentaba ser más flexible, permitirle que ciertos días llegara media hora tarde si estaba con buenos ánimos, pero casi siempre debía contarle a dónde había ido con Chaewon, como si quisiera asegurarse de que no hacía nada incorrecto.
Le entristeció pensar que una omega como Chae, libre e independiente, fuera vista con malos ojos solo porque no estuviera casada con un alfa. ¿Qué había de malo en eso? ¿Cuántos malos comentarios y desprecios había tenido que sufrir por ello? Chaewon se mostraba siempre tan segura y tenaz, pero en su intimidad, estaba seguro de que había recibido el rechazo de muchos por las decisiones que había tomado.
Él lo estaba viviendo en sus propias carnes y no era nada agradable, pues parecía que los omegas siempre eran los que se equivocaban y los alfas los que llevaban razón en todo, teniendo que pedir disculpas por cada cosa que hacían.
Por otra parte, el resto había notado que el ambiente en casa estaba cada vez más cargado y tenso. Las cenas se desarrollaban casi en completo silencio, ya no había más peleas ni discusiones. Jimin le habian dejado bien claro a Jungkook que no quería volver a gritarse con él con los cachorros escuchando todo. Sin embargo, a la hora de dormir, Jungkook podía notar perfectamente las feromonas de tristeza que rodeaban a Jimin, provocando que su relación sexual se resintiera. El omega supo controlarse para no echarse a llorar mientras preparaba la cena o limpiaba la casa, su estado de ánimo lo percibian todos, y llegó un punto en que Jungkook tuvo que tomar cartas en el asunto.
Una tarde en la que Jimin había quedado con Chaewon, el alfa lo aprovechó para tener una charla con sus cachorros.
Pasó por el cuarto de Yejun, quien tenía la puerta entreabierta, viendo que estaba en el escritorio, haciendo deberes o estudiando, muy concentrado. No quiso interrumpirle, y se dirigió a la otra habitación, entrando sin llamar y encontrando a Jisung jugando con la consola y a Jeongsan leyendo sus mangas en la litera de arriba.
Nunca se le había dado muy bien tratar con sus hijos, eso siempre había sido tarea de Jimin, pero dadas las circunstancias, no le quedaba más remedio.
