Obey Me!/ Oneshots

A mi lado

Aquella noche la mayoría de los hermanos estaban fuera de casa festejando que la época de exámenes había terminado, por lo que decidimos cancelar la cena familiar y preparar cada uno nuestra comida.

Mientras inspeccionaba la heladera y la alacena en busca de inspiración para cocinar, encontré media jarra tibia de café. Supuse que la hizo lucifer, sin embargo, no había dignos de que haya cocinado algo así que decidí preparar algo para el también. Cuando tiene mucho papeleo para terminar deja de prestar atención a cualquier cosa que no tenga que ver con el trabajo, en este caso comer algo que no sea café.

Prepare unos sándwich teniendo en cuenta que serían más fáciles de comer sin el riesgo de ensuciar los documentos. Los puse en una bandeja junto con unas servilletas y una nueva jarra de café, con mucho cuidado los lleve a su oficina y toque a puerta.

-Adelante- respondió una voz cansada desde dentro- Oh, Mc eres tú ¿hay algo que necesites?

-No, es solo que quería traerte algo- me adentre a la oficina y deje la bandeja sobre la mesita ratona ya que el escritorio estaba ocupado por pilas y pilas de documentos- ¿Esta bien si lo dejo acá?

-Si, está bien- me miro con una ligera sonrisa- En verdad aprecio que hayas tomado el tiempo de prepararme algo.

-No es nada, siempre estás trabajando y... - últimamente Lucifer se sentía más tenso, como si algo le molestara, pero no estaba segura si en verdad era así o si solo era mi imaginación- ya debería irme, todavía estas ocupado- me di la vuelta y camine hacia la puerta.

-Espera Mc, ¿podrías quedarte un momento más? – volteé y asentí- Por favor, toma asiento a mi lado.

-Está bien - tome la bandeja de nuevo colocándola sobre mi regazo al sentarme para que los refrigerios estén a su alcance.

-No es necesario que hables, solo con tu presencia es suficiente- sonreí mientras continuaba con su trabajo y de vez en cuando tomaba un sorbo de café y probaba los sándwich. Aunque estemos en completo silencio no es necesario decir una palabra, nos sentimos completamente cómodos ante la presencia del otro.

Al cabo de lo que parecieron horas, Lucifer termino con el papeleo y suspirando se apoyó en el respaldo de su silla. Se veía exhausto e intranquilo. Lo mire un momento y deje la bandeja sobre la mesa ratona para luego acercarme de nuevo- Hay algo que te está preocupando desde hace un tiempo...

-Nada de lo que debas preocuparte.

-No sirve de nada tratar de ocultarlo, Lucifer- lo mire con preocupación escrito en mi rostro. Me gustaría saber qué es y tratar de ayudar de alguna forma.

-En verdad no es importante. De hecho, es algo tan minúsculo que difícilmente vale la pena mencionar- me devolvió la mirada y continuo- ...Pero estas en lo correcto. No hay nada que pueda ocultar de ti ¿o sí?

- ¿Entonces que es?

-Simplemente tengo el presentimiento de que algo malo va a pasar- suspiro de nuevo- No estoy seguro de si habrás notado, pero Lord Diavolo ha estado delegando gran parte de su trabajo y cancelando reuniones- Comenzó a ordenar algunos de los documentos en sus respectivas carpetas- Cualquiera sea la causa, debe ser de suma importancia, sin embargo, cada vez que pregunto al respecto dice que no puede decirme o que me enterare cuando sea el momento correcto.

- ¿Intentaste preguntarle a Barbatos o Simeon?

-Ya lo intenté y se negaron a responder... Es como si todos supieran algo muy importante menos yo- miro a otro lado- No lo tienes que decir, sé que es patético. Diavolo debe tener una buena razón para mantener la información en secreto. No sospecharía si solo Barbatos supiera, pero es sumamente extraño que Simeon esté involucrado.