Un Golpe de Amor

24. ¿Un bebé?

#Editado

Mis ojos se sentían pesados y dejé que se cerraran cuando solté el último suspiro y dignamente caí en los brazos de Morfeo, o eso era hasta un poco más tarde cuando sentí que alguien había entrado en mi nueva habitación asignada. Por comodidades de los tres chicos Brown hoy tocaba dormir en su casa, según Hayden era porque extrañaba la casa de su tía, pero lo cierto era que casualmente su lucecita de mariposa estaba perfectamente instalada en el cuarto de Ethan.

—Giss, despierta —Alguien me susurró cerca de mí oído.

—¿Qué? —Murmuré aún dormida.

—Accidentalmente me dormí con Iván, no preguntes, pero él no dejaba de murmurar a Rayan y tampoco deja de moverse. Ahora no tengo donde dormir ¿puedo volver a dormir aquí? —preguntó cuando se estaba acomodando en la cama.

—Ya lo hiciste, no veo porque no —hablé volviendo a acomodarme.

Ella suspiró fuertemente y se giró hacía a mí. — ¿Te ha ocurrido algo similar? —preguntó acomodándose cada vez más.

—¿A qué te refieres con exactitud? —me acomodé tratando de quedar a su altura.

—No saber qué hacer cuando te gusta alguien en verdad, le mandas señales y no ocurre nada —concluyó ella en un suspiro.

—Bueno, para ser justas me encuentro en la misma situación. ¿Quién es la persona afortunada? —pregunté y ella escondió su rostro avergonzada —No estas obligada a decirme Lys —le recordé y ella volvió a mirarme.

—Casualmente cuando llegué al instituto encontré muy atractivo a Iván, pero después me di cuenta que él estaba interesado en otra persona —Admitió jugando con su cabello —En el baile conocí a alguien que era muy difícil al principio, pero luego comenzamos a hablar y a entendernos mucho mejor —Se detuvo y suspiró — Al parecer le doy cada señal para que haga algo al respecto, pero ella simplemente no lo hace —aclaró rápidamente cubriendo su rostro con una almohada.

—¿Ella? —pregunté sonriendo y la pelirroja se sorprendió a sí misma.

—Mierda —masculló —Debes prometerme que no le dirás nada a nadie —dijo mirándome directamente a los ojos.

—Por esa razón estabas con Iván —reconocí y ella asintió —Lys, prometo que no diré nada.

—Gracias —Me abrazó.

—No hay de que —Le aseguré y segundos después alguien llamó a la puerta.

—Puedes pasar —Dijo Lysa incorporándose en la cama. Iván entró con una sonrisa deslumbrante.

—¿Qué hay? —Dijo entrando a la habitación y se sentó sobre la cama.

—Iván, son las 3:15 am y dices ¿Qué hay? —Suspiré lanzándome de espaldas.

—Lo siento, me desperté y después no podía dormir —Se disculpó y yo me tapé el rostro con una almohada.

—Ustedes están con energía, yo no, me voy —Me levanté de la cama y antes de salir les dije —Los amos, no se acuesten tarde y buenas noches —Sonreí antes de arrastrarme a la habitación de Ethan, porque ahí era donde dormían los otros dos chicos.

Abrí lentamente la puerta intentando no hacer ruido y traté de visualizar su cama, estaba muy oscuro y no se lograba distinguir nada.

—¿Giss, estas bien? —Hayden habló de repente y yo di un pequeño brinco al escucharlo —Si buscas a mi primo está arriba —Apuntó desde el suelo en su cama improvisada y se dio la vuelta para seguir durmiendo.