La hermana perdida de Jacob Black.

Capítuilo19

Desconocido

Ella no puede luchar, no puedo dejar que mi impronta luche y la puedan hacer daño, que simplemente la puedan herir, yo mismo le había pedido a Sam que la apartara un poco, pero solo un poco, nunca pensé que se alejaría tanto de la manada como de su familia, pero lo único en lo que pienso es que no he podido cometer peor error...

Megan

-¿En que mierdas estás pensando? No puedes luchar- dijo Jacob haciendo que Marco y yo nos diéramos la vuelta y vieramos a la manada delante de nosotros.

El que estaba en medio y el que tenía mi atención era Jacob, quien estaba serio, con los puños apretados tan fuerte que estaban los nudillos blancos, nos quedamos mirándonos.

-¿A qué te refieres?- pregunté seria.

-A que no puedes luchar.

-Tú no me mandas Jacob- dije cruzándome de brazos.

-Me importa bien poco que estés enfadada, no vas a luchar, no puedo protegerte si te pones en peligro.

-No necesito que me protejas Jacob, llevo diecinueve años sola, no he ha protegido nadie, no me has protegido en diecinueve años, ya no sirve que me quieras proteger ahora.

-Mira lo que me importa Megan, soy tu hermano mayor, y no vas a luchar- dijo furioso.

-No soy una niña pequeña, no soy una damislea a la que tengas que salvar, no necesito que nadie me proteja- dije acercándome- Y tú no eres mi familia, nunca lo fuiste, solo quieres que sea un muchacha que no hace nada y que se deja proteger, pues no lo soy, y no lo voy a ser nunca.

-No estuve nunca porque no sabía que existías, porque yo no sabía que mi madre seguía viva, porque mi madre tuvo que irse para protegerte- dijo desesperado- Eso es lo único que quiero hacer, protegerte, como ella lo hizo- dijo con lágrimas en sus ojos y dejando que cayeran por sus mejillas sonrosadas- No quiero que te pase nada, ahora que se que te tengo... no... no puedo per... perderte.

La conversación había pasado de gritarnos lo que teníamos encerrado en lo mas profundo de nuestros corazones, a que Jacob dijera lo que pensaba de verdad, y joder, no quería que llorara, pero estaba cabreada, me había mentido en todo, yo había venido de buenas y ellos me mienten.

-No llores- supliqué en voz baja- No llores, por favor.

-No quiero perderte...- dijo completamente destrozado- No puedo...

En menos de un segundo me encontraba entres los brazos calentitos de Jacob, no, no puedo dejarme derrumbar.

-Jacob suéltame- dije sin moverme.

-Por favor, Meg- dijo abrazándome con fuerza.

-No Jacob, no quiero que estes mal, pero tampoco te voy a perdonar, así que por favor suéltame- dije con fuerza en mi voz.

Él con un suspiro se alejo de mi, pero quedándose cerca, alargué mi mano y le sequé las lágrimas, cerró los ojos con una pequeña sonrisa.

-Lo siento...- dijo con simpleza.

-Lo se, pero no puedo, no ahora- dije negando- No puedo olvidar lo que has echo, no por ahora.

Me eche hacia atrás y me puse al lado de Maco, les asentí en modo de despedida y Marco y yo nos largamos de ahí.

-¿Haremos guardia?- preguntó Marco.

-Sí, ¿por?

-Nada- dijo serio.

Le miré con confusión, pero si no me lo quería decir, no le iba a obligar a nadie a que me dijera nada privado.

-Oye- dijo llamando mi atención.

-Dime- dije mirándole.

-¿Hacemos maratón de pelis hoy?

Sonreí ampliamente y reí con ganas, solo a él se le ocurre sacar ese tema ahora mismo.

-Claro por que no....

Se que es corto, pero es como un adelanto del resto, he tenido algo de ayuda, y mucho animo de Vivissa-krak, de todas formas, seguiré escribiendo, no me demoraré mucho en escribir los entrenamientos y todo eso, así que seguramente escriba directamente la pelea, si queréis decir cualquier cosa, aportaciones de maneras de escribir, si quereís que ponga algo en especifico, adelante, lo recibo con alegría... Otra cosa, muchísimas gracias por los comentarios y los votos, no sabéis lo que me alegra saber que la gente me lee y les gusta, les debo mucho, muchísimas gracias.

un abrazo