🔽Capitulo 28 - Comandante🔽

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El calor que emanaba de Mat era rara, los lepindungs se quedaron observando mientras comenzaban a sudar el sujeto frente a ellos no parecía inmutarse mientras el calor subía, el propio antifaz de Mat cambiaría a un tono más amarillento.

Mat: Alejense lo suficiente para usar magia de apoyo, no quiero que nadie se acerque.

Mat hizo girar su katana y acto seguido atacó haciendo un dash con una gran velocidad, el comandante lo esquivó con rapidez moviendose a un lado mientras el duo de magos lanzaban bolas de fuego.

El comandante desvió aquellos ataques usando magia de viento por lo que Mat moviéndose rápidamente golpeó al comandante con un puñetazo y luego haciendo un corte rápido con la katana para dañarlo mientras daba un salto para atrás para así mantener distancia, parte de la túnica y el traje por el costado se dañaria dejando ver un poco de la piel del comandante.

Este respondió lanzando magia de hielo hacia Mat impulsados por magia de viento.

Mat: ¡Tch!

Poniéndose en posición, Mat dio cortes rápidos al hielo para hacerlo añicos, mientras que los magos seguían curando a Sparta este pudo levantarse con dificultad para ver a Mat.

Sparta: Vaya... Le va bien sin nosotros.

Lepindung pacífico: Es normal, no por nada es el pelindung principal de nuestro reino, no esperaba menos.

El comandante al ver la habilidad de Mat creó una barrera alrededor suya para defenderse de los ataques de Mat y preparar un hechizo poderoso, Mat dio varios golpes para romperla, siendo estos ataques rápidos y fuertes.

Mat: ¡No puedes mantenerla para siempre!

En eso los lepindungs del reino local y pacífico se unieron para golpear la barrera.

Gracias a eso, se empezaba a destruir poco a poco, para ser rematada por un ataque cruzado de ellos dos a lo que los lepindungs mago rápidamente atacaron con hechizos de rayo y fuego.

Pero fueron repelidos por el hechizo del comandante que acabo de recitarlo, este sería una explosión a su alrededor de un viento arrasador que mandó a volar a los lepindungs mientras que Mat retrocedía unos pasos ya que había clavado su katana en el suelo para mantenerse.

Una vez cesado el ataque el comandante se quedó observando a Mat quien se puso firme empuñando su katana.

Mat: Ja... Buen viento... Pero faltará más que eso para desacerte de mi, seré joven aun pero no significa que sea débil.

Rápidamente Mat volvió al ataque contra el comandante, yendo más rápido que hace un rato obligando al comandante a retroceder.

Este último trató de convocar hechizos pero la velocidad de Mat le permitió esquivarlos e impedir que los convoque.

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