—¿Podrías dejar de comer esa mierda?
Frunzo el ceño, mirando en dirección al sofá en que la pelinegra se encuentra con una toalla húmeda en la frente y una mueca de repugnancia mientras me ve.
Termino de masticar el bocado de hamburguesa que sigue en mi boca, lamiendo rápidamente la salsa de tomate que había escapado y manchado mi labio inferior.
—¿De qué hablas? Esto está delicioso.—me encojo de hombros, tragando el contenido en mi boca antes de continuar. Ella suelta un gruñido de desagrado mientras arruga la nariz.— Siempre te han gustado las hamburguesas.
—Ya no.—gruñe casi para sí, volviendo a mirar al techo con una incómoda mueca.—De solo olerla quiero vomitar.
—A eso se le llama naúseas, preciosa.—comenta la pelirrubia que acaba de entrar a la habitación con una botella de agua en la mano, seguida de cerca por Orton.—Bienvenida al segundo mes.
Paige suelta un sonido de molestia, agarrándose del sofá para así sentarse y poder mirarla con la misma mueca poco amistosa. Se le veía así muy seguido últimamente.
—Vete a la mierda, Char.
La fémina solo le sonríe, alzándole la botella de agua mientras Randy toma asiento a su lado. No estoy seguro de cuál era su relación ahora, pero el que compartieran una breve sonrisa me hace saber que no están del todo mal. Y considerando lo ocurrido este último tiempo, y que todos sepamos del trasfondo de las naúseas de Paige, aligeraba un poco la tensión del tema en cuestión.
—Ambrose, por favor.—me regaña la rubia, mirándome desde la otra esquina de la habitación.— Tienes trabajo esta noche y estás aquí tragando como un cerdo.
No me importa, por lo que me encojo de hombros y sigo comiendo lo que me queda de mi hamburguesa hasta que no queda ni un bocado. Mastico rápidamente antes de mirar a la diva, enseñándole mis manos vacías.
—¿Feliz?
Charlotte suspira, cruzando los brazos sobre ese top brillante rosa que usa para salir al ring:—Lo estaría si no parecieras un mocoso que acaba de terminar de comer.
Ruedo los ojos y comienzo a quitar de mala gana las migajas que se habían esparcido por mi camiseta, a lo que la rubia solo rueda los ojos antes de volver con Paige tratando de mantenerse despierta. Orton la ha dejado apoyarse de su hombro, mientras que ella no deja de fruncir el ceño y gruñir bajito por el disgusto.
Honestamente, si no pudiera ni oler una hamburguesa, estaría igual de molesto que ella.
—Hablé con Becky.—retoma la fémina de apellido Flair, a lo que Paige solo abre ligeramente sus ojos de poca gana.— Le conté sobre esta noche.
Paige se talla la cara con las manos, mirando a su compañera de equipo.
—¿Y?
—Está molesta.—responde con seriedad.— Dice que no deberías hacerlo, y yo tampoco te apoyo.
Le escucho soltar un sonido de disgusto:—Charlotte, por favor...
—Estoy con ellas, Saraya.
El serio tono de voz de la víbora parece lanzar otra nube de tensión sobre nosotros, a lo que no tardo en levantar la mirada y unirme a la extraña conversación llena de miradas venenosas y de regaño. Los ojos de Paige ya se han oscurecido, delatando la pelea que se aproxima.
—Uh... ¿Me perdí de algo?—pregunto, pareciendo un tonto.— ¿Qué pasa esta noche que no estoy enterado?
—Buena pregunta, Sherlock. Que te lo explique, Charlotte.—la pelinegra se dispone a levantarse del sofá y largarse.—Yo tengo que ir a...
![](https://img.wattpad.com/cover/71195013-288-k760430.jpg)
ESTÁS LEYENDO
My Demons|| Dean Ambrose (Retaliation#2)
Fanfiction❝Ambos teníamos demonios, solo que los míos aún no se han ido❞ Segundo libro de ❝Retaliation❞ Portada actual@anarchistsoul Portada anterior @-PsychoPeople Trailer por: @SatiricayMordaz Banner por: @-PsychoPeople Aesthetic by: @moaningroman