Decir Adiós

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Natsuki caminaba sola por la noche estrellada de Konoha. Su sensei había partido de apuro con el sabio pervertido hacia alguna misión de carácter secreto. Genma estaba con su novia, Sakura estaba en el hospital y Naruto había ido a cenar con Iruka. El rubio la había invitado pero sintió que no era su lugar, quiso darles tiempo solos, Iruka había sido su maestro en la academia y sabía que el chico lo apreciaba mucho. Pronto se marcharía con Jiraiya así que era una especie de despedida para los dos.

Había intentado ir a ver a Inomi Yamanaka con la esperanza de hablar con alguien y no sentirse tan sola, pero la joven tenía una cita. Resopló con amargura, parecía que todo el mundo tenía a alguien excepto ella.

Aún no se sentía del todo bienvenida a la aldea. Nunca había tenido muchos amigos y la poca gente que conocía tenía una vida más ocupada, por lo que no le quedaba mucho por hacer mas que entrenar o leer. Pero esa noche se prestaba para estar afuera disfrutando de la brisa.

Pensaba que había estado mal al cortarle el rostro de esa forma a Asuma, pero cuando lo vio más temprano, luego de terminar de entrenar, no pudo evitar su actitud. Todavía se sentía resentida por haberle presentado esa chica a Genma, sentía que lo había hecho a propósito para separarlos, aunque sabía que estaba siendo algo paranoica y posesiva por demás.

Se sentó en una banca del parque vacío y observó el firmamento por un rato. Se sentía algo tonta por deprimirse tanto por su situación. Estaba segura en la aldea, estaba haciendo nuevos amigos, y su sensei se preocupaba por ella, la cuidaba y además le tenía confianza. Se preguntó cómo haría Itachi para soportar vivir rodeado de enemigos, completamente sólo, sabiendo que le quedaba poco tiempo de vida y estirándola para poder morir a manos de su hermano menor, para que éste limpiara el nombre del clan y pudiera volver a la aldea como un héroe y no un paria. ¿El amor por su hermano era tan poderoso? Ella tenía un hermano también, pero no lo conocía. No tenía un lazo tan fuerte con alguien como para soportar cualquier cosa como Itachi. Y eso daba lugar al resentimiento. La gente de la aldea no era culpable, pero tampoco totalmente inocente; ellos vivían seguros gracias al sacrificio de personas como Itachi y muchos tenían el tupé de despreciar a los demás.

Recordaba cómo trataban a Naruto, ella apenas era una niña y no tenía idea de nada, pero un su casa lo llamaban 'la peste Uzumaki'. Su clan tenía un profundo resentimiento con los Uzumaki, pero no entendía cómo las demás personas también lo despreciaban; era sólo un niño huérfano que siempre tenía una sonrisa enorme en su rostro. Se arrepentía de no haber hecho algo antes. Sabía que era injusto el maltrato que sufría el niño y había callado. Pensó que la vida era muy injusta y cruel. Ni Itachi ni Naruto se merecían haber sufrido tanto. ¿Todo para qué? ¿Pará qué la misma gente que los repudiaba viviera tranquila?
Recordó el plan de Itachi; volverse el ninja más fuerte del mundo para detener todas las guerras. Itachi era alguien muy inteligente pero a Natsuki le pareció que su idea era algo ingenua. Ahora que su plan había fracasado por su enfermedad terminal, sabía que pensaba que su hermano podía tomar su lugar pero, ¿y si se negaba? ¿Si aparecía alguien más fuerte? ¿Y si moría, quién ocuparía su lugar? ¿Valía la pena sacrificar todo por la paz? ¿para que las personas, todas ellas incluidas las malas personas, vivieran tranquilas? No le gustó el camino por el que rondaban sus pensamientos.

Se puso de pie para marcharse a su casa cuando vio en el suelo una ave negra. Se acercó despacio, parecía un cuervo y su corazón comenzó a bombear con fuerza.

—¿Qué estás haciendo aquí? —preguntó. El ave apenas se movía, parecía agotado. Lo tomó en sus manos y al examinarlo de cerca vio que era un pájaro común y corriente—. Ah, sólo eres un pajarito. Estás herido —murmuró al ver que tenía un ala rota.

—No creo que te vaya a responder —Natsuki se giró y vio a Sakura sonriente que venía del hospital.

—Ja, ja. No, no es de esos —respondió la pelirroja.

Relámpago Rojo Crónicas De KonohaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora