Nuestra Ciudadela

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—Hola. — Sonrió la chica frente a mi.

— Hola... — Parpadee tratando de acostumbrarme a la luz.

—Debes estar confundida sobre lo sucedido ¿Qué tal si caminamos mientras te explico lo que pasa? — Sonrió.

—Gracias, me duele un poco el cuerpo así que porfavor vayamos lento.

Asintió comprensiva comenzando a caminar.

— ¿Donde estamos? — Pregunté confundida viendo a mi alrededor.

Muchas chicas de diferentes etnias, edades... y colores caminaban por el lugar.

—Estamos en la ciudadela. — Se encogió de hombros.

—¿Cómo en Rick y Morty?

—Algo así, la diferencia es que no todos somos la misma persona y tampoco planeamos una revolución o nos creemos dios. —Dijo divertida.

— No suena a una buena idea. — Hice una mueca.

—Por ahora no, porque no te he explicado nada pero una vez lo haga entenderás.

Ella saludo a un par de chicas que me miraron y sonrieron con ternura.

— Entonces explicame.

— El mundo es demasiado grande para ser comprendido en su totalidad,  muchos creen que después de la muerte no hay nada, sólo vacío o oscuridad. Otros creen que hay luz y tranquilidad, la realidad es que hay ambas. Te diré que todas las religiones eran las correctas además de que cada una poseía una verdad que sólo podría verse si eres de mente abierta.

— Me estás diciendo que morí. — Dije escéptica.

— Así es, ese dolor que sientes es solo un recuerdo de lo que te pasó. No se específicamente como lo hiciste pero sucedió. — Revolvió mi cabello.

— Vaya y yo pensaba que sería como Tom y Jerry en donde tenía que decir mi nombre y registrarme.

—También sucede así pero hay casos diferentes.

— Como lo soy yo. — Me Señale a mi misma confundida.

— En efecto, este lugar es donde nos reunimos todos y todas quienes tenemos la misma oportunidad que tu. El multiverso es enorme y mejor aún no es único, cada chica que ves aquí caminando viene de un universo diferente.

—... — Me quedé callada procesando la información.

— Existen diferentes tipos de reencarnadas o transmigradoras cada una va a un lugar diferente y decide como ser...

Interrumpí. — ¿Y si decide ser mala y destruir todo? — Alce un ceja.

—Pues que lo haga. — Sonrió contenta.

—¿Disculpa? ¿Cómo que "pues que lo haga? ¡Podría destruir todo! — Grite molesta.

— Si así quiere vivir ella, que así lo haga.

— Tu concepto esta mal. — Negué con la cabeza. — Deberían detenerla y solo darle las oportunidades a las buenas personas.

—Tu eres la que está equivocada. — Tomo mi mano comenzando a caminar de nuevo. — ¿Por qué deberíamos entrometernos con sus decisiones? En la vida como dices hay personas buenas y malas pero ¿Y que? ¿Por eso no podemos tener una segunda oportunidad?  Nosotras no tenemos porque meternos en la decisión que tomo para poder comenzar a vivir, para ser libre. Ellas en su antigua vida pudieron ser tímidas y rechazadas y en la siguiente ser valientes y sobresalientes, pudieron ser buenas personas que jamás quisieron serlo pero no podían ser libres así que en su segunda oportunidad decidieron probar lo que era la maldad, la oscuridad, pudieron ser malas personas y en la siguiente ser lo menos llamativas posibles... — Sonrió encantadora. — Cada quien tiene derecho a decidir como ser y como actuar, si nosotras intervenimos seria como decirles que no importa lo que hagan tienen que ser como alguien lo predispuso.

One - ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora