Capítulo 32

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Zhan lo toma de la cintura y comienza a besar sus labios, cierra la llave de la regadera, toma sus manos y las coloca alrededor de su cuello, sin dejar de besarlo, luego toma su pierna derecha, la sube y comienzan a acariciarla.
—Mnm Zhan...
—Sube tus piernas.
Zhan coloca las piernas de Yibo alrededor de su cintura y mientras besa su mandíbula y su cuello, lo penetra lentamente hasta el fondo, haciendo que un escalofrío recorra su cuerpo.
—Ahhhhh.
—Sujetate bien, sube un poco más las piernas mi amor.
—S-si. Hah ah...
Zhan sujeta su trasero para mantenerlo en su posición, pasa su lengua por su cuello y lo besa dejando pequeñas marcas en su paso. Yibo no se resiste y busca el contacto con sus labios, metiendo su lengua en la boca de Zhan comenzando así un beso apasionado, lamiendo y siendo mordido lentamente excitandose él uno al otro, Zhan masajea el trasero de Yibo con sus manos mientras mantiene su miembro dentro de él haciendo que su deseo explote aún más.
—Ahhh mi amor por favor... Estoy muy excitado...Zhan... mi amor, por favor...
—¿Por favor que?.
—Quiero que te muevas dentro de mi.
Zhan obedece y lo embiste de manera rápida, sin control, mordiendo sus labios y sujetandolo con firmeza.
—Ah...ah...ah des-despacio... más despacio... Voy a... ¡Ah!.
Yibo se corre, pero Zhan sigue penetrando en su interior buscando su liberación.
—Ya detente... Zhan... por favor...ah... ¡Mi amor para!.
—No. –Baja sus piernas y le da la vuelta para poder seguir penetrando desde atrás mientras masajea el miembro de Yibo para que vuelva a excitarse, besa y muerde sus hombros, dejando marcas por todo su cuello y espalda.
—Agh...duele, ya no me muerdas, ah...
—Mio, sólo eres mío, te amo Yibo. –Lo dice sujetando su cintura, dejando más marcas, alcanzando su liberación y haciendo que Yibo llegué igualmente al clímax.–
—Haaah... Zhan... mi amor...ah...
Zhan lo abraza antes de que Yibo se caiga y este termina por desmayarse en sus brazos.
—¿Yibo? Aiya... ¿Es encerio?.

Por la mañana Yibo se despierta algo adolorido en la cama cubierto sólo por las sábanas al lado de Zhan que lo sujeta con un brazo alrededor de su cintura mientras duerme. Yibo lo abraza pegandose a su pecho sintiendo su calor, escuchando el sonido de su respiración y sintiendo su corazón latir en su pecho.
—Mmm Didi, tengo hambre, dame comida.
—Ni siquiera has despertado completamente, ¿y ya estás pensando en comer?.
—Hice muchas cosas ayer después de cenar y ya tengo hambre.
—Entonces ve por comida.
—No quiero, después de lo que hice por ti ayer me lo debes.–Se da la vuelta dándole la espalda–
—Zhan ge ¿De verdad tienes hambre?.
—Si.
—Entonces cómeme.
—Se da la vuelta de nuevo para mirarlo.— Tu no tienes la suficiente carne, sabor, vitaminas y minerales que necesito.
—¿Ah? ¿Eso que demonios significa?.
—Que no soy un caníbal. Ve a vestirte y trae mi comida rápido antes de que te deje más marcas en el cuerpo.
—¡Que grosero! ¡Ni siquiera un buenos días mi amor!.
—Si, si, si, como digas.–Hace un gesto con la mano como diciendo: levántate y muévete– Ándale ve amor mío y consiente a tu novio.
—Sin vergüenza.
Sin más remedio Yibo se levanta y se viste para ir a buscar algo de comida, cuando mira el reloj antes de irse son las 11:15 am.
—(No puedo creer que sea casi medio día).
Se va y compra algo de comida para ambos y cuando regresa mira a Zhan sentado en la cama mirando algo en su laptop.
—Ya llegué con la comida. ¿Amor que estás haciendo?.
—Estoy buscando un departamento disponible para nosotros.
—¿De verdad nos iremos a un departamento? ¿No podemos quedarnos aquí?.
—No, es mejor que rentemos un departamento para quedarnos durante el tiempo que estemos juntos aquí.
—Esta bien, ¿y ya has encontrado algún buen lugar?.
—He visto algunos lugares mediante fotos pero no estoy seguro de cual escoger, tendríamos que ir a verlos.
—Entiendo. Bueno vamos a comer primero.
—Esta bien. –Cierra la laptop y se acerca a Yibo para darle un beso en los labios.
Por la tarde salimos y vamos a ver algunos departamentos pero no es hasta después de dos días finalmente escogemos uno algo cómodo y espacioso con buena decoración.
—Bien, talvez no sea una gran mansión de lujo pero viviremos cómodos durante el tiempo que estemos en Milán. –Pasa y deja las maletas con sus cosas en la sala.
—Gege creo que mejor nos hubiéramos quedado con el departamento pequeño.
—¿Mmm? ¿Porqué dices eso? Aquí tenemos espacio suficiente para poder hacer lo que queramos y hay un balcón para salir y ver hacía la calle y un poco de la ciudad.
—Si pero no entiendo para que escogimos uno con dos cuartos.
—Porque querías un departamento donde hubiera espacio suficiente para poder patinar y colocar legos, ¿lo recuerdas?.
—Si pero...
—Mejor vamos a desempacar.
Después de un rato terminan de guardar sus cosas y cenan algo de pizza. Zhan se acuesta en la cama y enciende la tv, Yibo se quita la ropa dejándose el bóxer y una camiseta,se acuesta a su lado y lo abraza.
—Didi...
—Mmm...
—¿Quieres tomar un baño?.
—No, no tengo ganas, además tomamos un baño en la mañana, estoy cansado.
—Esta bien, entonces ya duérmete, dejaré la luz del baño encendida y la puerta abierta para que entre la luz.
—Zhan ge no me quiero dormir todavía, quiero estar contigo, hace tres días que no lo hacemos.
—Tu dijiste que estabas cansado y no quiero que te desmayes de nuevo.
—No lo haré, no estoy tan cansado.
—¿Recuerdas cuantas veces me has dicho eso y te has desmayado? La primera vez casi me matas del susto y hace tres días fue la tercera vez, ¡te desmayaste apenas y termine de hacerlo!.
—Pero de verdad no volverá a ocurrir Zhan ge.
—No te creo, mejor descansa por hoy, ya veremos mañana.
—No quiero, y si no lo vas a hacer tú lo haré yo entonces.
–Apaga la televisión, se sube sobre Zhan y intenta besarlo.–
—Espera, no, ¿Qué haces? Ya te dije que hoy no, no quiero que te desmayes.
—Y yo ya te dije que no voy a desmayarme.
—Pues no te creo y si no te quitas me iré a dormir al otro cuarto.
—¿Qué te pasa? ¿Por qué me rechazas de esa manera?.
—Porque no tengo ganas, ya me voy a dormir.
–Se cubre con la sábana y el edredón y se acomoda de lado para darle la espalda.–
—¿Asi es como será nuestra vida mientras vivimos juntos aquí? ¿No se suponía que íbamos a estar juntos para amarnos con total libertad y que para eso venimos?.
—Lo siento pero en verdad no tengo ganas hoy. –Yibo nota algo de tristeza en sus ojos y se da cuenta de que algo ocurre.–
—¿Qué te pasa Zhan? ¿Porque estas triste? ¿Con quien hablaste hoy por la tarde?.
—No me pasa nada, sólo tengo sueño y ya te había dicho que con mi asistente.
—Eso no es verdad, te fuiste al balcón para hacer la llamada y estabas algo extraño cuando terminaste de hablar, se muy bien cuando estás triste, así que dime ¿Qué fue lo que pasó?.
—No pasó nada, sólo son imaginaciones tuyas.
—Soy tu novio, ¿porque no confías en mí.?
—Por supuesto que confío en ti.
—Entonces dime ¿Tuviste algún problema en tu estudio o tu trabajo? ¿Te están acosando de nuevo? ¿Hablaste con tus padres?¿Te dijeron algo?.
—No quiero hablar de eso en verdad.
—Pues si no me lo dices yo mismo lo voy a averiguar. –Se levanta de la cama y toma el celular de Zhan que dejó sobre una silla, lo desbloquea y busca el número al que llamó por la tarde.–
—No Yibo, ¿Qué haces? ¡Devuélveme mi celular!. –Se levanta y intenta quitárselo.–
—¡No! ¡Lo sabía! Sabía que había pasado algo y que por eso estabas así, hablaste con tus padres ¿cierto?, pues si no me dices que te dijeron ahorita mismo les llamaré.
—No Yibo no lo hagas, sólo olvídalo, mira mejor regresa a la cama y tengamos sexo ¿si?.
—¡Ahora nada! ¡Ni creas que voy a caer así de fácil y que me olvidaré de esto! Ahorita mismo habló con ellos y que me digan lo que te dijeron a ver si tienen cara.
—No Yibo en verdad no.
–Yibo está muy molesto al ver que Zhan está triste por su culpa, así que les llama para saber que ocurrió y hablar con ellos, espera un par de minutos y al fin contestan, Zhan da de vueltas algo ansioso por la habitación.–
—Sr.Xiao— ¿No te dije que no volvieras a molestarnos?.
—No soy Zhan, soy Yibo y quiero que ahora mismo me diga ¿Que fue lo que le dijo a Zhan para que esté tan triste?.
—Yo no tengo porque decirte nada ni hablar contigo, yo no tengo porque escucharte.
—¡Pues lo va a tener que hacer!, Dígame ¿Que le hizo a Zhan?.
—Mi amor por favor cuelga.
—Yo no le hice nada, sólo le dije que no volviera a llamar hasta que no cambie y deje de ser quien es ahora.
—¿Y QUIEN SE SUPONE QUE ES AHORA? Zhan es una persona honesta, amable y muy responsable con su trabajo, que a pesar de todo sigue siendo una persona humilde y educada, TAL Y COMO USTED Y SU ESPOSA LE ENSEÑARON, ZHAN NO HA CAMBIADO EN NADA. ¿Porqué insiste en tratarlo como si tuviera una enfermedad contagiosa y extraña o hubiera cometido algún crimen? ¡Cuando él no ha hecho nada malo, más que enamorarse!.
Y escucheme bien señor, yo los respeto y les tome afecto cuando los conocí a usted y a su esposa y no solo por ser padres de Zhan, pero de verdad que la próxima vez que yo me enteré que usted o su esposa lo han hecho sentir mal de nuevo le juro que van a vérselas conmigo, se lo juro. –Cuelga la llamada.–
—Yibo... –Zhan llora y lo abraza– ¿Porque hiciste eso?.
—Tranquilo amor no pasa nada, ya no llores, mientras yo esté contigo no dejaré que nada te pase y no voy a permitir que nadie te haga sentir mal, ni siquiera tus propios padres.

Al día siguiente.
—Hoy hay un buen clima, ¿Te parece si salimos a dar un paseo por el parque que está aquí cerca?.
—Mmm está bien, pero ¿si vamos a llevar a nuez con nosotros?.
–Zhan sonríe –Si, ella irá con nosotros.
—Bueno entonces iré por mi patineta.

Durante la tarde damos un paseo por el parque, comemos helado y le muestro a Zhan los trucos que he aprendido.
—Zhan ge mira, ven a intentarlo.
—¿Yo intentarlo? ¿Quieres que me mate? Olvidalo, yo no podría hacer eso.
—¿Como lo sabes? Anda inténtalo.
—No ni hablar.
Después vamos a comer a un pequeño restaurante y volvemos juntos a casa caminando de la mano sin que nadie nos moleste, ojalá pudiéramos seguir siendo libres por siempre.
—¿Te divertiste?.
—Si, ¿Podemos volver mañana?.
—Mmm no lo sé talvez, incluso podríamos tomarnos más fotos y quizás intente hacer algún truco de los que tú haces.
—¿Encerio? ¿Tambien podemos ir al centro comercial o algún otro lugar?.
—Si iremos a muchos lugares juntos.
–Yibo sonríe y lo abraza mientras sostiene a la gata en sus brazos.–
—Te amo gege.
—Y yo ti cachorro.

Te Prometo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora