Nuestro Error (EDITANDO)

Cap XI

O tal vez.. puedo tener a los dos..?

Tener a los dos, fue la pregunta que formó Mafuyu en su cabeza mientras veía al rubio sonreírle desde el sillón.

Yuki: Mafuyu, como fue eso que te querías suicidar?- el rubio rompió el silencio con una pregunta algo incómoda

Mafuyu: te necesitaba.. me sentía solo, vacío, sin ganas de nada, no me sentía nada bien.. y la idea venía a mi cabeza una y otra vez, quería ir a tu lado, quería volverte abrazar, sentir y abrazar- el pelinaranja se acercó al rubio y le acarició el rostro- pero hubiera sido en vano..

Mafuyu se dirigió a su habitación y se encerró, acababa de estar con su pareja, pero ¿Por que de nuevo de sentía inseguro?.

Si tan solo los dos.. no.. yo lo amo a él

Nuevamente aquella disputa, una amarga, e insegura. Y la decisión? Que paso con ello? Porque nuevamente dudó??

Mafuyu: no debiste estar tan cerca.. debí echarte...

Estaba arrepentido, realmente aún quiere al rubio, pero también a Uenoyama.. porque?

Mafuyu: porque ambos son tan tiernos? Tan extrovertidos? Tan.. míos..- por un momento la idea Sono egoísta ellos no son objetos. Pero por alguna razón quería quedarse con ambos.. - solo.. quiero.. tenerlos a los dos..

Este es mi error, nuestro error.. no debí dejar que nada pasará.. solo debí .. no.. Uenoyama-kun jamás será un error y Yoshida-kun tampoco

El pelinaranja se llevó sus manos a la cabeza, que confusión sentía en ese momento, solo quería que la tierra se lo coma, amaba a Uenoyama pero también a Yuki, amaba tanto a los dos. Pero su decisión ya estaba hecha. Uenoyama fue su elegido y debía permanecer así.

Un sonido se hizo dueño del cuarto era su celular, Uenoyama lo estaba llamando.

Mafuyu: Uenoyama-kun, que pasa? Estás bien?

Uenoyama: más que bien, solo quería decirte que llegue a casa, pero no puedo dormir.

Mafuyu: oh, quieres charlar cariño?

Desde la otra línea se oyó un ligero quejido y un suspiro pesado.

Uenoyama: Mafuyu, te amo

Mafuyu: yo más Ritsuka!

Nuevamente el quejido, Mafuyu solo soltó una risilla que causó un ligero rubor que Mafuyu no podía observar.

Uenoyama: evita decirme Ritsuka... Me pone nervioso.. me encanta que digas mi nombre, pero realmente me pongo nervioso, me siento morir.. pero de amor..

Mafuyu solo suspiro, sabía que se sentía ese sentimiento, solo solto otra risilla.

Mafuyu: descansa Uenoyama-kun, ya es hora de dormir

Uenoyama: pero mañana es domingo!¡

Un domingo.. si..tal vez sería hora también de salir con él y así lograr tomar la decisión correcta.