After Death

Orpheum

Viernes

Día del Orpheum

parte 3

-Vaya... así que por eso quieres que los deje libres.-me di vuelta para ver de quién era la voz.-¿sabes? cuando me dijiste que cantabas, creí que solo lo decías por... ya sabes, para que aceptara el trato.

-¿Qué haces aquí?

-¿Hoy vienes conmigo no?

-Necesito tiempo.

-¿Tiempo?-rio irónico.

-Necesito hacer algunas cosas antes de ir contigo.

-¿No estarás pensando en cruzar, cierto? Porque ya sabes lo que pasa si no hay trato entre nosotros.

-No.-negué con mi cabeza.-no voy a cruzar, pero necesito un tiempo más... dame dos meses, solo dos meses.

-¿Dos meses?-asentí a lo que él volvió a reír.- es ridículo, con suerte te daría dos semanas.

-Me iré contigo de todas formas, solo dame dos meses, por favor.-Caleb se me quedó mirando unos segundos, probablemente pensando en lo que le había dicho.

-Dos semanas.

-Solo dos meses, por favor.

-Dos semanas.-repitió.-suspiré exasperada.

-Un mes.-solté de pronto.-solo son dos semanas más de las que me estabas dando, pero un mes menos de lo que te estoy pidiendo, ganas más tu que yo.-Caleb me quedó mirando.

-Que gran negociante.-me sonrió.-todo un diamante en bruto ¿no?-me quedé en silencio, él me sonrió y se fue caminando, entrando al Orpheum.

Me quedé estática en mi lugar mirando la dirección que ahora había tomado Caleb. 

Tenía un mes más.

Suspiré y di unos pequeños brincos, como si estuviera botando la mala energía y al mismo tiempo dándome ánimo. Entré por la puerta por la que había entrado Luke hace unos minutos y comencé a caminar hasta el camerino, suspiré una vez más cuando estaba afuera y entré.

-Hola.

-¿Te sabes la canción cierto?-me preguntó Reggie en cuanto entré.

-Yo la escribí y... los he escuchado tocarla todos estos días.

-¿Eso es un sí?-volvió a preguntar.

-Sí.

-Te estábamos esperando ¿Dónde estabas?-preguntó Alex.

-Oh am... estaba viendo a la otra banda.-solté una risita.-¿por qué, qué pasó?

-Necesitábamos saber si te sabias la canción.-me respondió.

-Ya estamos por salir.-dijo Luke recargándose en sus piernas con los codos, mientras me miraba.

-Está bien ¿Cómo estás, Julie?-ella miraba la conversación que manteníamos, sin poder hacer una acotación. Se limitó a asentir con una mueca.

-Bien.-dijo con voz bastante ronca y apenas audible.

-No hables, es peor.-Julie volvió a asentir.

-¿Julie?-tocaron la puerta y luego se abrió, dejándonos ver a la amiga de Julie.

-Creo que ya están por salir ¿has visto la chica que cantó contigo? la estamos buscando, pero no la hemos visto.-Julie negó con su cabeza.- Bueno am... falta poco para que salgan.-fue lo último que dijo antes de salir.