Malcom observaba a su hijo como se paseaba por la estancia algo nervioso – si sigues así vas a gastar el piso hijo
Duncan lo miro con severidad – pues cambiaríamos el piso y ya
- ¿Pero por que te paseas tanto? ¿esperas una carta importante?
- No padre... espero a una persona – se detuvo y miro por la ventana
- ¿A quién? – sabia perfectamente a quien esperaba, pero ultimadamente picar a su hijo se había vuelto muy divertido – ¿a tu secretario?
- No padre – ni siquiera se volteo a responderle, no dejaba de observar por la ventana
- ¡Mira ahí viene! – sonrió a ver como su hijo llegaba a saltar y se inclinaba más para poder mirar mejor
- No viene padre... Bo..- se callo
- Yo me refería a tu secretario – sonrió al ver como Duncan se ponía tenso
Duncan apretó los dientes, no quería pensar que su padre le estaba tomando el pelo, no sabia si lo imaginaba, pero su progenitor ultimadamente disfrutaba molestarlo – pensé que era otra persona
- Oh yo pensé que esperabas a tu hermana quizas, sabias que ella fue al pueblo con Bonnie a la modista – miro al cielo – dios nos asista y ampare
Se paro derecho y observo a su padre detenidamente, llevaba ya dos semanas sin pasearse por las noches por el castillo o por los alrededores, estaba bien vestido, peinado y limpio, es más podía vislumbrar en sus rasgos al hombre que fue, al que admiro al que aun admira y respeta; ya no tenia reportes de su mayordomo de como se perdia por días en el pueblo o dejaba de comer -usted padre usted
- Si hijo estoy bien ... jamás estuve mal, solo estaba enfermo de dolor y pena, cuando pierdes al amor de tu vida, el mundo se oscurece y todo pierde sentido
Duncan guardo silencio esas palabras refirmaban su decisión de no casarse por amor, eso era la peor decisión de todas, te vuelve débil, te quita la fuerza, el no deseaba eso, cada día reafirmaba su postura de un simple matrimonio por conveniencia – me alegro que te sientas mejor padre
- No me preguntaras que me hizo querer volver
- Supongo que aceptaste que madre ya no esta ...que no estará nunca más
- Eso jamás lo aceptare, porque seria olvidar aquel gran amor que sentimos, los bellos recuerdos que quedan y la prueba real de ese gran amor, mis hijos en ustedes ella vive – sonrió con nostalgia – fue cierta damita que me ayudo a darme cuenta que tu madre jamás moriría que siempre estaría aquí – se toco el pecho señalando su corazón – si yo no olvidaba los buenos recuerdos, si miraba a tu hermana a los ojos o tu terquedad -rio
- Yo no soy terco padre, además si lo fuese seria a ti, madre era una santa
Malcom soltó una carcajada – los hombres MaCewen necesitamos mujeres fuertes, decididas y con determinación cualquier otra se nos volvería un estorbo a la larga y terminaríamos odiándola – lo miro serio – no te equivoques en la elección de esposa hijo una mujer adorno o sus excelentes relaciones no merece la pena si tan solo te llenara de frustración
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Cautivando al Ángel
Romansa¿El guerrero escoses lograra cautivar a su Ángel encanto, amor y pasión? Los besos del Ángel, resucitaron el alma oscura y lúgubre de aquel escoses, sería el capaz de dejarla ir, a iluminar la vida de otro hombre y saber tuvo la felicidad en sus man...