Cry With Me

Forever & Always pt. 2

2 meses antes de la boda

- ¡Ningún vestido me queda bien! ¡No tengo vestido, Malina! - grite angustiada.

- Millie, tranquila. Solo llevamos 1 hora aquí. Seguro que encontrarás un vestido muy pronto.

La miré para posteriormente mirarme en el espejo.

- No lo entiendes, la familia de Romeo es la familia mas perfeccionista que he conocido en mi maldita vida. Todo tiene que salir perfecto, y eso incluye mi vestido. - le dije para después dejarme caer en el sillón situado en el probador.

- Todo saldrá bien, pero para que eso ocurra tienes que relajarte. Relajarte de verdad. - hizo una pausa para mirarme a los ojos. - si hay amor todo saldrá bien.

Alcé una ceja confusa.

- ¿Qué quieres decir? ¿insinúas que no lo quiero?

Ella niega

- Solo te pregunto si no estás yendo demasiado rápido.

- No.

- comenzaste a salir con él porque...

- ¡No sigas! Ya se por que comencé a salir con él, pero eso no tiene nada que ver. Lo quiero.

Malina se encoge de hombros para posteriormente asentir.

- Está bien.

- Genial, ahora ayúdame a comprar este maldito vestido.

1 mes antes de la boda

- ¡Millie! - alguien me llamó mientras que cogía las llaves del coche de mi bolso.

Me giré lo más rápido que pude para después suspirar.

- Hola Sadie.

Ella sonrió emocionada por verme, supongo.

- ¡Estas preciosa! ¡totalmente preciosa! Me atrevería a decir que es la primera vez que te veo con un vestido.

- Si, lo sé.

La pelirroja cerró los ojos unos segundos para después abrirlos.

- Te he llamado, pero cambiaste de número. - asentí. - solo quería... disculparme. Fui una cabrona y te debo una disculpa. Una disculpa muy grande.

No sabía que decir. Había esperado tanto tiempo que me diera una disculpa verdadera que cuando la tuve no supe que decir o hacer.

Sentí como si ese momento que tanto tiempo había estado esperando hubiera llegado antes de tiempo.

- ¿Podrías perdonarme?

Débilmente asentí.

- Ha pasado mucho tiempo Sadie.

- Y eso lo hace peor. Que me disculpe tan tarde. - hizo una pausa. - hace unos meses Jaeden murió... entonces comprendí que algunas veces crees que tienes todo el tiempo del mundo pero no realmente, así que debes aprovecharlo y hacerlo lo mejor que puedas con las personas que aún están aquí.

Seguí sin saber que decir, pero esta vez la abracé por algún motivo que aún desconozco.

Sabía que Jaeden era su otra mitad y una de las personas a las que más quería en el mundo. Por eso mismo me sentí tan mal cuando me dijo que había muerto.

Me sentí aún peor al darme cuenta de que alguien que algún día fue mi amigo cercano estaba muerto, y yo no me había enterado.

- lo siento mucho. - susurré