After Death

cd's

Sentía que mi corazón comenzaba a latir más fuerte de lo que debería, por su comentario.

-¿Conmigo?

-En el lugar en el que estabas.

-Ah.-dije tan suave que estaba segura que Luke no había escuchado y solté una risa nerviosa.

Luke había comenzado a mirar las fotos que habían en la casa de mis abuelos, yo lo único que quería era que parara antes de que se encontrara con la foto en la que aparezco en pañales; mi explicación que es yo tenía como 3 años, quizás 2, y decidieron tomar una foto a los primos, porque fue de esas veces en las que toda la familia llegó a la casa de mi abuela, por lo que estábamos todos los primos, así que decidieron sacar una foto improvisada de los primos, justo cuando yo solo andaba en pañales y mi mamá tampoco se molestó en terminar de cambiarme.

-¿Ellos son tus padres?-lo miré, miré la foto que tenía en su mano, aparecíamos mis padres y yo.

-Sí.

-Te pareces mucho a tu mamá.-sonreí, siempre me lo decían.

-Sí, lo sé.-él dejó la foto en su lugar y se sentó en el piano, junto a mi.

-¿Por qué nos dijiste que no cantabas?-hice una pausa, no sacaba nada en darle excusas baratas, o mentir, de todas formas se enteraría algún día.

-¿Sabes qué es lo que más les gustaba a mis padres?- no respondió, solo me miró.- cantar. Hacíamos karaoke, todos los fin de semanas en el garage.

-Pero eso... debería ser lindo ¿no?

-Sí, pero... eso también eso hizo que murieran... muriéramos-corregí al final. Luke no dijo nada, era difícil para otra persona entender a lo que me refería, pero él no hizo ninguna pregunta.

-No es necesario que me lo cuentes, si no estás lista, tranquila.-miré directamente a sus ojos, él miraba los míos y nos quedamos así por unos segundos, sentí que el corazón volvía a latir más fuerte de lo normal y desvié la vista hacia el piano.

-¿Cómo les fue en su concierto?

-Eh... bien.-rió.- no sé si lo llamaría concierto, pero bien. Julie se quedó allá, con Flynn.

-¿Y los chicos?

-También. Yo te fui a buscar al garage, porque al final no nos fuiste a ver.

-Lo siento.-reí ante su queja.- estuve un poco... ocupada.

-Entiendo...feliz cumpleaños, por cierto.- dijo luego de una pequeña pausa, lo miré confundida.- A Julie se le salió, pero fue sin querer, estaba un poco preocupada y cuando le preguntamos nos dijo que no quería que estuvieras sola este día, así que volvimos a preguntar por qué.

-Y les dijo que era mi cumpleaños.

-En realidad nos dio algunas excusas, hasta que logramos que nos lo dijera.-asentí con mi cabeza, indicando que entendía.

-Voy a ir a cambiarme.-solté luego de unos segundos de silencio y  me levanté. 

Vi que luke me iba a hablar, pero se detuvo en cuanto me levante, me quedó mirando por un instante.

-Te... te ves... bien.-sonreí levemente ante su nerviosismo, pero también sentí que la cara me comenzaba a arder un poco, indicándome que me había sonrojado, por su halago.

-Gracias.

-Te espero aquí.

-Claro.-caminé hasta el dormitorio y me cambié a la ropa que estaba usando anteriormente, guardando todo lo que saqué en su lugar. Cuando iba a abrir la puerta, apareció Luke frente a ella, a punto de tocarla.

-Creo que tus abuelos llegaron.

-¿Y? no te ven.-pero él me ignoró olímpicamente y entró a la habitación.

-¿Es tu habitación?

-En realidad es una habitación de uso familiar, un cuarto de visitas, pero la solía ocupar yo, por eso tiene mis cosas.- Luke comenzó a mirar las cosas que tenía en mi habitación, era una habitación tan normal como cualquiera, pero a Luke le pareció que merecía ser inspeccionada.- sí, claro, tómate el tiempo que quieras.- dije irónica y me senté en la cama.

-Tienes muchos cd's.

-Algunos son de mis padres también, no son solo míos.- le respondí. Luke no me respondió, escuché el ruido de cuando los cd's chocan, pero no alcanzaba a ver lo que pasaba ya que su espalda me tapaba la visión. Se giró con un cd en sus manos y me miró.

-¿Izzy?... el diario era para... o sea este cd es...- su cara de sorpresa pasó de la cajita hasta mi.-¿es tuyo?-preguntó refiriéndose al cd. Mordí mi labio levemente y suspiré.

-Sí, es mio.-Luke en un día descubrió prácticamente lo que llevaba escondiendo hace semanas, igual que Julie.

-¿Eras cantante?

-No.-dije obvia.- o sea... no lo sé, yo... no era como Ariana Grande o Selena Gomez.

-¿Como quién?-preguntó confundido.

-No importa. Yo cantaba en algunos clubes... así como ustedes ahora.-le di un vistazo rápido a Luke y me tendí en mi camita. Sentí nuevamente el sonido de los cd's chocando, pero no miré, supuse que Luke lo estaba guardando. Sentí un peso al otro lado de la cama, él se había sentado.

-¿Puedo?-me limité a asentir con mi cabeza y él se tendió junto a mi.-el que no hayas querido cantar ¿tiene que ver con esto?- volví a asentir con mi cabeza.-supongo que tu muerte también.- dijo más para él que para mí, como si se estuviera haciendo un mapa mental de lo que estaba pasando.

-Sí.- respondí tan despacio que quizá ni siquiera me había escuchado, pero por el silencio que había en a habitación, probablemente sí. El silencio inundó la habitación, ninguno de los dos hablaba.-perdón.-solté de repente. Escuché el sonido del roce de la cabecera cuando Luke giró su cabeza hacia mi.

-¿Por qué?

-No los quería molestar con mis problemas, por eso tampoco les conté nada.

-No me estás molestando.- lo miré.-escúchame, jamás... jamás.- remarcó el segundo jamás.- serás una molestia para mi, ni tú, ni tus problemas... y supongo que para los chicos tampoco.- me quedé mirando su rostro unos segundos.

-Gracias.-le sonreí y ambos volvimos a mirar el techo en silencio.- Ellos me acompañaron a cantar a otra ciudad.-solté de repente luego de un rato de silencio, refiriéndome a mis padres.- Tuve la oportunidad de ir a cantar a un par de clubes a otra ciudad, pero me dio miedo ir sola, estaba demasiado nerviosa, así que ellos fueron conmigo...cuando volvíamos a casa nos cruzamos con un conductor ebrio en la carretera, él perdió el control del auto...mi papá trató de esquivarlo, pero no funcionó... al final caímos por un barranco.-sentía las lágrimas caer por mis mejillas.

-Ven.- Luke pasó uno de sus brazos por encima de mi cuerpo y me atrajo al suyo, para poder abrazarme y yo me acurruqué en su cuerpo, sin dejar de llorar, pero más silenciosamente.

Me estaba comenzando a sentir segura junto a él. Sin querer, por la cercanía de nuestros cuerpos, aspiré su olor,  lo que llevó a que me comenzara a ponerme nerviosa, y fue exactamente en ese momento en el que me di cuenta que, al parecer, estaba comenzando a sentir cosas que quizá no debería sentir.