¿𝑸𝒖𝒊𝒆𝒓𝒆𝒔 𝒈𝒂𝒏𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒆𝒔𝒆 𝒅𝒊𝒆𝒛, 𝑳𝒐𝒖𝒊𝒔? •T.1• (L.S)

|27|

"Rumores"

❀

Narra Harry:

Caminaba hacia la entrada del instituto, me encendí un cigarrillo tras otro mientras dejaba atrás aquel largo camino de pinos. Me había pasado las últimas dos semanas ocupado en elegir muebles para la nueva casa, contraté un diseñador de interiores; el cual era padre de una de mis estudiantes, Lara Lynn, pero no había de otra ya que Jhonny Lynn era el mejor en su trabajo. Un automóvil estaba esperándome en el aparcamiento de afuera, nos dirigíamos a Cheshire, donde íbamos a vivir una vez que estuviésemos fuera de éste lugar. El lugar tenía más de cien hectáreas, y en la cual pagué por construir una mansión de mil ciento quince metros cuadrados, era como un castillo, uno en el que viviría con mi príncipe. No podía esperar más para llevar a Louis allí, que decidamos qué mascotas tener, poder estar juntos y a salvo, que durmamos en nuestra propia habitación.

—Buenos días, señor Vitale. —saludó Jack, mi chófer.

Sólo asentí mientras revisaba mi celular, me subí al auto y rápidamente nos introducimos en el tránsito. Al llegar a un edificio en la ciudad de Doncaster, para poder usar mi helicóptero, habían dos guardias en la entrada esperándome, me parecía algo extraño.

—Señor Vitale, su padre lo espera en Londres. —anunció uno de los guardaespaldas.

Cerré mis ojos un momento, mis planes tendrán que esperar por el momento. Asentí y me introduje en el edificio, seguido de los dos hombres, tomé el ascensor que me dejó en la terraza, al llegar ya estaba todo preparado para realizar el viaje a Londres.

Aterrizamos sobre otra terraza, esta vez en mi lugar de destino, era uno de los edificios Vitale. Un hombre me recibió y casi ignorándolo me subí al ascensor, para mi suerte no debía esperar demasiado ya que era en el piso de abajo. Los dos guardaespaldas seguían detrás de mi como un par de sombras, no me habían dejado solo ni un minuto. Al llegar a la habitación indicada por uno de ellos, me encontré a mi padre sentado en su sillón, frente a su escritorio, tenía un vaso lleno de Ron y estaba fumando un puro.

—Llegué. —rompí el silencio.

Me senté frente a él en una de las sillas que yacían delante de su escritorio. Alzó su mirada hacia mi.

—Seré breve, muchacho. —soltó un suspiro acompañado con algo de humo —Ha llegado a mis oídos la noticia de que ya saben que has tomado mi puesto jerárquico, así que necesitarás dos guardias, con el idiota de Jack no es suficiente. Serás el señor Vitale hasta que pueda dar con el hijo de puta que quiere robarnos el territorio a nosotros. —sólo era mi padre declarándome oficialmente como un señuelo —Desconfía de todos, necesito que cuides a tu noviecito, ya que, como te imaginarás, lo usarán como carnada. —frunció el entrecejo, bebió de un trago el contenido de su vaso. Tenía razón, Louis estaba en peligro. 

Encendí un cigarrillo.

—Bien. —asentí, me levanté de la silla y me dirigí a la puerta.

—Cuídate, hijo. —ignoré sus palabras, atravesando el umbral de la puerta, tenía que llegar a Cheshire.

El ascensor parecía tardar más que nunca, al llegar al helicóptero no tardó mucho tiempo en emprender vuelo. Cuando bajé del vehículo había otro automóvil esperándome, llevaba dos sombras detrás; no estaba acostumbrado a tener guardaespaldas. No demoramos mucho en llegar a la casa, Jhonny y su hija me esperaban en la sala, sólo quedaban los últimos detalles. Ella nos sirvió té, y el hombre continuó revisando el enorme libro que llevaba en sus manos.